2 / Boletín Salesiano
Equipo
Director Responsable Ángel Leonídas Amaya. Director Ejecutivo Juan José Chiappetti. Consejo de Dirección Mercedes Baxzos, Ricardo Cámpoli, Eduardo Devit, Ricardo Noceti,
Valentín A. Presern, Jimena Zaeta. Redacción y edición Ezequiel Herrero, Santiago Valdemoros. Administración Natalia Vidal. Distribución Martín Sartorio. Audiovisuales Melina
Martínez. Colaboraron en este número José Miguel Barriento, Lucas Mirabet, Eduardo Devit, Ricardo Noceti, Victorino Zecchetto, Marcos Aguirre, María José Serna, Eduardo Meana,
Martín Gómez Rocha, Juan Gussalli, Mercedes Baxzos, Adrián Botta, José Luis Gerlero, Filiberto González Plascencia, Mariana Peña, Cecilia Rey, Pablo Rozen, Alejandro León, Oscar
Marsano.Diseño Carolina Cugliandolo / carolina@cdldesign.com.ar, Marisabel Bernachea Fotografía Alberto Calle, Diego López, Melina Martínez, Nicolás Mirabet, Santiago
Valdemoros Impresión Formacolor Impresores, Camarones 1768 (CABA).
Periódico mensual de la Familia Salesiana y amigos de Don Bosco en Argentina. Fundado en Turín por Juan Bosco en 1877. Don Bosco 4053 (1206) Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, República Argentina. Tel/Fax: (54 11) 4981-0777 / 4982-3748. Registro Nacional de la Propiedad Intelectual Nº 5090841. Propietario: Institución Salesiana.
Publicación de uso pastoral. Los trabajos firmados son de exclusiva responsabilidad de sus autores. Se autoriza la publicación del material editado en esta revista citando
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Sumario
Noviembre de 2013 - Nº 698
04. Nota de tapa: la Misión Salesiana de Río Grande
08. Vacaciones, un tiempo para ser nosotros
10. Trabajar en red por los jóvenes
12. Lectura orante salesiana del Evangelio cotidiano
13. Reflexiones sobre las crisis de la fe
14. ¿Por qué los cristianos rezan por los muertos?
16. ¿Quién canta piedra libre en Adviento?
18. Del Rector Mayor: “Ser fieles a nuestro estilo
de educar”
20. Ganadores del Concurso Literario 2013
21. Nuevas canciones de Eduardo Meana
22. Noticias de la Familia Salesiana
27. Muro: MJS San Antonio de Padua
(San Vicente, ciudad de Córdoba)
28. Clips para compartir: Bienaventurada Navidad
30. Emepetres: Es preciso (Arbolito)
31. Los que aprendieron con Don Bosco:
Santiago Costamagna
04. 8. 16. 18.
Correo
de lectores
Fallecimiento del padre Pablo Dell’Agnolo , sdb
Sr. Director:
“¿Y tu qué opinas, pues?...¿Has visto mis trigales,
Señor?¿Has visto mis viñedos?¿Has visto la hermosa luz
sobre mis valles serenos?”
El padre Pablo fue un hombre fiel, compañero, conse-
cuente, puro. Él y Fortín Mercedes se confunden en esto
de ser faro, referencia y descanso. Hoy, en su diálogo con
Dios Padre estará indagando hasta dónde lo agradó con
su vida y su trabajo, y a cuántos les cambió la vida con su
testimonio.
Un acompañamiento sincero por la partida de uno de los
más sobresalientes seguidores de Don Bosco.
Familia Scarpino Gullino
Haedo, Buenos Aires
Caminando a Luján
Sr. Director:
El mes pasado pude participar de la Peregrinación Juvenil
a Luján. Ya van varios años que lo hago, pero los motivos
fueron cambiando: desde pedir para que Ferro salga cam-
peón, cuando era más pibe; a agradecer profundamente
por el milagro más grande que ha hecho Dios en mi vida,
que es el nacimiento de mi hija Lucila, en mayo.
Quería compartir dos sensaciones que viví en este año.
En primer lugar, resaltar la gran cantidad de gente que
ha participado de la peregrinación. Los noticieros al día
siguiente hablaban de más de dos millones de personas,
y aunque sé que este dato no se puede comprobar, per-
mítame decirle que la diferencia con años anteriores fue
notoria.
Por otra parte, como soy exalumno salesiano, sabía que
más o menos a la altura del puente de Rodríguez, llegando
casi a la Basílica, me iba a encontrar con los jóvenes del
Movimiento Juvenil Salesiano, que todos los años prestan
servicio como voluntarios. Y así fue: en el momento en
que estaba al límite del cansancio, los chicos del MJS me
sorprendieron con sus canciones, con un sabroso vaso de
mate cocido, y con la atención muy comprometida a una
de las chicas que caminaba en mi grupo.
Me gustaría poder motivar la participación de todos, chi-
cos y jóvenes, en esta actividad que nos propone la Igle-
sia, y que cada uno haga su experiencia, como yo lo hago
desde hace tiempo.
Un abrazo grande.
Federico Díaz Solís
Caballito, Ciudad de Buenos Aires
Don Orione en Valdocco
Sr. Director:
Quería felicitarlo por la publicación del artículo sobre la
estadía de Don Orione en Valdocco que salió en el número
de octubre de su revista. Conozco la obra de Don Orione
desde hace muchos años, y no sabía de su cercanía con
Don Bosco. No deja de sorprenderme la humanidad y cer-
canía del relato de Luis Orione, que me hace recordar a las
anécdotas que mis padres contaban de su vida en Italia.
Se nota que la propuesta de ambos santos encuentra su
fundamento en la austeridad y la sencillez de corazón,
para vivir el Evangelio en el amor a los más pobres y aban-
donados.
Lo saluda agradeciéndole el envío que mes a mes realizan
de su revista, que es una gran compañía.
Lidia C. de Fernández
Ciudad de Córdoba
Agradecemos que nos envíen sus comentarios a lectores@boletinsalesiano.com.ar o a Don Bosco 4053 (1206) Ciudad Autónoma
de Buenos Aires. Solicitamos que todas las cartas contengan nombre y apellido, lugar de residencia y contacto de quien la firma.
“Tú eres el que está
a la puerta y llama”
Distribuye
EDBA
Nuevas Canciones
de Eduardo Meana
4 / Boletín Salesiano
En la provincia de Tierra del Fuego, la Misión Salesiana es testigo y protagonista
de la historia de la ciudad de Río Grande desde finales del siglo XIX
Un “faro” donde
comienza el mundo
Quien llega hasta aquí se encuentra con un lugar en ebullición.
Río Grande, la ciudad más poblada de la provincia de Tierra
del Fuego, recibe todos los años a miles de personas que se
vienen a instalar buscando oportunidades de trabajo en las
fábricas recientemente radicadas. Nuevos barrios, nuevos de-
sarrollos y nuevos desafíos. La ciudad y su población cambian.
En ese contexto, si uno se quiere orientar, no tiene más que
mirar hacia “la Misión”, la obra salesiana que acompaña a la
localidad incluso desde antes de su fundación.
“Llegaron tarde”
“Para la gente de Tierra del Fuego, este lugar es ‘la Misión’.
Tenemos que pensar que cuando llegan los salesianos, Río
Grande no existe, sólo había algunas concesiones de tierra a
unos pocos estancieros terratenientes”, explica la profesora
Graciela Pesce, quien desde el año pasado es la directora ge-
neral de la obra.
El reflejo de la historia, intentando reconstruir la vida des-
de aquellos primeros años, se puede encontrar en el museo
Boletín Salesiano / 4
Por Santiago Valdemoros • redaccion@boletinsalesiano.com.ar
Monseñor Fagnano realiza
numerosos pedidos de
intervención a favor de los
aborígenes, tanto al gobierno
argentino como al chileno, sin
obtener respuesta.
Boletín Salesiano / 5
Un “faro” donde
comienza el mundo
“Monseñor Fagnano”, reinaugurado en 1997. Julio, su respon-
sable, cuenta que “los padres salesianos se van dando cuenta
de que deben dejar constancia de la vida de los aborígenes nati-
vos de este lugar puesto que éstos corrían el riesgo de desapa-
recer”. Y efectivamente, así es como sucedió. “Los salesianos
llegaron tarde”, suelen repetir por acá, ya que al momento de
instalarse en la zona, en 1893, la situación de los aborígenes
era ya muy lamentable: mercenarios que los aniquilan en ver-
daderas “cacerías”, el cercamiento de sus tierras y las enfer-
medades estaban acabando con ellos. Los salesianos intentan
intervenir en favor de su bienestar; monseñor José Fagnano,
quien de joven había vivido con Don Bosco en el oratorio de
Valdocco, desde la ciudad chilena de Punta Arenas va dirigiendo
el asentamiento de los religiosos, trayendo también a las Hijas
de María Auxiliadora. Intentan llevar adelante una propuesta de
“reducción”, donde los selk’nam u onas, los habitantes de estas
tierras, puedan vivir a resguardo de los terratenientes. Son mu-
chos los pedidos de intervención a favor de los aborígenes que
Fagnano realiza tanto al gobierno argentino como al chileno, sin
obtener respuesta.
Ya bien entrado el siglo XX, la población de los selk’nam había
descendido considerablemente, y los salesianos se convierten
en testigos de la historia y ocaso de este pueblo de cazadores
de guanaco de la estepa fueguina.
Cambia la ciudad, cambia la Misión
En 1946, frente a la desaparición de la población nativa, la obra
se transforma en una escuela agrotécnica. Con alumnos pupi-
los, empieza a recibir a decenas de chicos que vienen de toda
la Patagonia Austral. “Era una de las tres escuelas secundarias
que había de Comodoro para el sur. Yo vivía en Puerto San
Julián, en Santa Cruz, y a los catorce años me ofrecieron venir
para acá. Y cuando uno es joven tiene cierto espíritu aventurero,
¿no?”, relata Luján Muñiz, quien había ingresado como alumno
en 1955 y luego se quedó trabajando en la escuela —es el pri-
mer personal laico de la obra—, hasta jubilarse a principios de
la década del noventa. Los chicos pasaban largas temporadas,
dadas las distancias que los separaban de sus familias. Sin co-
municación telefónica con el continente, el aislamiento era un
factor importante. “Cuando escuchábamos ruido de avión, el
cura se acercaba a la ventana y le pedía a alguno que saliera
a buscar el diario. Era el DC-3, que cuando pasaba cerca de la
Misión volaba bajo para dejar el diario y el correo que venía de
Buenos Aires”, cuenta Luján.
Por aquellos años, tan sólo algunos radioaficionados mante-
nían comunicaciones con el resto del país. Uno de ellos era el
padre Muñoz. Con ayuda de sus alumnos, logró montar en la
década del sesenta la “LUX38”, la radio de la Misión. “Teníamos
un generador, que funcionaba un par de horas al día —recuer-
da Luján— ¡Había que tener polenta para hacerlo arrancar! En
"Cuando escuchábamos el avión,
salíamos a buscar el diario
y el correo que llegaba
de Buenos Aires"
El padrE José Zink Es casi una lEyEnda
En la Misión. “TEnía un carisMa
Muy EspEcial, pudo abrir coraZonEs
cErrados. Era un rEfErEnTE —
coMEnTa GusTavo biGGio—, Muy
rEspETado En las EsTancias por El
pEón, por El puEsTEro. El ‘cura
Gaucho’ coMparTía con la GEnTE quE
EsTaba sola, quiZás con una láGriMa,
y con la nEcEsidad dE sEr Escuchada”.
un sEcTor dE la ruTa nacional 3,
al iGual quE nuMErosas insTiTucionEs
dE la Zona, llEva su noMbrE.
6 / Boletín Salesiano
esos momentos transmitía la radio, y los domingos casi todo el
día. En el año ‘62 salió al aire en forma provisoria, y siendo la
primera de Río Grande”. La radio cumplió una función signifi-
cativa en el desarrollo de la región. Por ella circulaban desde
los avisos laborales hasta los pedidos de medicamentos, y era
el medio de comunicación con las familias de los alumnos de
la Misión. “Había gente que tenía discos, entonces en la radio
se iban pidiendo y se distribuía la música a toda la ciudad”,
detalla Luján. En 1973 el Estado llega a la isla con una estación
de Radio Nacional. “Entonces los salesianos deciden desar-
mar la radio de la Misión. Si hay quien viene a hacer, nada
mejor que dejarle lugar. Es una constante de los salesianos
aquí: dar el puntapié inicial para que otros sigan”, resalta el
profesor Gustavo Biggio. Él creció en la obra salesiana del ba-
rrio de La Boca, en Buenos Aires, y hoy se desempeña como
vicerrector de la Misión. “Vine como muchos argentinos para
conocer. Me enamoré de la Patagonia, y me quedé. Acá pisás
tierra virgen, muy salesiana, santificada por todos los que nos
precedieron”.
Polo productivo y de innovación
“Con la ley de promoción industrial en la década del ’70, Río
Grande tiene una explosión demográfica. Miles de familias se
trasladan a vivir a la isla”, comenta la directora, Graciela Pesce.
En esos años empieza a haber alumnos externos: chicos que
viven en la ciudad y que todos los días recorren los quince kiló-
metros que la separan de la Misión. Con el tiempo va aumentan-
do la cantidad de alumnos externos, hasta que en la década del
noventa se egresa la última promoción de pupilos, y se incorpo-
ran a la vida de la escuela las mujeres.
Hoy la Misión continúa siendo una escuela agrotécnica, con al-
rededor de cuatrocientos alumnos. “Es un polo productivo de
alimentos para la provincia, en muchos casos a la vanguardia
tecnológica frente a las estancias privadas de la región”, detalla
Graciela. En sus dos mil quinientas hectáreas —y otras tantas va-
rios kilómetros al norte— desarrolla un sinnúmero de sectores di-
dáctico productivos, una sorprendente diversidad para lo que son
las rigurosas condiciones climáticas de la región, con inviernos
con ocho horas de luz y mínimas de hasta veinte grados bajo cero.
“Tenemos producción vegetal y animal —detalla Sergio Astorga,
coordinador de las secciones productivas—. Son muy famosas
en Río Grande las frutillas de la Misión. Además, se produce el
forraje que sirve de complemento para la alimentación del ga-
nado”. La escuela cuenta con un gigantesco invernadero de casi
una hectárea, donde las frías temperaturas del exterior no son
problema frente a sus poderosos calefactores.
La producción animal es muy variada. En la Misión nacen, se crían
y se faenan cerdos para la producción de carne y embutidos, que
se comercializan en el salón de ventas de la escuela y también
por camión frigorífico a Río Grande y a Ushuaia, siendo un gran
aporte a la dieta de los fueguinos. “Nuestro matadero de cerdos
es el único habilitado en toda la provincia —remarca Sergio—.
Hay varios proyectos pensados para aumentar y diversificar la
producción. Dentro de poco, por ejemplo, estaremos produ-
ciendo dulce de leche con la leche de las vacas de la Misión”.
Hacer en la Misión
Para Jainen, fueguina al igual que su nombre, el año que viene
será el último para ella como alumna. “Me encanta llegar can-
sada a mi casa y sentir que hice algo, que trabajé. Me gustan
todas las producciones, sobre todo con animales —cuenta en-
tusiasmada, y agrega— Cada uno tiene su lugar en la escuela,
no es que uno pasa y ya está. Si tenés algún problema que no
podés contar, buscás la solución acá. Se forma una familia, y la
verdad es que no te querés ir”. Muchos de sus compañeros, una
vez finalizado el horario de clases, se quedan “dando una mano
en alguna sección donde haga falta, o ayudando a los chicos de
En sus dos mil quinientas hectáreas,
la Misión desarrolla casi treinta
sectores didáctico productivos.
“El quE TrabaJa En la Misión Es El aluMno con
su insTrucTor. no hay pErsonal dE producción.
Es El rEsulTado dEl EsfuErZo, y porquE no, fru-
To dEl Error dE Muchos chicos quE EsTán aprEn-
diEndo”, coMEnTa El profEsor GusTavo biGGio.
Boletín Salesiano / 7
cursos inferiores —comenta Johnatan, alumno del último año—
Pero lo hacemos con gusto, porque es para la Misión”.
El trabajo en el campo fortalece cierto tipo de relaciones en-
tre los chicos y con los docentes. “Por ejemplo, poniendo un
alambrado. El instructor dice ‘yo voy acá a quinientos metros
a tensar el alambre, y ustedes dos fijen el piquete’. Aparece el
espíritu cooperativo”, comenta Gustavo Biggio. “Algún papá o
empresario te dice: ‘Yo conozco a los chicos de la Misión porque
tomé en mi empresa a dos alumnos, y están atentos, saben lo
que tienen que hacer, tienen saberes apropiados sobre tecno-
logía básica, son responsables. No hay duda que la formación
que aprendieron con la pala, con las botas, o con las manos
sucias, todo eso es lo que se lleva”. En ese sentido, la escuela
agrotécnica es muy cercana al carisma de Don Bosco. “Cuando
empieza a educar a sus muchachos en Valdocco, no lo hace para
que se queden en sus casas haciendo nada, sino para que se-
pan hacer, y que con eso puedan ganarse la vida. En la Misión
intentamos eso, que los chicos aprendan a ‘hacer bien’”, con-
cluye Graciela.
Ser de la Misión
La impronta de la Misión en la gente de la ciudad de Río Grande
es muy importante. Junto con la obra del centro de la ciudad y
la casa de las Hijas de María Auxiliadora, fueron por muchos
años la única oferta educativa de la región, dando lugar a que
la mayoría de los habitantes históricos de la ciudad estén vin-
culados con los salesianos.
“Es muy fuerte lo que se vive acá —comenta Graciela— Esta
tierra es sagrada no por la Misión en sí, sino por los misio-
neros que se quedaron y entregaron su vida para hacer del
mundo un lugar un poco mejor”. En una ciudad que cambia
tan vertiginosamente, la presencia constante de la Misión es
sumamente necesaria, acompañando aún hoy el crecimiento
de aquella. Aquí se encuentra la historia, el recuerdo de las
personas, y del tiempo pasado educativamente que formó a
gran parte de la gente de la ciudad.
Es una obra que nació como misión evangelizadora, para lle-
var la Palabra a aquellos que no la conocían. El concepto de
Misión quiere seguir vigente, puesto que es necesario, frente
a los distintos cambios sociales, una nueva evangelización, un
resurgir del mensaje evangélico. Ha sido y quiere seguir sién-
dolo, desde la educación de los jóvenes para la producción, un
faro para la región. •
“Esta tierra es sagrada no por la
Misión en sí, sino por los misioneros,
que entregaron su vida para hacer
del mundo un lugar un poco mejor”,
comenta Graciela, directora de la obra.
“El único TaMbo En la
provincia Es El dE la Mi-
sión. sE producE quEso,
un producTo prEMiado
y con sEllo dE calidad —
rEsalTa GusTavo—
TEnEMos GranJa avícola,
con Todo El ciclo coM-
plETo. En una laTiTud
dondE Es casi iMposiblE,
ManTEnEMos una produc-
ción cuasi-rEnTablE”.
“para los quE nos sEnTiMos salEsianos,
vEnir a TrabaJar Es lo quE nos salva la
vida —confiEsa GraciEla pEscE— EsTar En
la EscuEla Es coMparTir con los JóvEnEs la
alEGría dE EsTar vivos”.
8 / Boletín Salesiano
Desde los tiempos más remotos, el ser humano ha distribuido
el tiempo entre el trabajo y el ocio. En las sociedades industria-
les, junto al trabajo, cobra cada vez más importancia el tiempo
de distensión, fiesta y ocio. Se tiende a restringir el tiempo de
trabajo y a ampliar, en cambio, el tiempo libre, que deja de ser
un tiempo vacío y sin significado y se valora como momento
esencial en la calidad de vida.
Realmente, el tiempo de ocio está en relación con la humaniza-
ción del trabajo y expresa un espacio de libertad donde el indivi-
duo encuentra la ocasión para recuperarse física y mentalmen-
te, realizando sus capacidades. Precisamente en este sentido,
el tiempo de vacaciones adquiere una importancia humana muy
significativa, así como el modo de realizarlas y vivirlas.
En el pasado, la ascesis cristiana del trabajo desconfiaba del
ocio. Hasta hace muy poco se lo entendía simplemente como
un conjunto de actividades complementarias, funcionales o
simplemente marginales del trabajo. Hoy se vislumbra una ver-
dadera cultura del tiempo libre, que abre nuevos horizontes y
que estimula a liberar al ser humano, a realizar un proyecto de
humanización tanto en el tiempo de trabajo como en el tiempo
de ocio.
Junto a los grandes problemas éticos que plantea hoy el mun-
do del trabajo, comenzando sin duda por el reconocimiento del
mismo como un derecho, hay que reconocer que la dimensión
del trabajo no completa ni llena tampoco a la persona. Los mo-
mentos de descanso y distensión, de culturas y de culto, de
ocio y contemplación, no son menos esenciales para la huma-
nización de la persona que el tiempo de trabajo. Quizás una
de las tareas de la sociedad actual es devolver al trabajo su
verdadero sentido humano y social y, al mismo tiempo, dar un
significado constructivo y personalizante al tiempo de ocio y
vacación. En este sentido el Concilio Vaticano II después de
referirse al derecho y al deber del trabajo, declara: “Al aplicar
con la debida responsabilidad a este trabajo su tiempo y sus
fuerzas, disfruten todos de un tiempo de reposo y descanso
suficiente que les permita cultivar la vida familiar, cultural, so-
cial y religiosa. Más aún, tengan la posibilidad de desarrollar
libremente las energías y cualidades que tal vez en su trabajo
profesional apenas pueden cultivar” (GS 67).
Calidad de vida y cercanía a la naturaleza
La calidad del ocio es un parámetro de la calidad de vida y del
bienestar económico y social; y en este bienestar tiene una im-
portancia decisiva el trabajo. Si el trabajo se deteriora y degra-
da, la calidad del ocio en la vida de la persona sufre también la
misma degradación.
Don Bosco, en los comienzos de la industrialización, intuyó la
importancia del tiempo libre, el ocio y la fiesta, tanto para los
niños y jóvenes como también para las clases populares. De de
esa intuición nació el Oratorio, que ofrecía a todos esparcimien-
to, juego, cultura, valores, posibilidad de amistad, encuentro,
comunicación. En él siempre dio una importancia al teatro y la
Vacaciones:
el momento de ser (nos)otros
Don Bosco, en los comienzos de la
industrialización, intuyó la
importancia del tiempo libre y la fiesta.
De de esa intuición nació el Oratorio.
Por José Miguel Barriento • Boletín Salesiano de España
Si bien el aumento del consumo pareciera obligar a dedicar más tiempo al trabajo con el fin de mejorar los
ingresos, el ocio cobra cada vez mayor importancia en las distintas sociedades. Se entiende como un espacio
para la recreación, pero también para la capacitación y el festejo.
Boletín Salesiano / 9
Vacaciones:
el momento de ser (nos)otros
Sugerencias para hacer
en vacaciones:
Leer; compartir, comunicar,
dialogar con familiares
y amigos; dedicar tiempo
a los demás; hacer deporte;
escuchar música; visitar
lugares nuevos; participar en
algún curso; hacer ejercicios
espirituales; dedicar tiempo
a manualidades y/o tareas
artísticas.
música como modelos educativos de formación de la persona.
En la sociedad actual, con tantas posibilidades y medios, no
resulta fácil hacer del tiempo libre tiempo de recreación, crea-
tividad y formación. Fallan, quizás, la dimensión educativa y
el sentido más profundo de la humanización y de la cultura.
Son aspectos que pueden estar presentes, especialmente en el
tiempo de vacaciones. Es tiempo para recuperar el sentido del
tiempo libre, para la cultura, el arte, la expresión, la creatividad
y un contacto verdaderamente humano con la naturaleza.
Fácilmente nos habituamos al medio urbano, al tráfico ruidoso,
a la contaminación. El tiempo libre ofrece la posibilidad de per-
derse entre las montañas o frente al mar, de relajarse, de sentir
y contemplar la armonía de la creación. El contacto con la natu-
raleza es profundamente regenerador, su esplendor transmite
paz y serenidad.
Frente al estrés y agresividad que crea a menudo el entorno
urbano, la naturaleza acerca al hombre a lo gratuito y a lo es-
pontáneo.
Oportunidad para aprender a vivir
Para cualquier edad, el tiempo de vacaciones es una opor-
tunidad para la autenticidad, la creatividad, la libertad. Para
descansar y hacer cosas que normalmente no podemos hacer,
disfrutar y leer libros, saborear lo grandioso y lo sencillo, ex-
presar lo mejor de nosotros mismos, rehacer fuerzas, cultivar
la amistad. Una oportunidad para realizarnos un poco más.
Para aprender a vivir, que es el más importante de todos los
saberes posibles.
Quizás el tiempo de vacaciones, en un clima de paz y sereni-
dad, de descanso y reflexión, sintiendo el placer de las cosas
sencillas, es especialmente tiempo propicio para aprender
a vivir más humanamente. Tiempo para ver lo esencial y lo
superfluo, para respirar al aire libre y liberarse de cuanto lo
impide; para crear nuevos vínculos y deshacerse de ataduras
nocivas. Tiempo para crear, gozar y amar; tiempo para servir,
cuidar, ayudar, dar y comprometerse con lo bueno, lo noble,
lo justo. •
Frente al estrés y la agresividad que
crea a menudo el entorno urbano,
la naturaleza acerca al hombre a lo
gratuito y a lo espontáneo.
El trabajo en red, una clave para la promoción integral de los jóvenes.
Por el Equipo de Comunicación de la Procura Misionera Salesiana
10 / Boletín Salesiano
“— Te dije que nos faltaban cosas. Así no vamos a poder —re-
zongaba Mariano, mientras lo miraba con bronca a Germán—
No trajiste los señuelos ni los anzuelos más importantes. Con
lo poquito que tenemos, no vamos a pescar bien.
— Bueno, Mariano, nos arreglamos como podemos.
— Seguro, pero se podría hacer mejor si tuviéramos todo lo
que necesitamos.
— Pero no lo tenemos, Mariano.
— Hola, muchachos… los veo enojados —interrumpe Manuel.
— Hola, Manuel, aquí estamos. Vinimos a pescar, y este ton-
tito de Germán se olvidó de la mitad de las cosas. No vamos
a poder hacer nada…
— Tranquilos —replicó Manuel— Vamos, dejen sus cañas…
Mariano y Germán lo miraron con desconfianza, pero le hicie-
ron caso a Manuel. Se acercaron a la orilla del río, y Manuel se
arrimó con un bolso.
— ¿Están listos, muchachos? – preguntó Manuel
— ¡Siii! —gritaron al unísono los chicos.
Y abriendo el bolso, Manuel les dijo:
— Bueno, tomen la red de cada extremo que hoy pescaremos
juntos y en equipo.
Luego de una pesca exitosa, mientras limpiaban los pescados
y preparaban la sartén, Manuel les dijo:
— Con muy poco hicimos un gran trabajo. Y lo hicimos unidos,
tirando para el mismo lado. Esta red simboliza eso. Y en la vida,
los mayores logros los van a conseguir sabiendo tejer redes”.
Integrar las propuestas
El corazón salesiano de educadores y animadores conoce de la
importancia de la promoción integral de los jóvenes, que se da
principalmente a través de la educación, y se concreta con la ex-
periencia de familiaridad que se trata de vivir en cada escuela y
oratorio.
Pero la escuela, el oratorio y los centros educativos necesitan
integrar su propuesta con otros actores de la sociedad. El apren-
dizaje se da en un lugar determinado, y lo que se aprende se
suma a las experiencias que viven los jóvenes en los diferentes
ámbitos que les toca transitar.
Fue el mismo Don Bosco el que reconoció la importancia y la
necesidad de trabajar en conjunto con otros actores sociales
para el bien de los jóvenes más pobres. Una de sus preocu-
paciones era la de sensibilizar y movilizar todas las fuerzas
posibles, públicas y privadas, para trabajar a favor de ellos,
convencido de que “de la educación de la juventud depende la
felicidad de las naciones”.
Manos juntas
Algo cotidiano como el trabajo compartido es uno de los factores
que propician el cambio verdadero. Además, trabajar con otros
genera vínculos genuinos que ofrecen resultados más profun-
dos, con la posibilidad de realizar más de lo que las propias fuer-
zas posibilitarían.
Don Bosco tenía la enorme capacidad de motivar a otras per-
sonas e instituciones para que unieran sus fuerzas para hacer
el bien, en un auténtico “trabajo en red”. Y así fue como golpeó
puertas y escribió cartas, entre otras cosas, para lograr desa-
rrollar un plan general de formación integral, superando las pro-
puestas elementales de su época de crear cárceles para apre-
sar a quienes delinquían. Ésta fue la propuesta que le realizó al
entonces gobierno italiano encabezado por los ministros Crispi
y Zanardelli (1877), donde especificaba los compromisos que
asumirían cada una de las partes que se comprometieran a esta
tarea común. Por cuestiones de cambios políticos, esta propues-
ta no logró hacerse realidad, pero queda como paradigmática a
la hora de pensar que todas las fuerzas de la sociedad deben y
pueden ocuparse de los jóvenes más necesitados.
Juntos
somos más
Don Bosco tenía la enorme capacidad
de motivar a otras personas e
instituciones para que unieran sus
fuerzas para hacer el bien.
Un trabajo conjunto en nuestros días
El BBVA Francés viene implementando desde 2006 un programa
de becas de integración para contribuir a que los alumnos finali-
cen los estudios del nivel medio de educación formal. Está orien-
tado a chicos y chicas de escasos recursos económicos, muchos
provenientes de familias en riesgo social. La falta de ingresos de
las familias para que sus hijos se sostengan en el sistema edu-
cativo es una de las causas más importantes de la deserción
escolar en el nivel medio. Estas becas educativas, según las
autoridades del banco, son un “instrumento para transformar la
realidad”. Y su finalidad está orientada a la inclusión, retención,
calidad y terminalidad educativa.
El programa da una posibilidad de proyección tanto a la fami-
lia como al mismo alumno, que puede ver estimulada su for-
mación integral y elevar su rendimiento académico. También
apunta a fortalecer el valor del esfuerzo personal e integrar
más a las familias en el proceso de escolarización, clave para
soñar un futuro mejor.
Hoy, este trabajo mancomunado entre la Obra de Don Bosco y
BBVA Francés permite que más de trescientos chicos y chicas li-
gados a la Obra de Don Bosco que participan del programa de
becas encuentren un sostén y un estímulo para sus ganas de
crecer y desarrollarse.
Este trabajo en red se presenta como una oportunidad para
aquellos que quieren dar un paso adelante y “hacer algo” por
el bien de los chicos y chicas más necesitados, con la convicción
de que juntos se hace más, y de que un mundo diferente no se
puede construir con gente indiferente. •
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El trabajo en red es una oportunidad
para hacer algo por el bien de los
chicos y chicas más necesitados.
Un mundo diferente no se puede
construir con gente indiferente.
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12 / Boletín Salesiano
Lectura orante del Evangelio
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gratuita, la lectura orante salesiana del Evangelio del día en tu casilla de correo electrónico.
Todos los meses podrás encontrar en las páginas del Boletín
Salesiano algunas pistas para ayudar a integrar y releer la
propia vida desde el Evangelio, tomando como lectura la que
se propone para la celebración eucarística del día al que hace
referencia.
Domingo 21 de noviembre
Fiesta de Cristo Rey
(Lc 23, 35-43)
El pueblo permanecía allí y miraba. Sus jefes, burlándose,
decían: “Ha salvado a otros: ¡que se salve a sí mismo, si es el
Mesías de Dios, el Elegido!”. También los soldados se burlaban
de él y, acercándose para ofrecerle vinagre, le decían: “Si eres
el rey de los judíos, ¡sálvate a ti mismo!”. Sobre su cabeza
había una inscripción: “Este es el rey de los judíos”. Uno de
los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo: “¿No eres
tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros”. Pero el otro lo
increpaba, diciéndole: “¿No tienes temor de Dios, tú que sufres
la misma pena que él? Nosotros la sufrimos justamente, porque
pagamos nuestras culpas, pero él no ha hecho nada malo”. Y
decía: “Jesús, acuérdate de mí cuando vengas a establecer tu
Reino”. Él le respondió: “Yo te aseguro que hoy estarás conmigo
en el Paraíso”.
El texto: tejido
¿Cuántos personajes entran en esta escena? ¿Cómo actúan?
¿Qué le responde Jesús al buen ladrón? ¿Qué pensamientos te
sugiere esta frase?
¿Qué habrán querido decirnos los que eligieron este pasaje
para la fiesta de Cristo Rey?
La trama vital…
Si bien los orígenes de esta celebración pueden ser muy
discutibles, los textos de la liturgia muestran la manera peculiar
en que Cristo sería “Rey”. Conviene recordar en qué consistían
las esperanzas del pueblo judío en el tiempo de Jesús: unos
“Acuérdate de mí cuando
llegues a tu Reino”
esperaban a un nuevo rey, al estilo de David; algunos un sumo
sacerdote, que purificaría el Templo; otros, un caudillo militar
que fuera capaz de derrotar al poderío romano. En los tres casos
se esperaba un Mesías triunfante, poderoso. Eso explica por
qué, cuando Jesús anuncia la Pasión a sus seguidores, no logran
entender por qué tiene que morir.
También hoy es una aventura y un riesgo seguir a un crucificado,
a contramano de una sociedad que señala otros caminos de
pretendida plenitud y felicidad, con otros parámetros de éxito.
Estamos demasiado acostumbrados a decir y oír decir que
Jesús reina a través del amor. Pero, ¿no olvido que el único
amor que realmente me hace pleno y feliz es un amor de “amar
hasta que duela”?
…y su hilo donboscano
Don Bosco a lo largo de su vida vivió momentos de un amor
“crucificado” a favor de los jóvenes. Cuando se sintió solo,
incomprendido y abandonado por los sacerdotes que lo habían
estado acompañando desde el principio, cuando comenzó con
la publicación de las “Lecturas Católicas” y empezaron a lloverle
amenazas, cuando entró en conflicto con su propio arzobispo...
Me pregunto cuál habrá sido el secreto de la paz imperturbable
que conservaba su corazón en medio de tantas contrariedades,
el secreto de su alegría: la certeza de sentirse amado por el
crucificado, que le prometió estar siempre con él.
Enlazándonos al Hilo Primordial
Hoy quiero renovar una vez más, Señor, mi promesa de seguirte.
Lo hago con la clara conciencia de que soy débil, inconstante
y frágil. Unido a todos los hombres y mujeres, que desde
hace miles de años han sentido en sus vidas los signos de tu
presencia, quiero confesarte, “Dios de todos los nombres”,
como el fundamento misterioso de mi existencia, la meta
inefable hacia la que camino, Padre y Madre de la Vida y del Ser.
Convencido de que “todo lo que avanza y asciende, converge”,
evoco tu amor y me abrazo a todo lo que existe y a todo lo que
vive, contigo, que vives y amas por los siglos de los siglos. •
1 l tí l i
Boletín Salesiano / 13
Por Ricardo Noceti, sdb • rnoceti@donbosco.org.ar
Las crisis de la fe
A veces se encuentran personas que
dicen muy sueltas de cuerpo “yo tengo
muchísima fe”. Y otros, por el contrario,
que dicen “yo no tengo fe”. Esta manera
de hablar denota una concepción erró-
nea de la fe. Se la considera casi como
un objeto o una cosa que se puede tener
o perder.
En realidad, no sabemos ni sabremos
nunca hasta qué punto llega nuestra fe
o nuestra falta de fe. Porque está entra-
mada con nuestra vida misma; y como
ella, conoce momentos de plenitud, de
tensión y de crisis. No es como una línea
recta siempre igual a sí misma, es más
bien una línea que se va curvando, se-
gún los estados y acontecimientos que
afectan nuestra vida.
En general, podemos decir que no tene-
mos tanta fe. O que nuestra fe es muy
pequeña. Porque Jesús dice en el Evan-
gelio: “Ustedes tienen poca fe. Si tuvie-
ran la fe del tamaño de una semilla de
mostaza, dirían a aquel monte que se
trasladara allá, y se trasladaría. Y nada
sería imposible para ustedes” (Mt 17,
20). Sí, tenemos que reconocerlo con
sinceridad: nuestra fe es muy chiquita.
Pero al mismo tiempo, muy valiosa. Es
como una semillita, con una gran fuerza
interior. Y está llamada a crecer, a desa-
rrollarse y a dar mucho fruto.
Y las crisis de la fe son oportunidades
precisamente para crecer. De lo contra-
rio correríamos el peligro de instalarnos
fácilmente y confundir la fe con el senti-
miento o con el cumplimiento, como ocu-
rría con los fariseos. Siempre detrás de
una crisis hay un llamado de Dios. Tal vez
Él quiere arrancarnos de ciertas seguri-
dades, de ciertas “tranquilidades”, para
hacernos vivir la verdadera aventura de
la fe.
Para el adolescente, la crisis de fe repre-
senta la oportunidad de pasar a una fe
adulta, donde se cree ya no por lo que
dicen otros, sino por lo que ha podido ex-
perimentar por sí mismo. Pero también
los adultos “necesitamos”, de alguna
manera, entrar en crisis cada tanto. Es
decir, sentirnos cuestionados por nues-
tras actitudes y conductas —que tantas
veces contradicen nuestra fe— o por
los dilemas que el mundo actual plantea
a los creyentes. Porque precisamente
nuestro mundo, en gran parte descris-
tianizado y pluralista, nos cuestiona
desde distintos ángulos. Y, sobre todo,
nos reclama insistentemente mayor au-
tenticidad.
El creyente está siempre llamado a de-
jar la tierra conocida para aventurarse,
como Abraham, a recorrer nuevos sen-
deros, siguiendo la voz de Dios. Y aun-
que seamos pecadores, como David,
esto no nos exime de retomar el camino,
porque Dios es nuestra única fortaleza. Y
si confiamos en Él, no dejará sin terminar
la obra comenzada en nosotros.
En el fondo de eso se trata, de animar-
nos a poner nuestra vida en las manos
de Dios. En la medida en que nosotros
queremos manejar nuestra vida, lo deja-
mos afuera. Pero si nos atrevemos a en-
tregarle todo —y tal vez esto es lo más
difícil—, vamos a recuperar el “ciento
por uno y la vida eterna” (Mt 19, 29). Vale
la pena. •
Nuestra fe es muy chiquita, pero al mismo tiempo muy valiosa. Es como
una semillita, con una gran fuerza interior. Y está llamada a crecer, a
desarrollarse y a dar mucho fruto.
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14 / Boletín Salesiano
Hay una película reciente que narra la historia de un policía
muerto que, con el permiso de Dios, vuelve aquí a la tierra
para descubrir a un malhechor asesino. Es un film de ficción y
de mucha acción, al que uno podría colarle algunas preguntas
de “yapa”: ¿hay alguna forma de conexión entre la gente de
este mundo y los que viven en el más allá? Porque de eso se
trata, de saber si nuestra vida en la tierra tiene algún tipo de
comunicación con la situación de los difuntos.
La frontera de las ciencias
Es ilusorio acudir a las ciencias empíricas para obtener algu-
na respuesta al enigma del más allá. Las ciencias sólo se inte-
resan por los fenómenos de este mundo y por aquellas cosas
que se pueden verificar con experimentos concretos. Lo del
“más allá” no es verificable con el método científico. Por eso
algunos dicen que después de la muerte se acabó todo y no
hay nada.
Los cristianos, en cambio, pensamos la realidad de la muerte
y del más allá desde otro punto de vista. Aceptamos lo que
dijo Jesús: “El que cree en mí vive para siempre”. Entonces,
¿qué tiene que ver esto con la costumbre cristiana de rezar
por los muertos?
Vivencias ante la muerte
Hay dos experiencias que nos hacen pensar sobre el misterio
de la muerte.
La primera es el cariño, el amor y el afecto que a menudo nos
La oración por los difuntos es una
manera concreta de vivir la realidad
de la “comunión de los santos”, porque
es a través de la oración que nos
relacionamos con ellos
Cada 2 de noviembre los cristianos nos encontramos
para recordar a todos los que han dejado este mundo,
tanto los que nos han precedido como también
aquellos con los que hemos compartido parte de
nuestro camino.
Boletín Salesiano / 15
¿Por qué rezar
por los muertos?
une con un ser querido que fallece. El recuerdo de su presen-
cia, la veneración de su tumba a la que llevamos flores u otros
adornos, denotan que deseamos mantener su memoria... deta-
lles que parecen achicar la distancia que nos separa. Decimos
frases como: “papá…mamá... vos seguís cerca de nosotros”. Y si
fallece un hijo, o un amigo o amiga a la que nos unían sentimien-
tos fuertes, entonces lloramos como expresión de que los trozos
de vida pasada juntos no se irán ni se acabarán con su partida.
Cuando muere alguna persona excepcional que se ha desta-
cado en la familia por sus cualidades, su estilo de vida y sus
obras benéficas, entonces el reconocimiento perdura y su ima-
gen nos acompaña largo tiempo. Con ella mantenemos una
comunicación espiritual más allá del tiempo de su existencia
terrenal.
La otra experiencia es la que vivimos como cristianos y cris-
tianas creyentes, puesto que aceptamos eso que dice el Cre-
do: “…creo en la comunión de los santos… en la resurrección
de los muertos”. ¿Qué significan estas frases? Quieren decir,
ante todo, que no somos seres aislados unos de otros, sino que
juntos formamos “el Cuerpo de Cristo”, gente santificada por
el espíritu de Dios; constituimos “la comunión de los santos”.
Todos vivimos integrados a la realidad total de la vida presente
y de la vida futura. Los que aún vivimos en la tierra, nos per-
cibimos por la fe en unidad de destino con aquellos que han
pasado de este mundo a la Casa del Padre.
Este pensamiento nos conduce a considerar con nuevos ojos
lo que sucede después de la muerte, porque la meditamos a
partir de la fe en Cristo Resucitado. Su presencia nos coloca
en una versión versátil e inaudita de intercambio con cada ser
humano y con los seres queridos que han compartido nuestra
vida y fallecieron.
Nada es más difícil que enfrentarse con fe firme y confiada a la
muerte. Sin embargo, es gracias a la fortaleza del espíritu de
Jesús que morimos en la esperanza de compartir su resurrec-
ción. A eso nos persuade lo que en cada Misa reza el pueblo
creyente: vivimos “mientras aguardamos con gozosa espe-
ranza la venida de Nuestro Señor…”, que equivale a decir que
nuestra existencia es ir al encuentro del Señor que viene. Jesús
“ya” resucitó, y nosotros “todavía no”, por eso vivimos en la
esperanza.
Haciendo una manifestación de fe cristiana, podemos decir
Por Victorino Zecchetto, sdb • casvecio@gmail.com
Nada es más difícil que enfrentarse
con fe firme y confiada a la muerte. Es
gracias a la fortaleza del espíritu de
Jesús que morimos en la esperanza de
compartir su resurrección
con certeza que la humanidad entera tiene futuro en Dios, y los
que ahora ya han muerto son llamados “a la salvación”, o sea,
a la vida resucitada plena en su Reino.
Morir limitados y necesitados de perdón
El encuentro con Dios en la muerte casi siempre nos agarra
imperfectos en el amor. Aquí en la tierra nos falla a menudo
el núcleo duro del mandamiento “amar a Dios sobre todas las
cosas y al prójimo como a sí mismo”. Nos la pasamos haciendo
muchas macanas, y vivimos distraídos, sin preocuparnos mu-
cho del Señor que viene. Uno muere generalmente con jirones
de egoísmo, de torpezas, de faltas y de pasos en falso que des-
dibujan nuestra imagen de hijos o hijas de Dios.
A este punto, llegamos entonces a dar una respuesta de fe a
la pregunta de por qué rezamos por los muertos. Rezamos por
las personas que mueren, para que sea la bondad enorme y
dinámica de Dios, su amor grandioso y gratuito el que contagie
y purifique completamente nuestro amor imperfecto y frágil,
que torna trágica la vida por el pecado.
La oración por los difuntos es una manera concreta de vivir la
realidad de la “comunión de los santos”, porque es a través de
la oración que nos relacionamos con ellos y le manifestamos el
cariño que nos enlazó y unió en la vida terrena.
El perdón de Dios nos alcanza y nos rodea en la vida y en la
muerte. La Iglesia reza con confianza, y le dice a Dios que su
Espíritu renueve el amor de los difuntos, porque ellos y cada
persona humana que ya ha pasado por este mundo están lla-
mados —dice la Biblia— a ser como una novia hermosa, res-
plandeciente y bien adornada que va a encontrarse con el Se-
ñor Jesús, para disfrutar el banquete de Dios. •
16 / Boletín Salesiano
Por Marcos Aguirre, sdb • maguirre@donbosco.org.ar
¿Quién canta piedra libre?
Indicaciones para iniciar el juego:
• En ROJO las pistas a seguir. Las po-
dés leer de corrido. Si las unís armás
una sola frase.
• En NEGRO se explicitan las pistas, y
las citas bíblicas de cada domingo en
NARANJA te darán más luces aún.
• En VIOLETA, lo que el diluvio se llevó.
Si de eso queda algo en tu vida, es
tiempo que lo sueltes.
• Y en VERDE, el escondite de Dios. Él
está ahí para dejarse encontrar. No
lo dejes esperando.
Primera semana de adviento:
mateo 24, 37-44
Estemos atentos
y preparados…
Lo que esperábamos que pase ya está
pasando, comenzó de manera inusual, y a
muchos les pareció que rozaba lo ridículo.
La vida es comer, beber, casarse… como
lo hacen todos, decían… o casi, porque
alguien hizo algo distinto: Noé construyó
una barca, y eso distinto y hasta ridículo
es lo único que el diluvio no se llevó. So-
brevivió la debacle, perduró.
... afuera el criterio de legitimidad que da
la muchedumbre. Es inútil descansar en lo
que otros, aunque sean muchos, hacen.
Dios que se aparece en lo distinto
segunda semana de adviento:
isaías 11, 1-10
… para iniciar un proceso
de conversión
al Reino que ya está entre nosotros. Reino
del revés, diría nuestra inolvidable Ma-
ría Elena, donde el león no come al buey
sino que pastan juntos porque el buey le
enseñó las ventajas de lo vegetariano… y
así sigue la lista de los reveces que incluye
este Reino.
… afuera las estructuras y sistemas que
sostienen como principio la supervivencia
del más fuerte, e identifican fuerza con
depredación, cacería, violencia.
Dios que se aparece en la gente a la cual
la ferocidad del otro no la vuelve violenta,
y que a pesar de todo sigue eligiendo la
paz como estilo de vida.
Adviento, un tiempo para las epifanías de Dios, o “el revés del juego de las escondidas”
En la liturgia que celebramos cada domingo de Adviento se proclaman textos bíblicos con pistas que, en la
semana, nos permitirán vivir la dimensión “lúdica” de la fe. Así, el cansancio y la rutina de un año que se acaba
pueden transformarse en espacios, tiempos y personas donde Dios se deja ver. Le llamamos el “revés de las
escondidas”, porque mientras el juego de niños consiste en hacer difícil que otro nos descubra, en la epifanía
Dios se muestra. Y aún viéndolo, nuestra mirada no lo reconoce, quizá porque aunque decimos conocerlo, en
realidad muchas veces no es tan así.
Viví un Adviento que te lleve a la Navidad. ¡Animate a jugar!
Comienzo
1
2
Boletín Salesiano / 17
Por Marcos Aguirre, sdb • maguirre@donbosco.org.ar
¿Quién canta piedra libre?
tercera semana de adviento:
mateo 11, 2-11
… que nos ayude a reconocer
aquellos nuevos ministerios
que surgen
Los constructores de caminos nuevos, que
abriendo pasos hacia las periferias conju-
gan los verbos incluir, dialogar, democra-
tizar; los mensajeros de buenas nuevas,
que proclaman que la vida es digna, ple-
na y alcanza para todos: pobres, ciegos,
cojos, leprosos, sordos y hasta para los
muertos; y los testigos, porque si tienen
no les sobra y si no tienen no les falta.
… afuera los roles y funciones que sólo se
mantienen porque dan prestigio, y poco o
nada atienden alguna necesidad, ni pro-
mueven ningún derecho.
Dios que se aparece, primero, en quienes
sostienen la esperanza de los persegui-
dos por anunciar-construir-testimoniar el
Reino; segundo, en los perseguidos con
quienes lee, en la realidad, los aconteci-
mientos que vislumbran Reino.
cuarta semana de adviento:
mateo 1, 18-24
… entre los “nadie”,
desde la lógica de los poderosos, pero
que en el Reino son llamados “mis herma-
nos, mis hermanas y mi madre”.
… afuera los grupos de presión y los pri-
vilegios de clase. También las mentalida-
des corporativas que influyen en el ámbi-
to de la fe.
Dios que se aparece en el mundo “patas
pa´ arriba” y allí hace primero al último, y
sabiendo que él es el centro de todo opta
por habitar en las periferias olvidadas
por muchos.
Va como ejemplo la vida de dos “nadie”
en quien Dios se aparece complacido:
Como el rocío empapa la tierra y hace que
brote en trigo, vino y aceite; así la Vida
comparte su fecunda creatividad con Ma-
ría —la pequeña y toda una—, y su vientre
fructifica bendición.
Dios se aparece en “los nadie” y los cubre
con su espíritu para que den vida... ¡y lo
hace sin intermediarios!
Como lo hacía en los orígenes cuando se
paseaba por el jardín, a la hora en que so-
pla la brisa y con su voz convocaba a ter-
tulia, así la Vida comparte los sueños de
José —quien anhela vivir la justicia y por
eso le busca la vuelta a lo difícil, aunque
esto signifique una feroz lucha interior en-
tre su pensar y su sentir— y le recuerda las
profecías, dichas para hacerse realidad al-
gún día, que como lámparas encendidas le
iluminan los acontecimientos por los que
atraviesa su vida y así se atreve, tanto a to-
mar la decisión que asume como más con-
veniente, como a obrar en consecuencia.
Dios que habita la conciencia de los que
buscan la justicia... ¡y así los hace capaces
de pensar, decidir y obrar por si mismos!
Llegada
3 4
5
Si llegaste hasta aquí
y has seguido las indicaciones,
accedes al PREMIO
y encontrar a María, a José,
y al recién nacido acostado
en el pesebre.
Lucas 2, 16, que se ProcLama
en La misa de navidad
Si no lo reconocés, o el premio no llena tus expectati-
vas, puede ser indicio de que debés volver a realizar
alguna de las pistas, vos sabrás cual.
Pero si el niño, cuyo nombre es Jesús Emmanuel, da
paz a tu corazón y te capacitas para compartir esa
paz con otros, entonces podés pasar al “nivel dos”
del juego, que lo presentaremos en otra oportuni-
dad. Mientras tanto te deseamos para vos y familia
una muy feliz Navidad. •
Premio
18 / Boletín Salesiano
Durante este año, utilizo como género literario el relato en
primera persona, para así poder acercarnos a la figura de
nuestro fundador. Si Don Bosco viviera hoy, nos diría...
“El 27 de abril de 1876 me encontraba en Roma. Ese día escribí una larga carta a don Cagliero, que cinco meses antes había
partido como responsable de la primera expedición misionera
Por Don Pascual Chávez, Rector Mayor de los Salesianos
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don Bosco nos cuenta...
“Ser fieles a nuestro
estilo de educar"
en Argentina. Entre otras cosas, le decía: “Tenemos en curso
una serie de proyectos que parecen fábulas o cosas para locos
a los ojos del mundo; pero tan pronto como comienzan, Dios
los bendice de forma que todo sigue buen curso”.
Ciertamente, no navegaba en un mar de rosas. Las deudas cre-
cían desmesuradamente, brotaban conflictos jurídicos, estaba
el eterno problema de las tensas relaciones con el arzobispo
de Turín y los inevitables inconvenientes de una joven congre-
gación que estaba ampliando proyectos y presencias en mu-
chos frentes. Justo en aquellos años yo había pedido un sub-
Boletín Salesiano / 19
sidio del gobierno para paliar los enormes gastos afrontados
por las primeras expediciones misioneras. Me parecía actuar
adecuadamente, porque entre las tareas encomendadas a los
salesianos estaba el cuidado de los numerosos expatriados
italianos en Argentina. La “Gazzetta del Popolo”, un periódico
de Turín, avivó un nido de avispas, con críticas y objeciones; el
columnista concluyó así su artículo: “¿No es suficiente todavía
el número de jóvenes que están 'idiotizados' en Valdocco? Con
muchos como Don Bosco terminaremos muriendo todos idio-
tas”. Pero no me enojaba ante críticas así de mezquinas.
El “cuarto voto” salesiano
Insistía en ser fieles a nuestro estilo de educar. Mientras la
Congregación se extendía en muchos países, me convencí
cada vez más de que el sistema preventivo debería conver-
tirse en nuestra herencia irrenunciable. Al principio, el estilo
educativo era uno con mi persona. No era el fruto de estudios
académicos, sino de una experiencia de espiritualidad y edu-
cación. A mis salesianos no les ofrecía un texto científico: les
entregaba mi pasión por los jóvenes, el testimonio de una ex-
periencia de vida, los valores en los que siempre había creído
y que me habían guiado incluso en los momentos de dificultad
e incertidumbre.
No siempre fui bien entendido, incluso por algunos de mis sa-
lesianos. Recuerdo una situación concreta, en 1885. Casi ciego,
con las piernas terriblemente hinchadas, me estaba acercando
inexorablemente al final. Los casi seiscientos salesianos —y
más de doscientos jóvenes valientes que se preparaban para
llegar a serlo— estaban dispersos en Italia, Francia y España.
Diez años atrás habíamos llegado a América del Sur; primero
a Argentina, luego Uruguay, y finalmente Brasil. Las fronteras
se dilataban. A Turín no tardaron en llegar cartas alarmantes.
Por delicadeza no estaban dirigidas a mí, sino a algunos de
los superiores mayores. Las noticias corrían en los pasillos
de Valdocco. Finalmente llegaron a mis oídos. Me enteré con
gran tristeza que en algunas casas de Argentina no se educaba
más de acuerdo con el sistema preventivo. Se había impuesto
una pedagogía áspera, que no ahorraba en castigos, incluso
físicos. Tuve que tomar una posición. Cansado, con el calor
abrasador del verano ardiente, escribí tres cartas: la primera
a monseñor Cagliero, la segunda a don Costamagna y la últi-
ma a un joven sacerdote. Les recordé aquel objetivo de que
“el sistema preventivo sea nuestro sistema”. Reafirmaba con
esta frase la fidelidad absoluta a nuestro método educativo.
No era un capricho mío; se trataba de defender y mantener un
elemento indispensable de nuestra pedagogía. También a los
otros recomendé “caridad, paciencia, dulzura” y supliqué “que
cada salesiano se hiciese amigo de todos, estuviera dispuesto
a perdonar y no reclamara las cosas una vez ya perdonadas”.
Pequeños recuerdos, sazonados con ese tono de familia que
permite aceptar incluso los compromisos que a primera vista
parecen difíciles o las amonestaciones que podrían conducir al
enojo. Más tarde llegaron otras cartas que me consolaron. Me
enteré de que muchos de mis hermanos en Argentina habían
hecho copias de mis mensajes y seguían fieles sus directrices.
De hecho, algunos se obligaron espontáneamente, con una es-
pecie de voto, a vivir el sistema preventivo —como si fuera el
“cuarto voto” salesiano— y lo renovaban cada mes.
Sabía que la joven congregación tenía necesidad de unidad y
de estabilidad, y que la garantía de su futuro estaba en la fide-
lidad al espíritu de los orígenes, al estilo educativo que había
caracterizado la vida de Valdocco.
Con el mismo corazón
Siempre había actuado así. Cuando en 1872 surgió el Instituto
de las Hijas de María Auxiliadora, no pudiendo darles perso-
nalmente aquella asistencia que consideraba necesaria, había
enviado a Mornese a un salesiano de mi total confianza, don
Cagliero, con esta precisa orientación: “Tú conoces el espíritu
de nuestro oratorio, nuestro sistema preventivo y el secreto
de hacerse amar, escuchar y obedecer de los jóvenes, amando
a todos y no mortificando a nadie, y asistiéndolos día y no-
che con paterna supervisión, paciente caridad y amabilidad
constante”. Al hacerlo, no quería mortificar la iniciativa per-
sonal o incluso fomentar la monótona repetición de actitudes
y acciones. Lo que yo quería era insistir sobre nuestro estilo
para acompañar a los jóvenes en su proceso de crecimiento,
viviendo una caridad que sabe hacerse amar. Lo había com-
prendido plenamente don Francisco Bodrato, antiguo maes-
tro de Mornese con el que había mantenido algunos diálogos
interesantes ya en 1864. Luego se convirtió en salesiano; en
1876 le había encomendado la responsabilidad de la segunda
expedición misionera. En una afectuosa carta me había escrito
una frase en la que me decía, sin temor a ser desmentido: “No-
sotros vivimos de Don Bosco”. En lugar de enorgullecerme,
estas palabras me habían llenado el corazón de alegría y de
esperanza. Y me demostraban, una vez más, que el camino to-
mado mediante la pedagogía preventiva de la caridad evangé-
lica estaba dando, también en tierras lejanas, muchos frutos.
En febrero de 1885, escribiendo a monseñor Cagliero sinte-
tizaba todo el trabajo educativo en una expresión lapidaria,
apoyada sin embargo por una larga y positiva experiencia:
“Hacerse amar y no hacerse temer”.
Resurgían en mi mente y en mi corazón las palabras misterio-
sas escuchadas en un sueño sesenta años atrás: “No con los
golpes, sino con la mansedumbre y con la caridad tendrás que
ganarte a estos, tus amigos”. Ahora estaba “comprendiendo
todo”.
El método de la bondad y la dulzura lo veía aceptado y vivido
por mis hijos espirituales en muchas partes del mundo. ¡Bajo
todos los cielos, los jóvenes encontrarían en cada salesiano a
otro Don Bosco! • „
20 / Boletín Salesiano
De manera especial, el Boletín Salesiano agradece el trabajo, comprometido y desintere-
sado, del jurado integrado por Cecilia Barrio, Graciela Barroso, Graziela Norma Buslje,
Gimena Da Giau, Marcela Domínguez, Silvia Kern, Silvia Loustalet, Mónica Mateo, Ga-
briela Murgia, Pablo Grimozzi, Daniel Tattoli, e Inés Yapura.
Para leer los relatos ganadores completos, ingresar a www.boletinsalesiano.com.ar
Primer puesto
“La familia”
Iara Arza
13 años
Obra salesiana de Rawson
Segundo puesto
“Alegrías verdaderas”
Mariana Zapata
15 años
Colegio María Auxiliadora
de San Miguel de
Tucumán
Tercer puesto
“Bitácora de la alegría”
Pablo Rodríguez
17 años
Oratorio Santa Catalina de
Buenos Aires
¡Un fuerte aplauso!
El 17 de junio finalizó la recepción de los cuentos del 3º Concurso
Literario organizado por el Boletín Salesiano, con el título “Alegrías
verdaderas”. Presentamos a los ganadores de la categoría de 13 a 17
años, junto con el relato que obtuvo el primer puesto.
¡Felicitaciones a ellos, y a todos los que participaron!
Categoría
de 13 a 17
años
La vida, a veces, nos ofrece pequeños momentos de “alegrías verdaderas”. Algu-
nos, como música lejana, rondan en nuestra mente. Otros, como pequeños deste-
llos de luz, nos iluminan guiando nuestro camino.
Recuerdos familiares abundan en la memoria de cada uno de nosotros. Se nos pre-
sentan remitiéndonos a aquel contexto. A veces lloramos, a veces reímos, casi casi
como si fuese la primera vez.
Si hago memoria, unas dulces melodías retumban en mi cabeza, trasladándome a
ese espacio tan especial. Dos sillas viejas, pasadas de moda, nos esperaban, a mí
y a él. Sillas como testigos silenciosos de nuestros encuentros. Primero, risas, car-
cajadas. Luego, interminables charlas, y de vez en cuando, algún que otro partido
de truco.
Por las tardes, eran infaltables aquellos recorridos en su camión anticuado. El sol
brillaba, bañándonos con su luz. Los patos sumergían sus cabezas en busca de un
poco de alimento, y nosotros sentados a orillas del río Turbio. La brisa algo húmeda
y pegajosa nos acariciaba las caras, junto a los pastizales secos y de gran altura. El
momento justo, y yo me preparaba para que él comenzara con sus historias. Poco a
poco, los recuerdos colmaban el lugar, y yo viajaba muy lejos, pero a la vez estaba
ahí, muy cerca de él.
¡Y qué decir de los mates! Algunos bizcochitos para pasar la tarde y galletitas con
salvado para seguir en forma.
Increíbles espectáculos sobre el agua servían como trasfondo para sus recuerdos.
Mientras escuchaba, esas imágenes acompañaban cálidamente sus palabras. Lan-
chas, pequeños barcos y gomones sobre el río, y nosotros dos ahí… uniendo histo-
rias, generaciones y vida.
La inevitable noche caía. La hora de volver a casa llegaba.
— Abuelo, ¿vamos? Está haciendo frío…
l tí l i
Boletín Salesiano / 21
“Tú eres el que está
a la puerta y llama”
Ya van más de tres décadas en las que Eduar-
do Meana, salesiano sacerdote, nos regala su
don como autor de canciones para jóvenes.
Muchas de ellas ya conforman una larga lista
de clásicos de la talla de “En mi Getsemaní”,
“Esto que soy” y “Siempre nuestro amigo”,
que se cantan y se rezan en gran parte de los
distintos ambientes católicos de Argentina.
Este año finaliza con dos nuevos discos, el
Volumen XII y el Volumen XIII de su obra, que
continúa y se renueva como una herramienta
eficaz y clave de identidad en el acompaña-
nuevas canciones de eduardo meana
Frutos que no mueran Habla Cristo, que llama a cada joven
como amigo a seguirlo. Final triunfal. Balada pop entradora y
emotiva.
“Si oyes mi voz, fecundará tu silencio”.
El milagrero Crítica al creyente que exige a Cristo —o a
María— milagros y apariciones para emocionarse y creer, como
Herodes. Aire de reggaeton; burlón. Gran estribillo.
“¿Y el creyente milagrero, que busca visiones? ¿Y el de fe espec-
tacular, adicto a apariciones? ¡Sólo tendrán el signo de Jonás!”.
Lávanos, Servidor Contemplación del Cristo que nos lava los
pies y la historia. Meditación bíblica y vital, de conversión. Ideal
para acompañar signos con agua —como el Lavatorio. Folklore.
“Al lavarnos, te estás haciendo cargo / de cada llaga de nuestros
caminos…”
Elogio de la bondad Meditación y ruego sobre la bondad.
Balada suave.
“…Espíritu, sostenme, en la desnuda roca de la bondad!”
Pregón pascual (Exultet) Pascua… ¡Alegre anuncio de la
Resurrección! Novedad: está hecho para que la gente intercale ecos,
estribillos. Ritmos diversos: himno, pop, huayno festivo, etcétera.
“¡Esta es la Noche que disipó las tinieblas!”
El verano y Jesús Contemplación reconfortante sobre el Jesús
que asume tiempos y “estaciones” de la vida humana. Mucha
poesía.
“Y tocaste lo fugaz de nuestras plenitudes / Nuestro inexplicable
ansiar algún verano eterno”.
Sostener Poderoso “himno” homenajeando el “amor aguanta-
dor” de padres y educadores, con aire folklórico intenso.
“Sostienen su arte los maestros, y van venciendo, cuerpo a
cuerpo, a la ignorancia y al desprecio. ¡Sostener… es mi prueba
de amor!”
La brisa en la montaña Cuando nos escuchamos, Dios pasa
entre nosotros —es la misma Brisa que sintió Elías en el Horeb.
Poema cantado.
“Y ahora hermano mío que me estás narrando tu alma / siento
esa misma Brisa que he sentido en la Montaña: ¡El Paso de Dios
por tu vida!”
Simple Avemaría Palabra x palabra, frase x frase, el
Avemaría… para degustar la presencia de Ella. Música envol-
vente y conmovedora. “Todo nació de un Simple Avemaría”
(Don Bosco).
“¡Alégrate, María… alégrate María…!
¡Llena de gracia… Llena de gracia!”
El barro que amo Otro aire del noroeste para meditar la acción
del Alfarero, recreando nuestra vida e invitándonos a imitarlo.
“Y tenele paciencia a tu barro / y tenele confianza a mis tiempos
/ y mirá cómo ejerzo este oficio / y volvete también alfarero”.
Canción del regreso Vuelve alguien —¿de una adicción, de
una pelea familiar, de la cárcel, de la increencia, de la depre-
sión? Todo puede ser—. Y canta, dulce y firme, confiando en
que le abrirán la puerta.
“Vengo desde un país de soledades… ¡Abran que traigo lágrimas
y besos!”
Nombres de Jesús Himno potente de puro amor a Jesucristo,
con los ricos nombres simbólicos que le da el Apocalipsis 2-3.
Eterno Viviente, su celebrada presencia toca a cada puerta…
“¡Tú eres el que está a la puerta y llama! Joven por joven…”
El Volumen XII estará disponible a partir de los primeros días de diciembre
en las librerías salesianas de todo el país.
miento de la fe de los jóvenes. Al igual que en
los últimos trabajos, estas nuevas produccio-
nes cuentan con los arreglos artísticos de Kiki
Troia —arreglador de tantos otros cantauto-
res, como el mexicano Martín Valverde—,
que estuvo a cargo de la edición del himno de
la Jornada Mundial de la Juventud Río 2013.
Hoy nos presenta brevemente “de qué hablan
y cómo suenan” las canciones de “Tú eres el
que está a la puerta y llama”, Canciones Vo-
lumen XII, con una frase que rescata de cada
una de ellas.
letí alesia / 1
22 / Boletín Salesiano
N o t i c i a s d e l a
Familia Salesiana
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Del 17 al 21 de septiembre se realizó en el centro
turístico Cardenal Cagliero de Bariloche el En-
cuentro Continental de Delegados de Comunica-
ción Social de América. Allí treinta participantes,
entre salesianos y laicos, compartieron los avan-
ces en la materia de las distintas inspectorías, y
profundizaron los temas “Animar una institución”
y “Los nuevos patios desde las cuatro pantallas:
televisión, computadora, celular y cine”.
Además, aprovechando la riqueza y diversidad de
la obra salesiana en la Patagonia, los participan-
tes recorrieron la obra de El Frutillar, ubicada en la
periferia de Bariloche, donde además de conocer
el Centro de Formación Laboral, se encontraron
con los jóvenes que llevan adelante “Pan de Es-
peranza”, el periódico que se distribuye gratuita-
mente a todos los vecinos del barrio y que es un
espacio de formación y comunicación de la comu-
nidad. Luego, ya en la localidad de San Ignacio, en
Neuquén, conocieron el kultrum donde se encuen-
tran los restos de Ceferino Namuncurá, y, en Junín
de los Andes, el santuario Nuestra Señora de las
Nieves, los lugares de Laura Vicuña y el Vía Christi.
Fuente: José Luis Sánchez
ISIDRO CASANOVA / BUENOS AIRES
“Todo lo que busco esta en Vos”
Los chicos y animadores de la capilla “María,
Madre de los Pobres”, ubicada en la localidad de
Isidro Casanova, al oeste del gran Buenos Aires,
celebraron el 19 de septiembre el aniversario del
oratorio “Miguel Magone”, recordando el naci-
miento de este chico del oratorio de Don Bosco.
El grupo lleva más de veinte años de labor sa-
lesiana, creciendo cada día un poco más. Este
año, a partir de las palabras del Papa —“Vayan
y hagan lío, lleven la Iglesia a las calles”—, los
animadores buscan salir a misionar por el barrio
para ayudar al que más lo necesita. Y en el ora-
torio encuentran un lugar donde brindar lo mejor
que tienen. Hoy muchos, habiendo comenzado
sin saber cómo era la propuesta, tras varios años
siguen animando con confianza y objetivos cla-
ros. Todos apuntan a una misma idea de caridad
y alegría, y a un espacio abierto para todos.
Fuente: Laura Acebey
la lluvia no fuE iMpEdiMEnTo para quE los chicos
disfruTaran dE los JuEGos y los shows prEparados
por los aniMadorEs.
El bEllo EnTorno naTural dE barilochE fuE El luGar
ElEGido para El EncuEnTro dE dElEGados dE coMuni-
cación dE las inspEcTorías salEsianas dE aMérica.
BARILOCHE / RÍO NEGRO
Encuentro de los delegados de comunicación de América
l tí l i
RAMOS MEJÍA / BUENOS AIRES
Congreso nacional de Exploradoras
Del 12 al 14 de octubre se llevó a cabo el XII Congreso Nacional
de las Exploradoras Argentinas de María Auxiliadora. Más de
cien animadoras, representantes de las catorce Escuadras de
Argentina —que se extienden desde Salta capital hasta Puerto
Deseado, en la provincia de Santa Cruz—, participaron de esta
instancia que se realiza cada cuatro años y que, mirando la
realidad y las necesidades actuales, intenta fortalecer y hacer
crecer el movimiento. “En Jesús; un solo corazón, una misma
/Boletin.Salesiano.Argentina
›››
misión” fue el lema que acompañó esta instancia formativa
de discernimiento y elección, donde se evaluó la etapa “Re-
toños”, para pre exploradores, y se reflexionó y profundizó
sobre el sentido de la comunidad de animadores.
En un clima fraterno se pudo sentir el corazón de esta pro-
puesta educativa que anima a más de mil quinientos chicos
y chicas de todo el país, y que es posible gracias al compro-
miso y la entrega gratuita de cientos de jóvenes animadores
que sueñan seguir viviendo el “Siempre Listos” al estilo de
Don Bosco.
Fuente: Marina Alcaraz
las aniMadoras dE las disTinTas
Escuadras dEl país pronuncian su
voTo En una dE las insTancias dE
dEcisión dEl conGrEso.
SANTA CATALINA / CONSTITUCIÓN
Animadores de peregrinación en Salta
Entre el 20 y el 22 de septiembre, varios animadores del Ora-
torio Santa Catalina de la Ciudad de Buenos Aires realizaron
la peregrinación al santuario de la Inmaculada Madre del Di-
vino Corazón Eucarístico de Jesús en la provincia de Salta, en
busca de nuevos espacios para compartir la fe. Acompañados
por el salesiano Carlos Bareuther, los animadores vivieron un
fin de semana cargado de emoción y oración. Llevaron al san-
tuario las peticiones del oratorio y de sus familias, además de
un rosario que según la tradición se deja sobre un árbol en la
cima del cerro de la Virgen.
La peregrinación es una forma de seguir creciendo en la espiri-
tualidad juvenil y de ampliar los espacios de crecimiento comu-
nitario para jóvenes comprometidos con la misión salesiana.
Fuente: donboscosur.org.ar
24 / Boletín Salesiano
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SALTA
Luz, cámara, acción
El 4 de octubre se desarrolló en la escuela Ceferino Namun-
curá de la ciudad de Salta la décimo sexta edición del deno-
minado “Show de los talentos”, el festival donde los protago-
nistas son los mismos chicos de la obra, y que reúne a más
de dos mil personas, entre familiares, amigos, y exalumnos.
Se trata de una actividad destinada a recaudar fondos, or-
ganizada por alumnos, padres y docentes de séptimo grado,
los futuros egresados. Este año la temática elegida para fue
“canciones películas, series o programas televisivos de ayer,
de hoy y de siempre”.
Todos los miembros de la comunidad educativa apoyaron
esta actividad que contribuye, también, a la formación inte-
gral de tantos chicos y chicas, y dieron gracias a Dios por la
oportunidad de compartir experiencias hermosas como ésta.
BERNAL / BUENOS AIRES
Ordenación sacerdotal de Héctor Arismende
El 28 de septiembre pasado se celebró en la comunidad sa-
lesiana de Bernal, provincia de Buenos Aires, la ordenación
sacerdotal de Héctor “Gringo” Arismende, bajo el lema “Se-
ñor, vos sos mi Dios, mi único bien” (Salmo 16, 2).
A pedido de él, la jornada comenzó con un encuentro que
reunió a los jóvenes de las obras de la zona para reflexionar
acerca de la vocación, y presentar los testimonios de inte-
grantes de diversas ramas de la Familia Salesiana.
Después del encuentro comenzó la celebración de la orde-
nación sacerdotal, con la presencia de familiares, amigos y
hermanos salesianos, entre ellos los padres inspectores de
Argentina norte y sur, Manuel Cayo y Ángel Fernández Ar-
time. Para Héctor, la ordenación “es un regalo de Dios que
tiene dentro muchas sorpresas, que de a poco voy descu-
briendo. Poder vivir el ministerio sacerdotal al servicio de
los jóvenes es una gracia muy especial, que le va dando ma-
yor sentido a mi vida”. Monseñor Marcelo Colombo presidió
la Eucaristía en un clima muy emotivo, acompañado por los
cantos de aliento de los numerosos jóvenes presentes. “Fue
muy lindo saberme acompañado durante la celebración por
tantos jóvenes, porque ayuda a darnos cuenta de que apre-
cian nuestra consagración, e interpela sobre las propias
proyecciones en la vida. Por eso, deseo que mi sacerdocio
me ayude a intensificar mi ser salesiano”, agradece Héctor.
Fuente: donboscosur.org.ar
BUENOS AIRES
Entrega de la distinción Divino Maestro
Como todos los años, en septiembre el Consejo Superior de
Educación Católica entrega la Distinción Divino Maestro a do-
centes de todo el país por su labor y entrega en la educación
de gestión eclesial. El 27 de septiembre pasado, en la cere-
monia realizada en el Colegio del Salvador, fueron distingui-
dos varios miembros de la Familia Salesiana. Entre ellos es-
tuvieron el salesiano coadjutor Antonio Villegas, la hermana
María Esther Blanck, y el profesor Enrique Magagna.
Esta distinción es un reconocimiento a quienes han dedicado
su vida a la formación integral de niños, adolescentes y jóve-
nes en todo el país, y son reconocidos por generaciones de
estudiantes como auténticos maestros.
Fuente: CONSUDEC
los chicos, dE Jardín dE infanTEs a sépTiMo Grado, subiEron al EscEnario
con MuchísiMo EnTusiasMo sus TalEnTos arTísTicos, con dEsTacados
vEsTuarios y EscEnoGrafía.
El salEsiano hécTor arisMEndE rEcibE la iMposición
dE Manos dE parTE dE MonsEñor MarcElo coloMbo.
Boletín Salesiano / 25
ARGENTINA
Capítulos Inspectoriales de las Hijas de María
Auxiliadora
Del 11 al 14 de octubre se realizó en Fortín
Mercedes, al sur de la provincia de Buenos
Aires, el Capítulo Inspectorial de las Hijas
de María Auxiliadora de la Patagonia Norte,
encuentro que cada cuatro años reúne a re-
ligiosas y laicos que representan a todas las
comunidades locales y a los espacios de ani-
mación inspectorial.
Por su parte, al cierre de esta edición se cele-
braba en San Miguel, al oeste del conurbano
bonaerense, el Capítulo Inspectorial de Bue-
nos Aires y Patagonia Austral. En este caso,
este encuentro se enmarca en el proyecto de
reestructuración “Pasión por Dios y por los
jóvenes más pobres” que viene llevando ade-
lante la comunidad inspectorial.
En cada una de estas reuniones, junto a la que
se realizará en la inspectoría “Nuestra Seño-
ra del Rosario”, durante el mes de noviembre,
también se elige a las delegadas que acom-
pañarán a las madres inspectoras al Capítulo
General a realizarse en Roma el año próximo,
que lleva el lema a nivel mundial “Ser hoy con
los jóvenes casa que evangeliza”.
Fuente: Inspectoría HMA ABA
/Boletin.Salesiano.Argentina
›››
El domingo 6 de octubre se llevó a cabo en la casa
salesiana “Dr. Enrique Carbó” el primer encuen-
tro de la zona centro de los salesianos coopera-
dores (SSCC), con la participación de más de cua-
renta personas de los centros de Concepción del
Uruguay, Curuzú Cuatiá, Santa Fé y Paraná.
El encuentro se inició con la Eucaristía, y más tar-
de se proyectó un extracto del vídeo del Boletín
Salesiano “A su tiempo todo lo comprenderás,
pinceladas de la vida de Don Bosco”, a partir del
cual se trabajó sobre los modelos de santidad de
distintos SSCC. Se concluyó con la entrega de dis-
tinciones a los proyectos y diplomas a todos los
participantes.
Fuente: Carina Villaverde de Gauna
Cerca de trescientos consagrados y laicos participaron duran-
te los meses de julio, agosto y septiembre del segundo año de
seminarios taller del Proyecto Nacional Nuevas Fronteras, un
trabajo llevado a cabo de manera conjunta todas las inspec-
torías de las Hijas de María Auxiliadora y los Salesianos de
Don Bosco.
Partiendo de los problemas priorizados durante el 2012, este
año se brindaron elementos teóricos para revisar las creencias
naturalizadas, reinterpretar los sentidos y proponer marcos de
transformación de las prácticas y acciones con las que nos ha-
cemos cargo de los jóvenes pobres, abandonados y en peligro.
En los seminarios, desarrollados en diferentes puntos del país
—Tucumán, Resistencia, Ramos Mejía, Stefenelli, Mendoza,
Córdoba y Comodoro Rivadavia—, se partió de la narración
de una experiencia de la propia comunidad para luego, con la
ayuda de diversos especialistas, evidenciar y confrontar las
teorías implícitas, y acordar un nuevo marco teórico que ex-
prese las propias convicciones y certezas, e ilumine la acción
pastoral.
En función de la mayor cantidad de participantes de los semina-
rios 2013 respecto al año anterior, se están elaborando los pasos
siguientes del itinerario, que acentuaría desde el aspecto meto-
dológico para identificar nuevas herramientas de intervención
para la resignificación de las prácticas pastorales.
En la web nacional www.donbosco.org.ar continuarán publicán-
dose, los días jueves, distintos materiales para seguir repensan-
do nuestra forma de estar presentes en la vida de los jóvenes.
Fuente: Oficina Nacional de Comunicación
ARGENTINA
Iluminar, entender, revisar: Seminarios 2013 de Nuevas Fronteras
PARANÁ / ENTRE RÍOS
Encuentro de los salesianos cooperadores de zona centro
los orGaniZadorEs aGra-
dEciEron al cEnTro dE la
localidad EnTrErriana y a
Todos los coopEradorEs
quE abriEron su coraZón
para rEcibir y aTEndEr
a la visiTas.
26 / Boletín Salesiano
Boletin.Salesiano.Argentina
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El lunes 21 de octubre se llevó a cabo en la sede de
las Naciones Unidas un evento titulado “Jóvenes y
migración”, que presentó la contribución salesia-
na sobre el tema.
El salesiano Juan Carlos Quirarte, director de la
Asociación Desarrollo Juvenil del Norte en Ciudad
Juárez, México, habló sobre la realidad de los jóve-
nes que viven en la frontera entre ese país y Esta-
dos Unidos, y presentó algunas de las iniciativas
YPACARAI / PARAGUAY
Encuentro de Quinquenistas
Desde el domingo 22 de septiembre hasta el sá-
bado 5 de octubre se realizó en la localidad de
Ypacarai, Paraguay, el Encuentro de Quinquenis-
tas, dedicado a los salesianos sacerdotes que se
encuentran viviendo su quinto año de ministerio.
Junto con varios hermanos de las inspectorías de
Chile, Paraguay y Uruguay, de Argentina partici-
paron los salesianos Carlos Gómez, Tomek Pierog
y Fernando Contarino por Argentina sur; y Ger-
mán Llomplat, Sebastián Maldonado y Andrés Del
Campo por Argentina norte. El encuentro contó
con el acompañamiento del salesiano Gabriel Ro-
mero, quien es referente del equipo de formación
de Argentina norte.
Durante el mismo los participantes pudieron de-
tener sus actividades habituales para reflexionar
distintas temáticas significativas de la vida re-
ligiosa. Los días de paseo y distensión también
ayudaron al crecimiento en la fraternidad, pudien-
do conocer el país anfitrión.
Los salesianos participantes dieron gracias a Dios
por haberlos acompañado en este encuentro, pu-
diendo recargar de energía su vida para servirlo
en los jóvenes más pobres y abandonados.
Fuente: Fernando Contarino, sdb
desarrolladas por los salesianos, presentes en
seis ciudades fronterizas.
El discurso central estuvo a cargo del cardenal
Oscar Rodríguez Maradiaga, arzobispo salesiano
de Tegucigalpa. Después de reconocer el impor-
tante trabajo realizado por las Naciones Unidas
sobre el tema de la migración, el cardenal citó al
Rector Mayor, afirmando la necesidad de ver a los
inmigrantes “no tanto como un problema, sino
como un recurso, y no sólo desde la perspectiva
económica, sino como un recurso humano”. El
cardenal explicó que la respuesta de Don Bosco a
los jóvenes inmigrantes es la misma que los sale-
sianos ofrecen todavía hoy: un lugar seguro para
vivir, proporcionando refugio, alimentación y un
clima familiar; formación en competencias para
el mundo del trabajo y para mantenerlos alejados
de la delincuencia; oportunidades para el tiempo
libre y el desarrollo de habilidades artísticas; y la
formación espiritual y religiosa.
Rodríguez Maradiaga elogió la presencia en la
sala de los jóvenes, animándoles a trabajar en sus
comunidades para cambiar las mentes y los cora-
zones de las personas, y a acoger a los migrantes
en su medio.
Fuente: ANS
El cardEnal MaradiaGa —En El MEdio, EnTrE los salEsianos ThoMas brEnnan y Juan
carlos quirarTE— Es El prEsidEnTE dE cariTas inTErnaTional y dEl consEJo dE cardE-
nalEs rEciEnTEMEnTE consTiTuido por El papa francisco.
NUEVA YORK / ESTADOS UNIDOS
Los salesianos, en las Naciones Unidas
Movimiento Juvenil Salesiano
de la Casa San Antonio de Padua
San Vicente, ciudad de Córdoba
Lo más destacado
El “preju”, forma a futuros animadores en el espíritu de
Don Bosco. Visitan hospitales y hogares, y participan del
oratorio y la catequesis.
La previa a la procesión de nuestro patrono, San
Antonio de Padua... ¡Las caras hablan por sí solas!
Compartiendo nuestra amistad con los chicos y chicas
descubrimos nuevas realidades, historias, soluciones…
El MJS está formado por los animadores del oratorio
“Saltimbanqui”, de catequesis y del grupo prejuve-
nil. Varias actividades nos envuelven y son un pilar
importantísimo en nuestra vida. Entregarnos entera-
mente en ellas es la actitud que mantenemos, y que
nos llena el alma.
El oratorio es un espacio donde las caras, risas y tra-
vesuras de niños y jóvenes del barrio llenan el patio
cada semana. Procuramos evangelizar desde el afec-
to, queriendo que se sepan amados y que puedan
descubrir nuevos caminos.
“Cate” da su servicio a los chicos del cole y del barrio.
¡Qué lindo es para nosotros poder dar a conocer los
pasos de Jesús y el ejemplo de Don Bosco! Tratamos
de incentivar la integración con diferentes activida-
des como talleres de danza, torneos de fútbol, etc.
Los campamentos, las formaciones mensuales que re-
cibimos, el apoyo escolar, los encuentros juveniles, el
coro “Canten conmigo”, las misiones, y las largas ho-
ras compartidas después de las actividades son otros
ladrillos fundamentales que aportan a que el grupo se
quiera tanto y sea un placer formar parte de él.
Es nuestra humilde forma de contribuir a la obra y al
sueño de nuestro querido padre Don Bosco.
Boletín Salesiano de Argentina
También nos vamos de misión. En este caso, aprovechando
el fin de semana largo para ir al norte de Córdoba.
El tiempo de Adviento nos prepara para la Navidad: Dios se hizo uno de nosotros y nació entre los más
humildes, en la sencillez de un pesebre. Si nuestra sociedad considera que el sentido de la vida pasa por la
adquisición, acumulación y constante renovación de “cosas”, no es extraño que esta forma de entender el
mundo se haya apropiado también de la Navidad, para hacer de ella un rito de culto al consumo. En estos
clips, como si fueran “bienaventuranzas navideñas”, te presentamos algunas pistas o deseos para ayudar
a re-encontrarnos con el profundo sentido de la Navidad: Jesús. En el otro, en el que está a mi lado o en el
que está solo... esperanzados por la Vida que viene.
Bienaventurada NAVIDAD
28 / Boletín Salesiano
Felices los homb
res y mujeres qu
e piensan en
los que están so
los para celebra
r las fiestas,
y comparten su
alegría con alg
uien que de
verdad lo necesi
ta.
Felices los que pueden
abrazar y ser abrazados.
Felices lo que se desprenden de lo propio para hacer felices a los otros, porque entenderán cuánto son amados por Dios que nos dio a su Hijo.
Felices los que en Nochebuena comparten su techo y
su pan con quienes son distintos, con quienes están
solos, con los que no se bancan mucho, porque ellos
serán los que inauguren una sociedad distinta, donde
los otros no nos causen miedo ni amenaza.
Felices aquellos que sirven, rezan y viven sencillamente desde lo oculto.
Felices los que celebran la vida
lejos del ruido, de la imagen,
de los ritos superfluos, y festejan
en la simpleza la fraternidad
y los gestos cálidos y tiernos
que hacen presente a Dios,
porque nos hacen más humanos.Felice
s los que de
scubren qu
e la
Navidad n
o se puede
vivir solo,
sino
que es expe
riencia de
comunión.
Bienaventurada NAVIDAD
Boletín Salesiano / 29
Felices los que son capaces de dejar los enojos y los reclamos a un lado para hacer posible la celebración de la Vida; porque ellos serán capaces de hacer brillar la bondad en el rostro de otras personas.
Felices los que superan
lo aparente para ver lo
verdadero.
Felices los que son capaces
de descubrir la vida que nace y crece en
medio de la oscuridad de la noche,
y alentar con ella la esperanza.
Felices lo que com
parten sus
bienes con los que
no tienen,
porque llegará el m
omento en
que compartirán t
ambién la vida.
Felices los que en cada Navidad renuevan su corazón.
Felices los que se alegran compartiendo sin medida lo
que tienen, y no se angustian por cumplir con
los rituales de la sociedad de consumo, porque
ellos recuperarán la gratuidad de la vida y harán de la
solidaridad el motivo de la esperanza de todos.
Felices los que reconocen el más profundo sentido de la Navidad: Dios con nosotros.
Felices los que se admiran y anonadan
ante la grandeza de la vida frágil y vu
lnerable,
y se atreven a hacerse cargo de ella y
cuidarla
desde su propia sencillez y pobreza.
Felices los qu
e celebran est
a Navidad
como expresi
ón de su aleg
ría profunda
,
y hacen que s
e prolongue e
n su vida
cotidiana.
Felices los que descubren en lo frágil de un pesebre la omnipo-tencia de Dios.
Felices los que siempre
aguardan confiados
en la esperanza.
mp3
Es preciso
Es preciso meter en el barro los pies
y mancharte tus lindos mocasines...
si del hombre querés hablar,
si querés que te crea.
Es preciso subir el volumen a mil,
en los reinos prohibidos del silencio.
Si tus papos de libertad,
no son papos y nada más.
Y tuviste a los medios,
y sentiste la gloria quizá.
Pero no, no te das cuenta,
lo rápido que tu alma se cae, se pudre,
y ya no brilla más.
Es preciso comer con la panza dolida
de los pibes que comen cuando pueden...
si del hombre querés hablar,
si querés que te crea.
Es preciso sentir en el lomo el bastón
de los tipos azules que te cuidan...
si tus papos de libertad,
no son papos y nada más.
.
Artistas: Arbolito
Álbum: Mientras la chata nos lleve (2005)
Por Ezequiel Herrero • eherrero@donbosco.org.ar
Vivimos en la sociedad de la palabra, donde la posibilidad de expre-
sarse se fue democratizando a través de las redes sociales, de las
nuevas tecnologías, de los nuevos medios de comunicación. Cada
vez, un número mayor de personas tiene la oportunidad de pronun-
ciarse, de anunciar y de denunciar... en definitiva, de hacerse escu-
char —aunque todavía hay un sector de la población que carece de
este derecho y que cada día queda más relegado.
En esta sociedad la palabra circula como en ningún otro momento de
la historia. Podríamos decir que existe una abundancia de palabra,
todo el tiempo nos estamos pronunciando —en especial a través de
las redes sociales— sobre lo que pasa en nuestro país, en el mundo,
sobre lo que sentimos; todo nos invita a dejar nuestra opinión y que
sea conocida o leída por la mayor cantidad de gente.
Pero esto no siempre fue así, incluso para los más jóvenes, que ya
crecieron en un mundo hiperconectado. Alguna vez no supimos ha-
blar y para aprender tuvimos que hacer silencio y escuchar a los de-
más, o por lo menos verlos y tratar de imitarlos.
Y es justamente en esos momentos de silencio o de “no pronuncia-
ción” cuando la canción de Arbolito nos devuelve nuestro reflejo, por-
que cuando no nos expresamos con palabras, lo seguimos haciendo
a través de acciones, que son mucho más contundentes y efectivas
que las palabras.
Son nuestras acciones, nuestras opciones, las que realmente dejan
traslucir aquello en lo que creemos, lo que queremos y lo que de ver-
dad nos importa. Lo que hacemos y lo que dejamos de hacer, los es-
pacios que habitamos y los que abandonamos, las opciones que to-
mamos... son en definitiva las que legitiman o desautorizan nuestras
palabras. No quiere decir que haya que dejar de pronunciarse, o que
todo aquello de lo que hablemos tengamos que haberlo vivido antes,
pues sería sencillamente imposible. Pero sí, por momentos, debemos
hacer el suficiente silencio para que sean nuestras conductas las que
hablen por nosotros.
Solo así podremos hablar del hombre y que nos crean... •
Que los hechos
hablen
Algunas pistas para
aprovechar la canción.. .
• Armá una lista de todas las actividades que realizás en la
semana, desde que te levantás hasta que te acostás, en lo
posible con la duración de cada una de ellas. Observála y
fijate donde están puestas tus energías.
• ¿En que situaciones o actividades, de todas las que realizás,
creés que es necesario seguir creciendo en coherencia en-
tre lo que pensás y lo que hacés?
30 / Boletín Salesiano
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