IDENTIDAD DEL VOLUNTARIADO JUVENIL SALESIANO:
Don Bosco vivió en Valdocco una experiencia plena de vida, con jóvenes y adultos dispuestos a trabajar con él.
Esa vivencia comunitaria, ilumina de manera profética y carismática las actuales experiencias del Voluntariado de la Familia Salesiana y otras similares en la Iglesia.
1.- EL VOLUNTARIO SALESIANO:
Es un laico/a que libremente orienta toda su vida hacia los fines de la solidaridad.
Se pone al servicio desinteresado de los jóvenes y clases populares, con atención prioritaria a los “últimos”, en la línea de la Misión Salesiana y/u otras urgencias de la Iglesia.
Promueve una respuesta competente, creativa y continuada a las necesidades emergentes del territorio, con iniciativas de educación y promoción humana, en colaboración con otras instituciones civiles y eclesiales.
Con visión evangélica y corazón Oratoriano, vive el Sistema Preventivo de Don Bosco, inspirándose en las líneas de la Espiritualidad Juvenil Salesiana.
Se propone una acción transformadora en la sociedad, descubriendo y combatiendo las causas de la injusticia.
Presta su servicio generoso preferentemente en una Comunidad Salesiana u otra Comunidad Religiosa, con otros seglares comprometidos, desde una estructura organizada.
2.- DIMENSIONES DEL VOLUNTARIADO JUVENIL SALESIANO:
LAICAL:
Opera en las actividades temporales con el aporte original de sus capacidades y profesionalidad.
JUVENIL:
Vive su servicio como joven y con espíritu juvenil
Se dirige a los jóvenes, preferentemente “en riesgo” y a las clases populares, con estilo cercano a los destinatarios.
EDUCATIVO:
Vive esta experiencia como camino de maduración humana.
Se integra a los programas destinados preferentemente a la educación de las personas.
Inspira su actuación con estilo educativo salesiano.
4. SOCIO - POLÍTICO
Se comprometo en la transformación de la realidad, actuando eficazmente a la remoción de las causas y proponiendo modelos alternativos concretos.
5. EVANGELIZADOR:
Movido por una visión de fe, lleva adelante sus compromisos actuando por motivaciones abiertas a la
dimensión religiosa.
Hace una opción “cristiana” por la educación-promoción o sea para educar evangelizando y
evangelizar educando.
COMUNITARIO:
Viven en grupo con otros miembros de una Comunidad u otros voluntarios o seglares comprometidos.
Se ubica dentro del un proyecto educativo pastoral local, acogido y compartido, en comunión con las opciones pastorales de la Comunidad Inspectorial y/o Diocesana.
Está abierto al diálogo intercultural e interreligioso, con mentalidad eclesial.