SALUDO 50

MIS QUERIDOS JÓVENES: ¡¡ CREO VERDADERAMENTE EN VOSOTROS, en USTEDES!!

Mis queridos amigos y amigas, mis queridos jóvenes: Creo que el título de estos buenos días se entiende bien, y es expresión personal de lo que pienso, y sobre todo lo que creo.

Me sigue conmoviendo el “Me basta que seáis jóvenes para que os ame” que marcó a fuego y guió toda la vida de Don Bosco. Yo me lo digo todos los días, y hoy quisiera añadir algo más. Siempre lo he sentido así, y el corazón me invita a decirlo, ahora ya de regreso después de los días compartidos en la visita a Sicilia.

Y creo en vosotros, en ustedes, mis queridos jóvenes, porque me ocurre que os miro a los ojos y se me hace evidente que Dios os Ama y tiene un proyecto de Felicidad (que se debe conquistar) en la vida de cada uno; porque os miro a los ojos y veo vuestra nobleza y capacidad de dar lo mejor de vosotros mismos. Porque veo vuestra sonrisa, vuestra espontaneidad, vuestra aceptación del otro, del que es diferente, y creo que a nuestro mundo le espera un futuro mejor que el presente actual. Os creo capaces de soñar con la paz, con la justicia, con el bien para todos, con la igualdad (y no solo, como quieren decir otros a veces, con el último ‘Smart’, la última música….

Sois mucho más que eso. Os miro a los ojos y siento que el corazón de cada joven es capaz de dar lo mejor de sí cuando se siente querido, como ocurría con Don Bosco.

Que el Señor y la Auxiliadora os bendiga. Un abrazo, Angel. Rector Mayor