Cagliero 11 - agosto 2013-SPA


Cagliero 11 - agosto 2013-SPA

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Nome società
Titolo n otiziario
Boletín para la Animación Misionera Salesiana
Una publicación del Dicasterio para las Misiones para las comunidades salesianas y amigos de la misión salesiana
Q ueridos hermanos y amigos de las misiones salesianas:
Un saludo cordial en el mes de agosto. Para varias inspectorías es un
tiempo de vacaciones o también un período de intenso trabajo apostólico. Para
muchos misioneros significa también un tiempo de visita a sus inspectorías de
origen, tiempo de 'vacaciones': "Todo misionero podrá volver a su patria
periódicamente, según las normas de su inspectoría. Su inspector lo
presentará al inspector de la zona donde vaya a residir y proveerá a
cuanto sea necesario para su permanencia". (SDB, Reglamentos art. 21).
Es una ocasión preciosa para descansar, recargando las baterías físicas,
psíquicas y espirituales. Y al mismo tiempo es también una oportunidad
preciosa de animación misionera entre los Salesianos y comunidades católicas
de la tierra de origen. Con frecuencia usamos más energías para buscar fondos
y negociar proyectos que para compartir la misma vida misionera.
Las visitas a las casas de formación y las entrevistas para el Boletín Salesiano y otros medios de Comunicación
Social salesianos son muy importantes. Las entrevistas, gracias a los delegados de comunicación social o de
animación misionera, sirven para compartir la experiencia de vida y la vocación misionera con los jóvenes, con la
familia salesiana.
Casi todos los nuevos misioneros dicen que el primer momento de su camino de descubrimiento de la llamada
de Dios fue el escuchar la narración de un misionero. La humildad, en este caso no es una virtud. Es cierto que
una cosa es cuando uno vuelve a España para hacer una visita (con 300 misioneros en todo el mundo) y otra cosa
cuando vuelve un misionero de Colombia, que apenas tiene tres misioneros salesianos.
El tiempo de vuelta a la patria es, pues, una ocasión de descanso para recargar baterías, pero también es un
tiempo de animación misionera. Nada puede sustituir la narración personal de un misionero!
P. Václav Klement, SDB
consejero para las misiones
¡Lancémonos hacia un Oratorio - Centro Juvenil ...
E n su carta La Pastoral Juvenil Salesiana, el Rector Mayor ha subrayado que “nuestra pastoral es todaví-
a poco misionera, es decir, presta una escasa atención al primer anuncio y al anuncio renovado del
Evangelio.”
E n relación a los Oratorios - los Centros Juveniles, P. Pascual Chávez llama nuestra atención sobre
algunos aspectos a profundizar con urgencia, entre los cuales:
*** se busca una metodología pastoral que logre responder a las necesidades más inmediatas de la gran masa de
los jóvenes, pero sin olvidar las propuestas más comprometidas y exigentes para los jóvenes dispuestos a
seguir un camino formativo en profundidad;
*** hacer del Oratorio-Centro Juvenil una verdadera comunidad educativa con una fuerte identica y dinámica
formativa, que se expresa en un ambiente profondamente humano y cristiano, en el cual se ofrece una pre-
sencia significativa de los Salesianos y eduicadores entre los jóvenes, compatendo su vida, las diversas pro-
puestas educativas según la realidad y las necesidades de los mismos jóvenes.
... mas Misionero!

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M i vocación misionera tuvo comienzo
en el noviciado, cuando el
Consejero para las misiones vino a
visitarnos. Durante la conferencia nos invitó a
reflexionar sobre nuestra vocación misionera. En el
posnoviciado escuché las narraciones de los
misioneros vietnamitas que
venían a visitarnos. De esta
manera la llamada a ser
misionero se hizo más fuerte
y clara. Después de mucha
oración manifesté mi deseo
de ser misionero ad gentes.
El Rector Mayor aceptó mi
petición y me mandó a
trabajar entre los indígenas
de la Amazonia Brasileña.
Algunos jóvenes me han preguntado: ¿Por
qué quieres ser misionero cuando en Vietnam hay
tantos que no conocen a Cristo? Para muchos esto
es una paradoja. Pero mi motivación es clara:
Nosotros somos afortunados gracias a muchos
misioneros que vinieron a Vietnam. La Palabra de
Dios que ellos sembraron ya tiene raíces y continúa
creciendo. Yo quiero ser misionero porque quiero
compartir este don de la fe con los que no conocen a
Cristo, de manera que también ellos puedan tener la
alegría y la luz de la fe en Jesucristo, que para mí es
una bendición. Yo no les llevo más que lo único y lo
más precioso que tengo, mi fe.
Antes de partir para Brasil tuve la hermosa
oportunidad de participar en el curso para los nuevos
misioneros en Roma y en Turín. Esto me ha servido
para corroborar mis experiencias, para orar, estudiar y
Con los pueblos indígenas
de Amazonia comparto
nada menos que mi fe!
reflexionar sobre lo que nos espera en las misiones.
Aprecio mucho el coloquio personal que cada uno de
nosotros tuvimos con Don Václav Klement, Consejero
para las misiones, tanto al inicio como al final del
curso.
Dios me ha llamado a trabajar en Brasil, en
favor de mis queridos indígenas de Amazonia. Estoy
muy contento de mi vocación de misionero salesiano.
Los hermanos de la Inspectoría de
Manaus me han acogido con los
brazos abiertos. Aquí pronto me he
sentido como en mi casa. Con todo,
el aprendizaje del portugués ha
sido un reto. Me ha costado porque
tenía miedo de lanzarme a
hablarlo. También la cultura
representaba para mí algo nuevo.
Más tarde me invitaron a un curso
de introducción de tres meses para
nuevos misioneros por parte de la Conferencia de
Religiosos del Brasil, sobre las culturas, la sociedad y
la Iglesia Brasileña.
Actualmente soy asistente en el Colegio Don
Bosco donde trato de practicar el sistema preventivo
en mi quehacer misionero diario y en mi relación con
los jóvenes, cosa que para mí es indispensable. La vida
misionera no es ciertamente fácil, paro mi fe me
asegura que Dios no abandona jamás a quien se da
generosamente.
Cl. Juan Bautista Dinh Viet Tien
Vietnamita, misionero en Brasil
Región Africa y Madagascar
Intención Misionera Salesiana
Para que la Familia Salesiana en África y Madagascar aporte con calidad las
riquezas del Sistema Preventivo de Don Bosco inculturado en las culturas
locales como fermento fecundo de justicia y de paz para los pueblos africanos,
especialmente para los jóvenes.
La exhortación apostólica postsinodal Africae Munus nos ha pedido con
claridad que nos pongamos al servicio de la reconciliación, de la justicia y
de la paz. El tesoro de la experiencia espiritual y educativa vivida por Don
Bosco en el primer oratorio, es una oportunidad única para consolidar en
África y Madagascar caminos de educación y de evangelización que hagan nacer las tan deseadas paz
y justicia.
Una entrevista de P. Jorge Mario Crisafulli, Superior de la Visitatoría de África Occidental.
original en Inglés con subtítulos en español
https://vimeo.com/68697688
Todos los números precedentes del “Cagliero 11” se encuentran en purl.org/sdb/sdl/Cagliero