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TERCERA PARTE

EL PROYECTO EDUCATIVO Y LA . FECUNDIDAD VOCACIONAL

1. EL PROYECTO EDUCATIVO Y PASTORAL SALESIANO

La actividad evangelizadora salesiana no se caracteriza solamente partiendo de los destinatarios 0 por el tipico modo comunitario can que viene efectuada, sino tambien por la particular organizacion de sus contenidos y objetivos y por el estilo con el cual nos hacemos presentes entre los jovenes.

Por eso los Salesianos de Don Bosco no pueden profundizar adecuadamente en el sentido de su mision sin reflexionar en plan operativo sobre el sistema educativo y pastoral que Don Bosco nos ha legado como herencia preciosa.

Se diria que es un «aspecto central en la pastoral juvenil salesiana», algo que pertenece a la esencia misma de nuestra mision, «nuestro estilo de expre. sar la caridad pastoral» 1. En realidad puede considerarse como una sintesis de cuanto Don Bosco ha querido ser, el nueleo del programa 0 proyecto pedagogico- pastoral que el actuo y confio de modo especial a la Familia Salesiana, el necesario terminG de comparacion de las modalidades y caracteristicas de nuestra accion pastoral.

Esta Hamada al «sistema preventivo» se hace tanto mas urgente hoy, cuando los miembros de la Congregacion, esparcidos por el ancho mundo, se encuentran frente a situaciones culturales muy diversas en su mision de anunciar y testimoniar el Evangelio y quieren ciertamente conservar la vital union con el Fundador y la unidad del espiritu, para precisamente lograr la eficacia comunitaria de su vocacion.

1 RRM 183.

Hay que recordar, ante todo, que el sistema no indica solamente un conjunto de contenidos que hay que transmitir 0 una serie de metodos y procedimientos para comunicarlos; ni es pura pedagogia ni es solo cateque~is. El «sistema preventivo» tal como ha sido vivido por Don Bosco y sus seguidores, se presento siempre como rica sintesis de contenidos y metodos; de procesos de promocion humana y a la vez, de anuncio evangelico y profundizacion de la vida cristiana; en sus objetivos, en sus contenidos, en sus momentos de actuacion concreta, el sistema sugiere indisolublemente las tres palabras con que Don Bosco 10 definia: razon, religion, amor.

Por eso, el CG21 en el trabajo de constatacion ha sentido necesidad de considerar su grado de presencia 0 de eficacia y, en cierto modo, comprobar su vitalidad, teniendo presentes dos puntos fundamentales que estan vital mente unidos entre si en la accion concreta diaria:

1. Los contenidos.

2. El 'estilo.

1.1 Los contenidos del proyecto educativo y pastoral salesiano

1.1.1 El problema: Una propuesta unit aria y diferenciada

Segun la intuicion de Don Bosco y de la Congregacion, confirmada tambien por el Concilio Vaticano II y el reciente Magisterio Pontificio y particularmente por la exhortacion apostolica Evangelii Nuntiandi, la evangelizacion autentica se actua dentro de un proyecto que mira a la promocion total del hombre, al desarrollo integral del individuo y de los grupos. Este proyecto es, a su vez, radicalmente abierto y orientado positivamente a la plena madurez en Cristo: «como testigos de Cristo, los Salesianos educan a los jovenes y a los adultos de

las c1ases populares, mirando a su promocion cristiana integral» 2.

Entre evangelizacion, liberacion y educacion existe, pOl' tanto, una unidad profunda y solidaria. Evangelii Nuntiandi se mueve en estos terminos 3. Ya el CG19 habia hablado de humanismo integral salesiano 4. Tambien el XX CGE recogio esta idea y hablo de «promocion integral cristiana» y de «educacion cristiana liberadora» 5. Es el lenguaje mismo de Don Bosco a quien gustaba resumir el programa de vida propuesto a los j6venes en f6rmulas senci- Has, pero densas. El habla de «buenos cristianos y honrados ciudadanos» 6; mira porIa «salud, sabiduria y santidad» de su muchachos 7 y propone un estilo de vida que comprende «alegria, estudio y piedad

El CG21 no oculta las dificultades que acarrea el llevar adelante tal proyecto. Y, en primer lugar, advierte la extrema heterogeneidad cultural en la - que la Congregacion desarrolla su mision: paises de tradicion cristiana antigua y zonas en vias de descristianizacion; regiones en las cuales el primer anuncio necesita solidos fundamentos de la fe y la experiencia cristiana; inmensos subcontinentes donde la accion educativo-pastoral se encuentra con religiones no cristianas solidamente establecidas; y no hablemos de niveles de desarrollo economico extremamente diferenciados, de estratificaciones sociales, de regimenes politicos, de tradiciones.

La resistencia de los mismos jovenes y de los destinatarios en general, que viven en ambientes que los condicionan fuertemente y crean en ellos actitudes de sospecha y hostilidad frente a la propuesta de valores, sobre todo si estan ligados a la religion

2 ACGE 59-61. 3 EN 29-33. 1 GG XIX, pp. 214-216. 5 ACGE 61. 6 MB 13 618 7 Epist. 2,465. 8 Il pastorello delle Alpi, en Opere Edite, vol. XV, 332-333.

o a instituciones religiosas, pueden contribuir a aumentar todavia las dificultades del esfuerzo educador cristiano. Se trata muchas veces de actitudes que se encuentran tambien entre bautizados, y que no son menos dificiles de superar que las de' los muchachos crecidos en otras ideologias 0 sistemas religiosos, con prejuicios arraigados y prevenciones consolidadas.

Estas dificultades no haran olvidar ni descuidar, por otra parte, los «nuevos signos de inquietud por las cosas divinas en el corazon del hombre» 9. Atin mas, nuestra propuesta educativa sabra partir de los signos de renovacion y de los profundos impulsos que especialmente parecen extenderse por el mundo de los jovenes; «de las aspiraciones a la creatividad, a la justicia, a la libertad y a la verdad, sus aspiraciones de corresponsabilidad en la vida eclesial y civil y su propensi6n al amor de Dios y del pr6jimo» 10.

Todo ello debe estimular todavia mas a un vital replanteamiento que de nuevo vigor a la acci6n educad ora y evangelizadora salesiana.

La atenci6n y el respeto de las diversas situaciones y personas no debe traicionar el proyecto del Fundador. Este debe permanecer punta comtin ideal de referencia para un servicio pleno, cristiano y salesiano, al hombre total; con mesura y prudencia, pero con valentia y llaneza; sin forzar los ritmos, pero sin dejar pasar en vano los tiempos de gracia y de salvaci6n. Partiendo de un proyecto unitario de base sera facil dar paso a la legitima creatividad salesiana que -a traves de las comunidades inspectoriales y locales y las responsabilidades personales- sabra encontrar los criterios justos para programas de educacion, de promoci6n humana y de genuina e integra formacion cristiana, en fidelidad historica alas divers as situaciones y culturas 11.

, Sin. 77, n. 2. 10 Sin. 77, D. 3. 11 EN 20, 38-39.

1.1.2 La situaci6n

No es facil una comprobacion del esfuerzo educativo y evangelizador de los Salesianos durante el ultimo sexenio, por 10 complejo de las condiciones concretas en que se mueve la Congregacion, y la variedad de lnstituciones que habria que considerar.

Sin embargo, es posible evidenciar algunos elementos generales.

El XX CGE ha influido de modo positivo respecto a la actividad educativa y evangelizadora de la Congregacion. Esto no se ha desarrollado con igual empefio en todo ni en todas partes; muchos elementos de renovacion estan aun empezando y se abren camino con dificultad 0 se encuentran todavia en la sufrida etapa de busqueda y de aspiraciones. Pero se tiene la impresion de haber vuelto a ponerse en marcha y halIqrse en un momenta mas sereno de reflexion y de accion. En particular se notan algunas lineas de tendencia que aparecen lIenas de esperanza: el redescubrimiento de la actualidad de las instituciones pedagogic as de Don Bosco y de la tradicion salesiana; la creciente sensibilidad y el mayor interes por los jovenes de las cIases populares, por la causa de la justicia en el mundo; un esfuerzo mas acentuado por la catequesis y la evangelizacion.

Todo esto ha lIevado, aunque no en la misma manera y por doquier:

- a la creacion de centros. de organismos de equipos, de revistas, recursos para profundizar y actualizar el programa educativo y pastoral salesiano;

- a la sentida exigencia de una mas seria y mas rigurosa programacion de nuestra intervencion educadora; incIuso por la redaccion de proyectos educativos «<idearios») en torno a los cuales se unifica la accion educativa no solo de los Salesianos, sino de los miembros de la FS y de seglares empefiados con nosotros en la mision (padres, maestros, animadares, catequistas...);

- a nuevas, mas agiles y funcionales presencias, especialmente en el sector de la catequesis;

- a la creacion de nuevas organismos de animacion, como los Departamentos de educacion de la fe, que algunas naciones han creado.

Se puede hacer notar ademas:

- una insercion mas viva y responsable en el contexto ambiental y cultural;

- una participacion mas estrecha en la pastoral de la Iglesia local;

- una mas amplia colaboracion con la FS y con el desarrollo del movimiento de los Jovenes Cooperadores;

- un crecimiento en sentido de la oracion y de la vida liturgica;

- una atencion mas interesada a algunos sectores de la evangelizacion como los medios de comunicacion y la anima cion cristiana de 10 temporal;

- una aportacion notable, cualificada y ampliamente reconocida en el sector de la animaci6n catequistica y liturgica.

Junto a un proceso evidente de crecimiento y a elementos de renovacion, los CI revel an la presencia de aspectos todavia por /lenar, de resistencias al cambio pedido par el XX CGE y la persistencia de actitudes superficiales y negativas.

En mas de un caso, denuncian la ausencia de un proyecto educativo y pastoral concreto, salido de la reflexion de la comunidad, abierto alas cambiadas situaciones de los tiempos, confrontado can las lineas de nuestra tradicion. Sefialan des cui do e ignorancia de los elementos fundamentales del Sistema Preventivo de Don Bosco y una interpretacion del mismo no equilibrada. A veces, se constata un bajon en la fuerza del testimonio y la ausencia de experiencias salesianas significativas, cap aces de suscitar el interes y camp rami so de los jovenes.

En algun caso aparecen incertidumbres sobre la finalidad precisa de nuestra accion pastoral, de tal modo que algunos hermanos dudan 0 no se deciden

frente a propuestas cristianas explicitas, aun cuando respeten los ritmos y los temas de crecimiento. Por consiguiente, no siempre resultan claras y pre. cisas ideas y juicios respecto a puntos esenciales del metodo educativo salesiano: la praxis sacra. mental (particularmente respecto a la Penitencia), la devocion mariana, la piedad sencilla y popular y la catequesis sistematica e integral extendida a todas las edades, de acuerdo con las indicaciones de la Iglesia local.

Aparece tambien una pobre comprension de los problemas que la condicion juvenil y popular plantea a la experiencia cristiana, como por ejemplo: el ancho pluralismo de modelos culturales, la dificultad del lenguaje en las subculturas juveniles y populares, las aspiraciones a la participacion y corresponsabilidad a todos los niveles, la sed de igua1dad y de justicia.

1.1.3 Las causas

No tomamos aqui en consideracion 1as causas que estan ligadas a condiciones sociopoliticas que impiden 1a plena realizacion del proyecto educativo pastoral salesiano: la evangelizacion no puede desarrollarse en todas partes, en amplia libertad de formas y expresiones.

Pero incluso don de existen amplias zonas de accion, subsisten causas que limitan y falsean la accion educadora y evangelizadora. Se podrian resumir asi: una «mentalizacion» insuficiente y una apertura insuficiente alas exigencias de la accion pedagogica y pastoral, propuestas por la renovacion; una cierta cerrazon del horizonte cultural y de la formacion de base, que dificulta la percepcion de los cambios sociales, las solicitacione.s provenientes del mundo popular y juvenil, las indicaciones de] Magisterio. En la raiz de ciertas carencias y limites de nuestra acci6n, no seria dificil descubrir la presencia de colaboradores seglares, a veces no suficientemente formados e insensibles a nuestro proyecto mientras los pocos salesianos presentes estan

ocupados muchas veces en cargos administrativos y de organizacion.

1.1.4 Cuadro de referencia

Para la evaluacion de la realidad efectiva tenemos un punta de referencia de maxima categoria en el articulo 2 de las Constituciones, que traza la mision Salesiana: «Realizar, en la consagracion religiosa, el plan apostolico del Fundador; ser, con estilo salesiano, los signos y portadores del amor dOeDios a los jovenes, especialmente a los mas pobres » 12. «Es un servicio total» y «creativo» que «abarca todas las verdaderas exigencias y reales necesidades del joven: corporales, espirituales y afectivas ». Es una «formacion integral» que implica la respuesta generosa a sus necesidades multiples: «de cultura, de vivienda, de actividades y convivencia en el tiempo libre, de ambientes educativos Henos de vitalidad» 13.

, En la cuspide queda la «actividad evangelizadora y catequistica» que «es la dimension fundamental de nuestra mision. Como salesianos, todos y en toda ocasion, somos educadores de la fe» 14. «El Salesiano civiliza evangelizando y evangeliza civilizando» 15. Y en esta linea siguen siendo fundament ales los textos del XX CGE y, sobre todo, los documentos ya citados 3 y 4, Evangelizaci6n y Catequesis 16y Renovaci6n pastoral de la acci6n salesiana entre los j6venes 17, los cuales revelan una particular sin tonia con Evangelii Nuntiandi, con los Sinodos II, III Y IV de los Obispos (que, respectivamente, hablaron de la justicia en el mundo, la evangelizaci6n y promoci6n humana, la Catequesis en nuestro tiempo) y el reciente documento sobre la Escuela

12 Tambien Canst. 7, 17-33, 40; Reg, 1-2; ACGE 88-89. 13 ACGE 353; mas analiticamente ACGE 354, 178-182, 256-258. 14 Canst. 20. 15 ACGE 134, 61. 16 ACGE 274-341. 17 ACGE 342-399.

Catolica de la Congregacion para la educacion catolica.

En este punto, recordamos algunos objetivos, elementos esenciales para una accion educativa pastoral salesiana fiel al proyecto del Fundador y en dialogo con las exigencias de nuestros destinatarios.

Sera tarea de las Inspectorias y de las comunidades locales el volver a to mar estos elementos e incluirlos, con las modificaciones oportunas, en sus planes y proyectos educativos a nivel de Oratorio, Centro Juvenil, de Escuela, y de otras presencias salesianas entre los jovenes de las clases populares.

Esta breve indicacion quiere tambien ser una invitacion a un esfuerzo continuo de reinterpretacion y lectura, a la luz del espiritu de Don Bosco, de la rica documentacion de la Congregacion y la Iglesia, en la cual se hallan todos los puntos citados.

Pareceria oportuno el intentar una clasificacion adoptando como criterio cuanto afirmaba Don Bosco: «Este sistema se apoya enteramente en la razon, la religion y sobre el amon> 18. Mas que base para una sistematizacion de los contenidos, este principio fundamental indica una triple inspiracion conjunta que compenetra y anima todos y cada uno de los aspectos de la experiencia educativa y pastoral de Don Bosco.

De hecho, segun la verdadera teologia de encarnacion, todo el rico patrimonio de valores humanos y religiosos que garantizan un genuino desarrollo humano, religioso y cristiano de cada individuo, debe estar impregnado de razon, de religion y de amor.

En el pIano del crecimiento personal queremos ayudar de modo particular al joven a construir una humanidad sana y equilibrada, favoreciendo y promoviendo:

18 Op.Sist.Prev., 1887, en Opere Edite, vol. XXVIII, p. 424.

- una gradual maduracion a la libertad, a asumir las propias responsabilidades personales y sociales; a la recta percepcion de los valores;

- una relacion serena y positiva can las personas y las casas, tal, que nutra y estimule su creatividad y reduzca conflictos y tensiones;

- la capacidad de cola carse en situacion dinamico- critica ante los acontecimientos, can fidelidad alas valores de la tradicion y can apertura alas exigencias de la historia, capaz entonces de tomar decisiones personales cohe. rentes;

- una sabia educacion sexual y al amor, que 10 ayude a comprender el dinamismo de creci. miento, de donacion y de encuentro, dentro de un proyecto de vida;

- la busqueda y el proyecto del propio futuro para liberar y guiar hacia una eleccion vocacional precisa, el inmenso potencial que va escondida en el destino de todo joven, aun en el menos dot ado humanamente.

En el pIano del crecimiento social queremos ayudar a los destinatarios a que tengan un corazon y un espiritu abiertos al mundo y a la Hamada de los demas. Para ello educamos:

- a la disponibilidad, la solidaridad, el dialogo, la participacion, la corresponsabilidad;

- a su insercion en la comunidad a traves de la vida y.la experiencia del grupo;

- a la lucha por la justicia y por la construccion de una sociedad mas justa y humana.

1.1.5 Un proyecto positivamente orientado hacia Cristo

Un proyecto tal, en sus contenidos, en sus metas, en su estilo, puede proponerse incluso a quien no camp art a nuestra vision del mundo ni participe en nuestra fe. Par otro lado, no son pocos los salesianos que actuan en ambientes profundamente secularizados 0 no afectados todavia par el anuncio del Evangelio.

Tambien en estos casos el sistema educativo de Don Bosco se revela genial en sus intuiciones y dotado de las mas variadas posibilidades. Aplicado con ductilidad, gradualidad y sincero respeto hacia los valores humanos y religiosos presentes en las culturas 0 religiones de nuestros destinatarios 19produce frutos fecundos en el pIano educativo, crea amistad y suscita simpatla en alumnos y exalumnos, desencadena grandes energlas de bien, y, en no pocos casos, coloca los fundamentos de un camino libre de conversion a la fe cristiana.

Todo ello, sin embargo, no impide que to do proyecto educativo del salesiano halle su inspiracion y sus motivaciones en el Evangelio. La luz que 10 ilumina y la meta a la que ultimamente conduce, es Cristo. El hacer conocer a Dios como Padre y hallar su voluntad en cada momento y colaborar con Cristo Jesus por la venida del Reino 20es el fin ultimo de toda accion educativa salesiana.

El proyecto salesiano mira, por tanto, a otro crecimiento: el crecimiento en Cristo en la Iglesia. En nuestro proyecto educativo, Cristo es el fundamento: El muestra y promueve el nuevo sentido de la existencia y la transforma dando al hombre posibilidad de vivir de modo divino, es decir, de pensar, de querer y actuar segun el Evangelio, haciendo de las bienaventuranzas la norma de vida 21.

En continuidad con el esfuerzo de maduracion y de promocion de los valores mas especificamente humanos, en la accion educativa y pastoral salesiana, se desarrolla la direccion propiamente religiosa y cristina.

Las dos !ineas no son de por Sl sucesivas cronologicamente y menos divergentes, sino que tocan dos aspectos esenciales de la unica vocacion del hombre, tal como esta dibujada en el proyecto de Dios.

,. Nostra Aetate, n. 2. 20 Cfr. Const. 21. 21 EC, nn.34-35.

En el pIano religioso cristiano la accion salesiana mira a la educacion de una fe inteligente y operan. te 22al despertar de la esperanza, del optimismo (el servir al Senor con alegria) 2J y a la vida de gracia. Da impulso a la caridad en una experiencia integral de vida alimentada por una catequesis viva y por una predicacion concreta y apropiada. Ensefia a descubrir y amar a la Iglesia como signa eficaz de comunion y de servicio aDios y a los hermanos, y a ver en el Papa el vinculo de la unidad y la caridad en la Iglesia. Race vivir la experiencia de celebraciones liturgicas alegres y juveniles con in. tensa participacion en la Eucaristia. Promueve una fuerte devocion a la Virgen, Auxilio de los Cristia. nos, Madre de gracia, verdadero modelo de vida de fe y de pureza serena y victoriosa 24. Educa y suscita una vida de oracion autentica con particular cui dado de utilizar las formas mas accesibles y cercanas a la piedad juvenil y popular 25.

Finalmente, como sintesis y corona cion de ma. duracion progresiva en 10 humano y 10 cristiano, 'esta presente siempre, como objetivo, la orientacion vocacional con todas sus posibilidades de eleccion: laical, religiosa, sacerdotal. Es el mas precioso fruto de un proceso educatlvo y evangelizador cumplido (vease: la fecundidad vocacional de nuestra acci6n pastoral, nn. 106.119).

Tratando del proyecto educativo salesiano es ne. cesaria una breve reflexion sobre 10 que Don Bosco consideraba «como las columnas del edificio educativo », los sacramentos de la Reconciliacion y la Eu. caristia y la devocion mariana 26.

1.1.6 La vida sacramental y liturgica

Releyendo las tres biografias de jovenes, escritas por Don Bosco y considerando la praxis sacramen.

22 ACGE 63, 64, 307.311. 2:< Cfr Exhortaci6n Apost6lica, Gaudete in Domino 2' Const. 65; cfr Marialis Cultus. 25 EN 48. 26 STELLA, P., Don Bosco nella storia della religiosita p. 319.

del Oratorio a la luz de la sensibilidad modern a y de la doctrina del Vaticano II, es facil captar la riqueza y actualidad de algunas insistencias y aspectos de la pedagogia salesiana.

En la pedagogia de la Penitencia, es una caracteristica de Don Bosco la continuidad entre el estilo de acercarse al muchacho en el seno del proceso educativo y el que logra establecer en el momento sacramental. Se trata de la misma paternidad, amistad y confianza que despiertan en el joyen la atencion a los movimientos de la gracia y un esfuerzo por superar el pecado.

EI encuentro sacramental necesita ordinariamente una armonia educativa precedente 27.Don Bosco decia, con razon, que la confesion era la «llave de la educacion», porque vinculando personalmente al muchacho, 10 invita a vencerse a si mismo. EI encuentro penitencial constante, el dialogo franco y sereno, el proposito que suscita la constancia, ofrecen ocasiones de excepcional valor educativo.

No pueden olvidarse las varias circunstancias que la liturgia presenta 0 halladas en la devocion popular 0 buscadas sabiamente por el educador, para ofrecer a los jovenes momentos y celebraciones comunitarias de penitencia, cuyo c1ima es fiesta y gozo, como conviene al memorial de su misma salvacion.

Otro importante aspecto que hay que resaltar es el valor educativo del ano liturgico. En el pensamiento de Don Bosco, la plena y consciente participacion en la obra salvifica, se organiza alrededor de la celebracion del ano liturgico; sus ritmos condicionan la comunidad juvenil, indicandoles un camino de crecimiento espiritual y el compromiso gradual que se asume para responder a la llamada de Dios. Es un modo concreto de estructurar un proyecto educativo sobre el misterio de Cristo. Y en el centro, se encuentra siempre el encuentro con Cristo en la Eucaristia.

27 Bosco G., Scritti spirituali a cura di J. Aubry, p. 176, notas 5 y 6.

Todo esto se programa a la luz de una catequesis eficaz que ayuda a los jovenes aver las celebra. ciones liturgicas como «expresi6n sacramental de la vida de los bautizados y de su historia, y, par tanto, los educa a la continuidad entre Eucaristia y compromiso comunitario; entre misa y liturgia de la vida, entre "liberacion del mal", invocada en la oracion, y liberacion actuada en la sociedad; entre el gesto liturgico de la paz y la verdadera paz llevada al ambiente donde se vive» 28. «Animar», «dar comodidad para frecuentar los sacramentos», «poner de relieve la belleza, la grandeza, la santidad de la religion», «no obligar nunca», obrar de manera que los jovenes «queden prendados espontfmeamente de los sacramentos, se acerquen a ellos libremente con alegria y con fruto»: son expresiones claras del sistema preventivo que nos manifiestan la sensibilidad educativa y la pedagogia sacramental de Don Bosco 29.

1.1.7 Devoci6n a Maria

Maria estuvo presente de modo muy particular en la obra evangelizadora de Don Bosco. EI estuvo siempre convencido de que esta devocion es un elemento esencial en el crecimiento cristiano de sus muchachos y jovenes. La promovio y celebro las fiestas marianas con solemnidad, creando en esos dias un ambiente de alegria y serenidad y, a la vez, de una fuerte tension espiritual. La devocion a Maria Auxiliadora esta en la raiz de nuestros origenes y, por 10 tanto, tambien de nuestra renovacion.

EI CG21, por fidelidad a Don Bosco, a la luz del Vaticano II y de la exhortacion apostolica Marialis Cult us, de Pablo VI, invita a todos los salesianos a volver a descubrir y valorizar la presencia de Maria en su vida y en su accion educadora en medio de los jovenes.

La Virgen ejerce, ante todo, una funcion de educadora: nuestras Constituciones recuerdan que «la

28 ACGE 324. " ACGE 326.

Virgen Maria esta presente, de una manera especial, en la educacion de estos hijos de Dios» 30-En la vida de nuestros muchachos ella no es solamente la Madre que acoge y comprende, sino tambien signo de victoria contra el pecado y ayuda en la cotidiana lucha. «Demosla a conocer, hagamosla admirar y amar, como la que ha creido y esta dispuesta a ayudar a los cristianos en camino» 31.

El Salesiano no se contenta con nutrir hacia Maria «una devocion recia y filial» 32, sino que, a imitacion de Don Bosco, mira a Maria como inspiradora de su accion educativa. A partir del sueno de los nueve anos y por toda su vida, Don Bosco aprendio de ella los rasgos fundamentales de su sistema: actitud de dulzura y de paciencia, de pureza serena y luminosa, de trabajo y de templanza.

Los Salesianos, en su obra de educadores de la fe de los jovenes, inspirandose en las celebraciones del ano liturgico y en la Sagrada Escritura, sabran descubrir a Maria como «como ejemplo de la actitud espiritual con la que la Iglesia celebra y vive los divinos misterios», especialmente en la celebracion de la Eucaristia. En otras palabras: la Virgen en actitud de escucha que acoge la palabra de Dios con fe; la Virgen en oracion personal y comunitaria; la Virgen que nos entrega a Cristo por su fe y obediencia; la Virgen que se ofrece junto a Cristo... 33.

Partiendo de las instancias y exigencias de los j6venes, sabnin, como Don Bosco, presentar a Maria como modelo de vida cristiana, porque «se ad. hirio total y responsablemente ala voluntad de Dios; acogio la palabra y la puso en practica; su accion estuvo animada por la caridad y el espiritu de servido; hizo de la propia vida un culto aDios, e hizo del culto un compromiso de vida; fue la primera y la mas perfecta discipula de Cristo» 34.Todo esto

30 Canst. 21. 31 Canst. 21. 32 Canst. 65. 33 Marialis Cultus, 16.20. 31 Marialis Cultus, 35, 21.

presentese tambien en vista de una madura conciencia eclesial que Maria desarrollo en el pueblo de Dios 35.

1.1.8 E1 empeiia priaritaria par 1a Catequesis

Ninguna solida pnktica sacramental a devocion pueden suplir en la Iglesia la falta de procesos de conversion e itinerarios de crecimiento en la fe. Hay una ligazon irrompible entre evangelizacion y sacramentos: la evangelizacion, como catequesis que es, prepara al sacramento y como predicacion liturgica, acompana su celebracion 36.

El primado de la evangelizacion y en particular de la catequesis, ha sido solemnemente reiterado par los documentos oficiales de la Iglesia tras el Vaticano II, ya sea a nivel de Iglesia universal 37,ya a niveles locales 38 y tambien par el XX CGE 39.

Par ello y coherentes can las afirmaciones del Sinodo de Obispos de 1977, los Sa1esianos intensi- 'ficanin, en todas sus actividades, su esfuerzo catequistico «hasta atribuirle la prioridad de su accion pastoraL.. aceptando e1 dedi car todas sus fuerzas a 1a misma actividad catequistica junto can la de la evangelizacion» 40.

Naturalmente, la catequesis presupone un anuncia- testimonio del evento salvifico de Dios en Cristo y aquella primera opcion global de fe que constituye el proceso de conversion. Y en este contexto, los Salesianos, mediante la catequesis, no solo ocasional sino organica y sistematica, quieren orientar a las comunidades educativas y pastorales al mas profunda conocimiento y a la experiencia integral del mensaje de salvacion. Este sera presentado como un anuncio jubiloso al hombre de hay, luz

35 LG 52-69. 36 EN 44 47 :\\7 Cfr, p~r ej., Direttorio catechistico generale, 1971 38 Cfr Direttori nazionali. 39 ACGE 274-341. 40 Sin. 77, conc1usi6n. .

para su vida, solucion a sus problemas mediante los multiples recurs os de la sabiduria cristiana.

En esta actividad, los Salesianos, siguiendo las huellas de Don Bosco, siempre at en to a «las necesidades de los tiempos», tendran bien en cuenta las situaciones de ambientes poco 0 nada evangelizados, aunque a veces iniciados ya en la vida sacramental, dando a la catequesis la dimension misionera que se remonta a los principios y funda. mentos de toda conversion verdadera. Por otra parte, cuidaran todas aquellas formas que llevan gradualmente a la promocion de una plena madurez cristiana, asumiendo compromisos cada vez mas vastos en la comunidad civil y eclesial.

1.2 EI estilo y el espiritu del proyecto educativo y pastoral salesiano

El problema

Como Don Bosco, el Salesiano ve su mision educadora y evangelizadora no solo en medio y para los jovenes y el pueblo, sino con ellos y por medio de ellos.

«Esta presencia atenta y amorosa nos abre al conocimiento del mundo juvenil y popular y a la solidaridad con el, en todos los aspectos legitimos de su dinamismo» 41. Es, pues, natural que las exi. gencias mas profundas de la evangelizacion y de la promo cion humana empapen to do el «sistema preventivo» no solo en sus contenidos, sino tambien en el estilo de ponerlo en practica. EI sistema debe entenderse en senti do amplio y comprensivo y no solo en perspectivas de tecnica pedagogica. De hecho, en la mente de Don Bosco y en la tradicion salesiana, el «Sistema Preventivo» tiende a identificarse cada vez mas con el «espiritu salesiano»: es pedagogia a la vez que pastoral y espiritualidad que asocia a educadores (como individuos y como

" Const. 16.

comunidad) y destinatarios en una (mica experiencia dinamica, en contenidos y metodos, con actitudes y comportamientos de caracteristicas netamente peculiares 42.

1.2.1 La comprobaci6n

EI CG21 somete tambien a examen este estilo y su intima union con la mision educadora salesiana. Este estilo es condicion de autenticidad evangelizadora y de real conformidad con Don Bosco. Perder este estilo significa perder un rasgo fundamental de nuestra identidad salesiana: «EI Sistema Preventivo sea cosa nuestra», «Valga esto para el trato de los Salesianos entre si, entre los alumnos y los demas, ya internos 0 externos» 43.

La Relacion del Rector Mayor (RRM) y las propuestas de varios CI invitan a hacer una meditacion responsable 44.

De la evaluacion surgen signos positivos dignos , de mencion.

Se nota un cierto despertar de todos los Salesianos sobre el Sistema Preventivo y de experiencias que a el se refieren directamente.

En la variada y a veces confusa sucesion de nuevas ideologias y practicas educativas, se nota, dentro y fuera de la Familia Salesiana, una notable demand a de pedagogia salesiana que halla su fecunda aplicacion incluso en el ambito de la familia, de la escuela publica, de los movimientos juveniles y de las varias instituciones formadoras y pastorales de la Iglesia.

EI interes de los Salesianos por el Sistema Preventivo no se ha traducido solamente en un aumento de encuentros, reuniones, «charlas» de gran utilidad ideal y practica 45,sino tambien en el brote

42 Cfr Carta de Don Bosco a Mons. J. Cagliero, 6 ago 1886; y a D. S. Costamagna, 10 ago 1886, Epist. IV, 327-329 y 332-336. '" Cfr Cartas citadas, Epist. IV, 332 y 328. ,. Sch. Prec. 253-258; RRM 183-185, 196. 45 RRM 185.

de nuevos movimientos juveniles y en una renovada y mas incisiva presencia en la promocion educativa del tiempo libre, de la educacion, de la didactica, de la catequesis, de la pastoral, con iniciativas organizadoras y de anima cion a nivel nacional e internacional.

Y, sin embargo, se denuncia tambien el ensombrecimiento cuando no la perdida (al menos en ciertas zonas) de experiencias tipicas del Sistema Preventivo: la animadora presencia-asistencia, la convivencia con los jovenes, el cIima y estilo de familia. Se esta menos en medio de los jovenes y la gente senciIIa, se vive menos para ellos. Parece que se entiende menos el sentido profundo de la asistencia salesiana activa, y ello tam bien por un mal entendido sentido de autonomia del joven y de nodirigismo; se crea menos espiritu de familia, precisamente ahora que los movimientos y grupos juveniles privilegian las relaciones primarias e interpersonales; se promueven menos las iniciativas que crean el ambiente caracteristico salesiano de educacion. Y, asi, en varios ambientes se vacian 0 se descuidan totalmente actividades creidas, erroneamente, extrafias al compromiso propiamente educativo y evangelizador: el teatro, el canto, la mLlsica, los juegos, etc... Afiadase: una amplia ignorancia del significado historico y cientifico del sistema; falta de adaptacion a la variedad de situaciones; falta de renovacion y contacto con las apor. taciones mas aceptados de las modernas ciencias del hombre; una adhesion ciega a metodos educativos y pastorales no compatibles con los fines y caracteristicas del servicio apostolico salesiano 46.

1.2.2 Las causas

A veces pueden venir de lejos, como, por ejemplo, experiencias unilaterales y mecanicas del Sistema Preventivo que 10 han identificado con algo

.. RRM 184.

negativo-protector, han confundido asistencia educadora con vigilancia disciplinar, paternidad con paternalismo, libertad con permisividad, etc.

Otra explicaci6n podria ser la escasa disponibilidad de documentaci6n y literatura especifica en 1a lengua del educador. Y yen do mas a la raiz, tal vez hallemos la mengua de la identidad y vitali dad religiosa salesiana, que no podia sino arrastrar tambien al Sistema Preventivo, si es verdad que en el Don Bosco «ha condensado para sus hijos toda 1a espiritualidad de la acci6n apost61ica» 47.

1.2.3 Cuadro de referencia

Los articulos 25 y 40 de las Constituciones nos ofrecen un precioso punta de referencia 48, eco de orientaciones capitulares estimulantes 49. Pero para una mas precisa eva1uaci6n de la situaci6n y de 1a posibilidad de una amplia recuperaci6n operativa, parece "Mil una somera recapitulaci6n de los ele- ,mentos que «cualifican» el Sistema.

En todos los protagonistas de 1a actividad educativa y pastoral se requiere una actitud de blisqueda, encuentro, presencia, comprensi6n, dialogo so; el esfuerzo de una educaci6n permanente en los adultos, y 1a cordial disponibilidad al desarrollo en los j6venes.

En 1os educadores, ademas, como individuos y como comunidad, tienen una importancia fundamental algunas disposiciones y actitudes:

- la atenci6n a los j6venes reales, a sus verdaderas necesidades, a los intereses actuales y las tareas que les aguardan en la vida; simpatia hacia su mundo y capacidad de acogida y de dialogo;

- la estima y justa consideraci6n de los valores

47 RRM 183. " Cfr Const. 16 y Reg. 3. .. ACGE 349, 188 Y 88-105; sobre todo 360-365. 5. ACGE 360-365.

aportados por los jovenes y atencion a los dinamismos de su crecimiento;

- la racionalidad de norm as y reglas, la ere at ividad y la flexibilidad de las propuestas 51;

- el esfuerzo por solicitar la adhesion a ciertos valores, no por forzada imposicion, sino mediante la persuasion y el amor;

- la conviccion, humana y cristianamente animadora, de que «en todo joven, aun el mas desgraciado, hay algun punta accesible al bien; el deber primario del educador es encontrar este punto, esta cuerda sensible y sacarle provecho » 52;

- la franqueza de una propuesta cristiana integral, proporcionada, naturalmente, a la diversidad de edad, de nivel cultural y espiritual, de capacidad de escucha y aceptaci6n.

El Sistema Preventivo requiere ademas un intenso y claro ambiente de participacion y de relaciones sinceramente amigables y fraternas; el espfritu de familia, de sencillez y de sinceridad; un clima de optimismo y de gozo «reflejo de la gracia de Dios y de la serenidad interior» 53; un mundo comunitario de crecimiento humano y cristiano, vivificado por la presencia amorosa y solidaria, animadora y activa de los educadores (la «asistencia») 54; una sabia pedagogfa del tiempo libre. Favorece, por ello, todas las formas constructivas de actividad y vida asociativa (en el pensamiento de Don Bosco las Compaiifas debfan ser «obra de los muchachos») y ello incluso como una con creta iniciaci6n al compromiso comunitario, civil y eclesiastico 55.

Exige tambien el compromiso apost6lico de los j6venes que se hacen evangelizadores de sus mismos compaiieros y amigos. Esta faceta entra aquì

51 ACGE 362. '2 MB 5,367. " Pablo VI al CG21 ACG21 474. 54 ACGE 57, 363, 188; Canst. 16. " Canst. 46; ACGE 94, 321, 368.

con plena espontaneidad y logica y constituye una feliz intuicion de Don Bosco, gran suscitador de muchachos-apostoles, y genial inventor de las Companias religiosas. En la vida asociativa, los mucha- chos encuentran al mismo tiempo sitio para el protagonismo, estimulo a la inventiva y creatividad, I terreno de autentica accion misionera.

Finalmente, el Sistema debeni ser realmente «preventivo»: de hecho se mira a educar al joven del futuro, prevenir y profundizar y anticipar los tiempos, mediante un ejercicio gradual y madurador de la libertad. En la medida de 10 posible, se pretende estar «presentes» con los jovenes, inc1uso tras el primer periodo de formacion 56.A este fin, los educadores «como padres amorosos hablan, sirviendo de guias en to do acontecimiento, dan consejos y corrigen amorosamente» 57 favoreciendo la colaboracion de los mismos jovenes, de sus familias y de todas las fuerzas constructivas disponibles 58.

Estas notas caracteristicas de nuestro patrimonio I pedagogico-pastoral, dosificadas con sabiduria y oportunamente integradas con el anuncio explicito, constituyen un momenta indispensable y sumamente fecundo en el proceso de acercamiento de los jO' 1 venes y del pueblo a los caminos de la fe.

En este c1ima la adhesion y la comunicacion de la fe se efectua no solo a traves de la palabra y la ensefianza, sino tambien a traves del ambiente, los gestos, las actitudes y los momentos todos de la existencia. No solo es educador y catequista el Salesiano que ensefia y da catecismo, sino inc1uso el hermano que comparte su vida con los muchachos, ya sea en momentos de distension y recreo, ya sea en los de oracion y celebracion liturgica.

El Salesiano evangeliza mas por 10 que hace que por 10 que dice. Da testimonio ya con su apertura y disponibilidad aDios, ya con el ejemplo de una

56 Op. Sisto Prevo en Opere edite, vol. XXVIII, p. 428. " Ibidem, p. 424. " ACGE 321, 361-367.

personalidad sana, equilibrada y madura 59. Fiel tambien en esto al estilo de Don Bosco en quien las cualidades humanas y los dones naturales y el esfuerzo de su voluntad se fundieron armonicamente con los dones de la gracia y los extraordinarios caris mas de una especial vocacion.

1.2.4 Lineas de renovaci6n

Un renacimiento general e incisivo del estilo pastoral y educativo de Don Bosco va ligado a un amplio empefio en dos lineas: practico-vital y teorico reflexivo-

Todo Salesiano, ya sea maestro 0 animador de grupos juveniles, consciente de la necesidad de su presencia en el grupo con fines educativos, aceptara los sacrificios inherentes al compromiso de la asistencia salesianamente activa.

Esto significa:

- cuidar el contacto personal, periodico, con cada uno de los jovenes, para despertar en ellos la necesidad y la busqueda de valores;

- suscitar la coop era cion comunitaria de los jovenes para los momentos mas intimamente religiosos de sus encuentros, de modo anaIogo a como se hace para organizar las actividades especificas del grupo (actividades didacticas, deportivas, sociales, etc.);

- poner el maxima esfuerzo en que nazcan dentro del grupo expresiones de fe vivida: momentos de oracion, lecturas y cotejo con la palabra de Dios, preparacion para las celebraciones liturgicas y sacramentales...

En la practica educativa y pastoral todos los Salesianos se esforzaran, con atenta sensibilidad innova dora, en reactivar urgentemente estos elementos del Sistema Preventivo que parecen haber sufrido un decaimiento mas sensible: la presenciaasistencia, el clima de familia, la educacion en la

'9 EN 30ss.

fe y el sentido de la oracion, el significado vida sacramental, la devocion a Maria y el amor y fidelidad a la Iglesia y al Papa.

En cada una de nuestras casas, basandose en el principio de la comunidad educativa, promuevan. se iniciativas capaces de suscitar y potenciar la colaboracion responsable de los educadores, de 105 I maestros, de 105 padres, de los jovenes, del personal tecnico y administrativo: consejo de la comunidad educativa y pastoral, conferencias, encuentros... 60.

De aqui, la necesidad de que toda comunidad prepare y ponga al dia cada ano una programacion educativa y pastoral, claramente evangelizadora y atenta alas exigencias concretas que se detectan en el ambiente social. Tal programacion se hace juntamente con 105 muchachos, 105 otros destinatarios y 105 componentes de la Familia Salesiana. En la programacion debe explicitarse claramente el proyecto anual, las metas a conseguir, 105 puntos centrales en torno a 105 cuales hay que disponer 105 objetivos intermedios y sus contenidos; debe tambien aparecer una distribucion con creta de responsabilidades y deberes entre Salesianos y co- I laboradores seglares. De este modo se evitanin in. dividualismos e improvisaciones, y se facilitani la animacion de la entera comunidad y la disponibilidad de todos 105 ambientes para la obra de evangelizacion.

En tales proyectos y al lado de los contenidos esenciales, ya indicados sumariamente en el cuadro de referencia 61, no debenin faltar algunas di. mensiones senaladas par muchos Capitulos Inspectoriales (CI) como particularmente pedidas par «las necesidades de 105 tiempos»: la formacion para la I insercion dimimica de 105 jovenes en una sociedad pluralista; la educacion para trabajar por la justicia y la paz 62; la formacion a la responsabilidad

I GO Vide Assamb1ea de los Hermanos en Reg. 168 y en ACGE 710. " Vide, nn. 77-84. 62 Canst. 19.

civica, social y politica; la iniciacion a un compromiso progresivo de servicio concreto 63; la informacion con una adecuada capacitacion para la valoracion critic a constructiva de las mas conocidas ideologias contemporaneas.

1.3 ORIENTACIONES OPERATIVAS

Cada Inspectoria (0 grupo de Inspectorias) elaborara un proyecto educativo adaptado a la realidad local como base de programacion y de control para sus varias obras, en la linea de las opciones de fondo hechas por la Congregacion: Oratorios, Centros Juveniles, Escuelas, Internados, Convictorios, Residencias, Parroquias, Misiones, etc.

Para favorecer la unidad en la descentralizacion, el Dicasterio de la Pastoral Juvenil, a la luz de la experiencia y de la reflexion salesiana, indique las lineas fundamentales de este proyecto (objetivos, contenidos, metodo, caracteristicas...), teniendo en cuenta las divers as situaciones geograficas y culturales.

b) El Inspector, las Conferencias Inspectoriales y el Regional promuevan reuniones, dias 0 semanas de estudio, debates, intercambios de experiencias educativas y pastorales, eventualmente abiertas tambien a educadores y maestros que no sean de la Familia Salesiana, a fin de favorecer el conocimiento profundo y reactualizado del Sistema educativo de Don Bosco, teniendo sabiamente en cuenta la condicion juvenil y popular del propio ambiente y las aportaciones validas de las ciencias pedagogicas y antropologicas de hoy.

c) En el espiritu del «Prefectae caritatis» (n. 2) y en la conviccion de que es sumamente import ante que la Congregacion, extendida por todo el mUDdo, vuelva a encontrar constantemente su unidad y autenticidad en el espiritu del Fundador y en

63 ACGE 68; cfr 54, 61.

las intenciones comunes acerca de la evangelizaci6n y promoci6n humana de los j6venes y del ceto popular, el CG21 delibera 10 que sigue:

El Consejo Superior erigini cuanto antes sea posible un lnstituto Historioo Salesiano, que, en las formas ideal y tecnicamente mas apropiadas, ponga a disposici6n de la Familia Salesiana, de la Iglesia y del mundo de la cultura y de la acci6n social, los documentos del rico patrimonio espiritual dejado por Don Bosco y desarrollado por sus hijos y promueva a todos los niveles su estudio profundo, su comentario y su difusi6n. La Congregaci6n entera contribuira a esta realizaci6n y a la vitalidad de esta importante iniciativa con el personal y medios de que disponga.

2. LA FECUNDIDAD VOCACIONAL DE NUESTRA ACCION PASTORAL En el proyecto salesiano la accion educativa y pastoral tiene, como objetivo esencial, una dimension vocacional. Mas aun, el descubrimiento de la propia Hamada, la opcion libre y bien pensada de un proyecto de vida constituye la meta y la coronacion de to do proceso de maduracion humana y cristiana.

El mensaje evangelico, que reune al pueblo de Dios 1 es un Hamamiento comunitario; y para cada creyente, el acoger el mensaje del Evangelio es acoger la Hamada personal y asumir la mision misma de la Iglesia segun su particular vocacion 2.

La pastoral vocacional sera, pues, un servicio de evangelizacion, con un particular acento sobre la ayuda y asistencia a cada fiel, para que entre, con todo su ser personal y su libre eleccion, en el pIano de Dios 3.

2.1 EI problema fundamental y sus aspectos

La progresiva disminucion en la Iglesia entera del numero de vocaciones religiosas y sacerdotales, ha despertado en los ultimos decenios una refle. xion cada vez mas profunda que ha contribuido a clarificar mejor la verdadera naturaleza e impor. tancia del problema. .

Tambien la Congregacion salesiana ha sufrido, en los arios pasados, la misma crisis y la comprobacion hecha por los CI revela que no puede considerarse todavia como superada. Tambien para nosotros esta reflexion, ya iniciada por el XX CGE, ha iluminado el problema con nuevas perspectivas.

1 Cfr EN 15. 2 Cfr PO 6; EN 18; CGE 661-662. 3 Cfr RdC 41, 43, 131.

Palpamos si, dolorosamente, con la mano la esca. sez de nuevas promociones; tal, que a veces se po-, dria temer por el futuro de nuestra mision; can todo, la luz proveniente de la reflexion de toda la Iglesia 4 nos ayuda aver esta escasez y crisis numerica como uno de los signos a traves de los cuales el Senor nos hace tomar conciencia de 10 esencial. En efecto, solamente la Iglesia ministerial entera, movilizada en cada uno de sus miembros segun el don y la vocacion que el Espiritu confiere a cada uno, es capaz de un compromiso serio de evangelizacion.

Es, por tanto, un problema vital para la Iglesia el de la vocacion personal de cada cristiano; cs el problema de la educacion en la fe y de la disponibilidad total a J esucristo. El Senor llama tanto hoy como ayer, y quien tiene un corazon abierto comprendera si El 10 llama a participar de un modo mas directo en su mision.

No se trata, pues, principalmente de un problema de escasez numerica, sino de un problema de fondo de la evangelizacion misma que es perenne, resuelvase como se resuelva el futuro de la situacion numeric a de las vocaciones religiosas y sacerdotales.

2.2 La situacion

Para una recta interpretacion de la situacion actual de la Congregacion, es precise hacer notar que, si damos una ojeada a los ultimos cincuenta anos, no ha habido nunca tantos estudios, reflexiones, encuentros sobre la pastoral vocacional como en estos ultimos anos.

Debemos tambien reconocer que ha crecido la sensibilidad y el empefio respecto del tema.

No debemos, por eso, mirar la situacion actual de escasez unilateralmente y con demasiado pesi-

Cfr RFIS; SDV; Ministeria quaedam.

mismo, para no atribuir a falta de principios teo. ricos 0 a mala voluntad situaciones que tienen como causa otros factores. Segun aparece en la Relacion del Rector Mayor sobre el estado general de la Congregacion 5 y en las reflexiones de los CI, la Pastoral vocacional ha avanzado: hay una mayor c1aridad de ideas, una mas atenta sensibilidad para el problema y un mayor empeno en las Inspectorias (aunque no por parte de todos los hermanos). Es una constatacion de casi todos los Capitulos Inspectoriales.

Quedan, sin embargo, algunos puntas de biles que hac en que nuestra accion en este actual momento historico sea todavia insuficiente:

- algunas senales de desorientacion en nuestra identidad salesiana y de evangelizadores de los jovenes;

- un testimonio de vida poco evangelica 0 poco comprensible;

- falta de c1aridad, frente a los muchachos, sobre puntos que se refieren a nuestra mision (destinatarios, proyecto educativo sale siano, tipo de obras, etc.);

- pastoral inadecuada que muchas veces nos hace incapaces de llegar hasta los jovenes en su individualidad (carencia de verdadera pedagogia y pastoral vocacional, falta de asimilacion de los principios inspiradores, insuficiente organizacion inspectorial, etc.);

-- absentismo, cansancio, desanimacion, desilusion de muchos hermanos que, tal vez, enfocan exc1usivamente esta situacion de tejas abajo.

Anadese a esto la situacion de los jovenes de hoy.

Inmersos en una cultura en estado de transicion, desorientados e instrumentalizados por muchos lados, frente a una Iglesia muchos de cuyos aspectos no pueden entender, nos piden un mayor y mas actual compromiso para responder a su necesidad de orientacion, de verdad, de Cristo.

5 Cfr RRM 205ss.

2.3 EI cuadro de referencia

Partiendo del Concilio Vaticano II 6 Y de los posteriores documentos de la Iglesia 7, el XX CGE ha dejado en sus documentos y en las Constituciones un cuadro de principios y de orientaciones, dentro del cual la Congregaci6n puede hallar una renovada linea de pastoral vocaciona18.

Posteriormente el Rector Mayor en una carta 9 ha animado a la Congregaci6n a trabajar con mas ahinco en la linea trazada por el XX CGE. En esta misma direcci6n el Dicasterio de la Pastoral Juvenil con su «Guia educativa de las vocaciones» ha aportado un elemento de ayuda a la reflexi6n de las Inspectorias.

El CG21 quiere ahora ofrecer a los hermanos una direcci6n de renovaci6n de este tan importante aspecto de nuestra misi6n juvenil, indicando las metas que cree fundamentales como puntos-clave para afrontar la situaci6n actual, dando a la vez algunas directrices para conseguirlas.

Las metas fundamentales son:

Comprometer a la Congregaci6n, las Inspectorias y las comunidades locales y cada Salesiano a des. arrollar su misi6n evangelizadora, esforzimdose en hacer emerger la llamada personal que Dios dirige a to do joven; a convertirse en mediadores de un mensaje evangelico que llegue personalmente a todo hombre 10y Ie ayude a «desarrollar su vocaci6n me. diante una vida diaria progresivamente inspirada y unificada en el Evangelio» 11.

Revitalizar en concreto (en las actitudes e iniciativas de acci6n) uno de los componentes de nuestra vocaci6n salesiana: el servicio activo prestado a la

6 Cfr especialmente OT 2: PO 6. 11; PC 4.

7 Cfr SDV, RC, FFIS.

, Cfr ACGE 50. 99. 250. 374. 382. 397. 576. 661-665;

692; Canst. 12. 22. 107; Reg. 72. 73.

Cfr ACS, n. 273.

'" Cfr EN 18.

II Canst. 22; cfr ACGE 374; EN 24. 72.

Iglesia, cultivando 1a vocaci6n de aquellos j6venes que el Senor llama a la vida sacerdotal 0 religiosa, a los diversos ministerios eclesiales 0 al compromiso de dirigentes seglares 12.

Como expresi6n que somos, como comunidad y como individuos, de un don que Dios ha hecho a su Iglesia, hemos de tomar conciencia de la responsabilidad de mantener vivo en ella e1 carisma sa1esiano en sus multiples formas, colaborando activamente con el Espiritu Santo en suscitar vocaciones salesianas, ya sean consagradas, ya sean seglares 13.

2.4 Las lineas de la renovaci6n

En base a una metodologia concreta para conseguir las metas senaladas, el CG21 piensa que hay que indicar algunas directrices para nuestra acci6n de promoci6n vocacional:

1. Partir de los destinatarios de nuestra pastoral vocacional.

2. Precisar las opciones pastorales fundamentales.

3. Tender a una animaci6n vocacional bien organizada.

2.4.1 Partir de los destinatarios de nuestra pastoral vocacional

Todos 105 j6venes que de cualquier modo pone el Senor en nuestro camino, tienen derecho a nuestra ayuda para orientarse a construir su personalidad y su vida «segun el Evangelio».

En todas 1as edades les debemos ayudar a orien. tarse en el descubrimiento y desarrollo de su vocaci6n: en la ninez, en la preadolescencia, en la adolescencia, en la juventud y despues de ella, pues

12 Cfr Const. 12; MB XII, 87; ACGE 50. 374. 397;

Const. (1966) 6.

13 Cfr Canst. 107; ACGE 169.

cada una de estas etapas de la vida tiene su finalidad de crecimiento y pi de decisiones proporcionadas que to do joven debe aprender a to mar responsablemente.

Como pide nuestra vocaci6n salesiana 14,debemos dedicarnos con seriedad, por medio de adecuadas actividades y estructuras, a acompanar, en su desarrollo vocacional, a los j6venes que presentan senales de una llamada de Dios a la vida consagrada (sea sacerdotal 0 religiosa) y al compromiso cristiano laical.

Siguiendo las actuales orientaciones de la Iglesia, es necesario ponerse en la linea de promoci6n de vocaciones a los varios ministerios laicales 15.

Tendremos particular interes por las vocaciones a nuestra Congregaci6n y a toda la Familia Salesiana (HMA, VDB, CC, etc...).

Hoy es necesario recalcar de un modo especial nuestro celo por las vocaciones de Coadjutores. Es este un esfuerzo que nos ayudara a comprender y e~presar mejor el verdadero sentido de la vocaci6n religiosa salesiana 16.

Las vocaciones misioneras tienen un sitio privilegiado en la pastoral vocacional salesiana.

2.4.2 Precisar las opciones pastorales fundamentales

a) Basar nuestra acci6n evangelizadora-vocacional en una profunda oraci6n-conversi6n 17que permita activar los muchos resortes espirituales que toda comunidad posee como don del Espiritu. Esto no debe ser cosa ocasional, sino la actitud habitual de una comunidad eclesial que vive en la busqueda de la voluntad de Dios y se purifica continuamente para ser fiel a su llamada, vivien do ella misma las palabras del Senor: «Rezad al Amo... para que envie operarios a su mies» 18.

" Cfr Canst. 22; ACGE 50.

15 Cfr EN 73.

" Cfr ACGE 692 ss.

17 Cfr ACGE 540; ACS, n. 273, pp. 32-39.

18 Lc 10,2; efr OT 2; SDV 12; RFIS 8. 9 a.

b) Afrontar el problema a partir de la vida del Salesiano, de la vida de la comunidad y de la cali. dad evangelizadora de su testimonio. La autenticidad de nuestro ser cristianos y salesianos es fundamental, como tambit~n 10 es una imagen de la Congregacion que presente una identidad salesiana «clara » (en sus motivaciones evangelicas, en sus destinatarios y en su proyecto educativo), que este de verdad en sintonia con los jovenes y que se exprese en una gozosa donacion 19.El testimonio y la accion de cada hermano sera siempre el estimulo mas fuer. te y el medio mas eficaz para ayudar a los jovenes a dar una generosa respuesta a Cristo.

c) Conocer y respetar la naturaleza espiritual de la vocaci6n. La obra de ayuda ofrecida a preadolescentes, adolescentes, jovenes y adultos, en la construcci6n de su indentidad cristiana, debe ser extremamente respetuosa del componente espiritual de la vocacion (que ante to do debemos conocer por experiencia personal). Es la llamada de Dios, es la acci6n del Espiritu Santo que se revela a 10 largo de todo el arco vital dentro de las situadones individuales de la historia personal y social 20.

d) Esforzarse a fin de que en tadas nuestras actividades pastorales, especialmente Las juveniles, este presente de modo «explicito» y «sistematico» la orientaci6n vocacional como una dimensi6n esencial de toda nuestra pastoral. No quede to do esto a nivel de principios intencionales, sino que de hecho sea la base para repensar un planteamiento, progra. macion y metodologia educativa de nuestras escuelas, movimientos y grupos...; sea un punta de vista privilegiado en la catequesis y la direccion espirituaPI. Este es un pun to basilar al cual debemos dar todo el debido relieve para una verdadera reno. vacion de la Pastoral Vocacional.

" Cfr PC 24.

20 Cfr PO 11; Sedes Sapientiae II-III; RF1S 5-6.

21 Cfr ACGE 374. 382. 419 e-f.

e) Tener la valentia de ofrecer a 105 j6venes incluso las vocaciones mas comprometidas. El respeto del plan de Dios sobre cada persona pide que, ademas de conducir a cada hombre a un entendimiento de si mismo y de la realidad comunitaria humana y eclesial a la luz de la fe, se tenga la valentia de una total honradez y visi6n en ayudarle a adoptar una actitud de disponibilidad frente a todas las vocaciones en la Iglesia: compromiso laical en las realidades humanas, servicio de los varios ministerios laicos en la Iglesia, servicio diaconal, vida consagrada diaconal, vida consagrada, sacerdocio ministerial 22.

Un joven cristiano no puede prescindir de considerar tambit:~n la hipotesis de la vida consagrada y del sacerdocio. El hecho de no proponerle el examen de esta posibilidad no respeta, sino que limita, su libertad. Don Bosco tenia una particular habilidad para plant ear las grandes necesidades de la Iglesia y de la juventud, entusiasmar con el ideal misionero y dirigir personalmente a los jovenes llamados, como hizo Cristo con sus Apostoles, la invitacion a seguirlo.

f) Obrar en una perspectiva eclesial abierta. Cada vocacion esta ordenada a Ia mision de Cristo y de la Iglesia: construir, a traves de la comunidad eclesial y en el mundo de los hombres, el Reino de Dios. Trabajamos, como cristianos y como salesianos, para la Iglesia, sin particularismos ni estrecheces; miramos al bien general de la Iglesia. En el plan de Ias vocaciones esto responde a un preciso compromiso muy nuestro 23.

La perspectiva eclesial nos recuerda tambien otra importante orientacion pastoral: «el deber de fomentar Ias vocaciones afecta a toda Ia comunidad cristiana» 24. Trabajamos en medio de comunidades cristianas en las cuales el Senor suscita vocaciones para las diversas tareas necesarias para la construc-

22 Cfr RF1S 7.

23 Cfr Cost. 12; cfr RF1S 7.

24 OT 2; RF1S 8.

cion de la misma comunidad. Debemos ser, en estas comunidades, «animadores» y suscitadores de la sen. sibilidad hacia este problema. Parroquias, familias, comunidades educativas, grupos y movimientos deben convertirse en el «humus» en que maduran esas vocaciones. De modo especial, debemos animar este aspecto particular entre los miembros de la Familia Salesiana, comprometiendoles de veras en este apostolado.

2.4.3 Tender a una animacion vocacional bien organizada

En las Inspectorias y en las comunidades locales se hani de modo sistematico una acci6n de sensibilizaci6n y de preparacion, de los hermanos primero, y despues de todos los componentes de la Familia Salesiana y de la comunidad educativa, para la orientacion cristiana del joven, para que esta accion part a verdaderamente de la comunidad.

Esto exige, a nivel inspectorial y local, una seria programaci6n (con su correspondiente revision) de la accion pastoral vocacional, en estrecha union con la programacion general, para hacer po sible que toda nuestra actividad sea de veras una accion orientadora.

Es necesaria en toda Inspectoria la presencia de algun responsable de la animaci6n vocacional. Puede ser una persona 0 un equipo que por su testimonio salesiano, su preparacion y prestigio entre los hermanos esten en disposicion de ser «animadores » de las comunidades inspectoriales y de las locales. Mas que personas con una delegacion para «hacen, deben ser estimuladores e informadores de las comunidades, al mismo tiempo que mantienen la union con los organismos eclesiasticos. En el equipo, si 10 hubiere, figuren miembros de toda la Familia Salesiana (Salesianos sacerdotes y coadjutores, HMA, VDB, Cooperadores).

Una funcion importante del equipo animador es la de ayudar a la comunidad inspectorial a ponerse

y mantenerse en una actitud de oracion y disponi. bilidad.

A nivel local el primer responsable de la anima. cion vocacional es el director, precisamente por su funcion de gu'a de la comunidad; promueva, en elima de fe y de oracion, un escrutinio vocacional periodico.

Haya ademas uno 0 mas hermanos que man tengan presente en la programacion y en la accion la dimension orientativa cristiana.

a) Algunas «constantes» 0 elementos que debemos tener presentes en cualquier momenta 0 lugar de trabajo:

- El elima de familia, de libertad, de acogida, de alegria y de fe, caracteristicos de la pedagogia de Don Bosco, encarnados ejemplarmente en la comunidad salesiana acogedora y abierta ante todo a los jovenes (efr Proyecto educativo y pastoral salesiano).

- EI contacto personal, ante to do como direccion , espiritual esmerada y, al mismo tiempo a nivel general de conyivencia 25.«No hay vocacion que llegue a madurar si no hay un sacerdote que la ayude» (Pablo VI) 26.

- La animacion de grupos, el cuidado de asociaciones y movimientos juveniles salesianos, como lugares indispensables de una experiencia comunitaria y de una busqueda vocacional27.

- La formacion espiritual, puesta en el centro de todo el desarrollo de la persona, con un cuidado particular por la formacion a la ora cion personal, a la participacion liturgica y sacramental, a la devocion mariana.

- La experiencia vivida en elave cristiano-apostolica de la responsabilidad eelesial (catequesis, animadores); el conocimiento e interes por los proble-

25 Cfr Cost. 12. 26 Del discurso de

ACGE 692.

mas y necesidades de la Iglesia y del mundo, sobre todo el mundo juvenil28.

- La posibilidad de un conocimiento experimental del carisma de la accion salesiana: a nivel de vida, en todos los momentos del desarrollo; a un nivel mas reflexivo y sistematico, en los momentos mas adelantados de la evolucion vocacional. Preparense «subsidios» formativos a este fin, presentando la vida de Don Bosco, las biografias de jovenes que el escribio, vidas de misioneros y salesianos eminen tes, etc...

b) Algunos «momentos» de «concentracion» espiritual, necesarios para mantener vivo el «sentido vocacionah en el desarrollo de la persona.

Nuestra accion de «acompafiamiento» debe ser constante, pero diversificada y a ritmo con la experiencia interior del desarrollo vocacional del joven. Este pasa de una fase inicial de disponibilidad y de pre-busqueda a otra en que, descartadas varias hipotesis de proyecto vital, se concentra en una de ellas y trata de verificarla.

En este «continuum» son indispensables para una reflexion seria algunos momentos de intensidad particular:

- Ejercicios espirituales, programados para la bllsqueda de la voluntad de Dios en la propia vida.

- Encuentros de oradon y reflexion, sobre todo para una iniciacion en la liturgia y en la meditacion.

- Reuniones «proyedo de vida» como ayuda especifica para la verificacion de las distintas hipotesis de vocacion cristiana.

- Campos de orientacion (de bllsqueda, de propuesta, ec.) bajo divers as formas.

- Momentos de contacto con la comunidad salesiana (que habra que promover especialmente para jovenes ya maduros) en la oracion, en el trabajo apostolico, en la mesa, etc...

c) Algunos «lugares)} y ambientes de nuestra accion vocacional.

28 Cfr EN 72.

- Nuestras obras son el ambiente privilegiado para esta accion orientadora, que representa un derecho de parte de los jovenes a nosotros confiados en las escuelas, los oratorios, las parroquias, los centros y grupos juveniles, etc. Desarrollar en estas obras tal accion orientadora es un deber y un empefio que nos imp one nuestra mision.

- Se debe cuidar la accion animadora vocacional tambien fuera de nuestros ambientes, con tal de que sea verdaderamente obra de orientacion educativa, superando el simple contacto ocasional. Las vocaciones nacen de la comunidad cristiana que debe ser ayudada a tomar conciencia de ser Iglesia.

Para los jovenes en los que hemos notado una mayor sensibilidad, disponibilidad y riqueza espiritual, es imprescindible un cuidado especial y particular29.

- La forma metodologica «aspirantado» (que hoy I viene convenientemente distinguida en dos fases, la de orientacion y busqueda generica, y otra mas claramente centrada en la hipotesis de vocacion salesiana) se revela siempre valida e indispensable en ciertas situaciones.

Pero es necesario que, el aspirantado mas que cualquier otra institucion juvenil, sea un verdadero ambiente salesiano en el que la inspiracion educativa de Don Bosco sea vivida en pleniLud; que tenga objetivos y proyecto educativo bien claros y revisados periodicamente; que cuente con un personal que de a los jovenes el testimonio de una vida salesiana autentica 3°.

Para una reflexion sobre la naturaleza los fines y el planteamiento del aspirantado, hay que atenerse al documento del Dicasterio de la Pastoral Juvenil: «Guida educativa delle vocazioni» (1975).

El oportuno cui dado de estos jovenes puede ha- I cerse tambien de otras maneras: comunidades de referencia vocacional, clubs vocacionales, incorpora-

29 Cfr at 3; RFIS 11. 13; Canst. 12; Reg. 73; SDV 14.

30 Cfr ACS, n. 273, pp. 40ss; 28-29; RFIS 12-17.

cion de los muchachos a alguna de nuestras comunidades, encuentros periodicos locales 0 de zona, etcetera. Lo importante es que se asegure y guie de veras el proceso de maduracion vocacional, de reflexion, de revision 31.

Hoy mas que nunca se hace necesario pensar, siguiendo el ejemplo de Don Bosco, en ambientes en que pueda cultivarse la vocacion de aquellos que se sienten llamados al sacerdocio 0 a la vida religiosa en edad mas avanzada (trabajadores, universitarios, gente de carrera, etc...) 32.

EI aspirantado y las otras formas no se excluyen mutuamente. Cada Inspectoria pondere cuaI 0 cuales modos son mas adecuados a su situacion y haga esa comprobacion. Pero tengase en cuenta 10 que es responsabilidad de la comunidad inspectorial y no debe ser dejado al arbitrio de decisiones de individuos 0 comunidades particulares.

- En todos los ambientes arriba indicados es fundamental el interesar alas familias de los j6venes en esta obra de orientacion cristiana para la vida, y hay que trabajar en estrecha colaboracion con elIas, para crear un ambiente favorable al desarrollo de vocaciones.

- Un papel particular como lugar de orientacion vocacional 10 deben ejercer nuestras casas de ejercicios 0 casas de oraci6n. No sean solamente sitios don de se da hospitalidad a grupos que vienen a rezar, sino que, a ser posible, tengan un equipo que lleve a cabo una accion sistematica de orientacion espirituaI.

2.5 ORIENTACIONES OPERATIVAS

a) Las Inspectorias preparen cuanto antes sea po sible un de tall ado plan en estrecho contacto con la Iglesia local y en armonia con su respectivo plan vocacional elaborado por ellas. Pun to esencial de

31 Cfr OT 3; RFIS 18; ASC, n. 273, p. 46.

32 Cfr Canst. (1966) 6; RFIS 19; OT 3; ACGE 692 b.

ese plan ha de ser la sensibilizacion y formacion de los hermanos para la animacion vocacional. Envien I al Dicasterio de la Pastoral Juvenil tal proyecto, para que pueda realizarse entre todas las Inspectorias un interesante intercambio de experiencias.

b) A nivel de Conferencias Inspectoriales 0 Grupos de Inspectorias, cuidese la preparacion incluso con «subsidios)} apropiados, de los hermanos encargados de la ensefianza religiosa; prepareseles para hacer eficazmente presente en la catequesis la necesaria dimension vocacional.

c) Dentro de este sexenio programense en las I Inspectorias que tienen esa posibilidad, algunas ini. ciativas concretas de servicio vocacional en favor de las Iglesias locales 33.

d) El Dicasterio de la Pastoral Juvenil, para facilitar 10 dispuesto en el art. 72 de 105 Reglamentos y la Orientacion Operativa n. 1, prepare y envie a las Inspectorias las lineas esenciales para la redac- , cion de un plan inspectorial de pastoral vocacional.






" Cfr Canst. 12.

CUARTA PARTE

ALGUNOS AMBIENTES Y CAMINOS DE EVANGELIZACION

Premisa

La reflexion del CG21 sobre EVANGELIZACION, TESTIMONIO y ANUNCIO, en la perspectiva de una revision operativa de 10 que se ha hecho y de 10 que aun queda por hacer para llevar a cabo el CGE, se dirige ahora a actividades y estructuras pastorales concretas.

Estas constituyen los instrumentos y ambientes en que se encarnan los proyectos de evangelizacion y se expresa, en la diversidad de situaciones, la dimension evangelizadora de la mision salesiana.

Conviene recordar la novedad introducida por el CGE al respecto. El mismo ha hecho un claro llamamiento a preocuparse, sobre todo, de las personas 1 y de la orientacion pastoral en la intervencion educativa 2, y a entender las actividades y las mismas estructuras como medio para llegar a nuestros destinatarios y ayudarles a asumir su compromiso de promocion integral.

Sigue siendo actual la afirmacion del CGE: «En realidad no siempre se ha conseguido satisfacto. riamente esta finalidad global, y esto por causas diversas. Para superarlas, es necesario que nos convenzamos pnicticamente de que cualquier actividad nuestra, comunitaria 0 personal. se justifica solo cuando esta dirigida, organizada y llevada a cabo con vistas a la evangelizacion de los jovenes.» 3

Por 10 tanto, el CG21 considera atentamente algunos ambientes, no para repetir la rica doctrina presentada por el CGE, sino para examinar los pro-

1 Cfr Const. 26. ,

Cfr Const. 27. .

ACGE 344.

b1emas surgidos en el llltimo sexenio y para bus car una respuesta, un camino, un impulso renovador.

Can relación a atras ambientes que presentan modalidades divers as en cada regi6n y que operan una promoción humana y al mismo tiempo una evangelización (pensamos, pOl' ejemplo, en las Residencias para internos, para estudiantes, trabajadores, universitarios, etc.), el CG21 confirma las indica. ciones del CGE e invita alas hermanos comprometidos en estas actividades, que presentan hay dificultades y problemas nuevas, a orientar sus intervenciones educativas y pastorales para una evangelización segun el estilo de Don Bosco, como se recuerda en este documento-

1. EL ORATORIO Y EL CENTRO JUVENIL, ~MBIENTES DE EVANGELIZACION

El Oratorio, como «obra primera y tipica» de la , Congregación, ha sido estudiado y propuesto repetidamente por 10s Capitulos Generales 1 y por otros documentos autorizados de la Congregación. De modo particular los Capitulos Generales 19 y 20 han reflexionado sobre las condiciones externas e internas que hoy influyen en la eficacia pastoral de los oratorios, y han anima do alas salesianos a un «relanzamiento» de los mismos mediante la renovación de 10s ya existentes y la creación de otros nuevos, incluso sacrificando presencias de otro tipo.

Al revisar la acción evangelizadora de estas presencias, y acogiendo los datos nuevas aportados por 10s seis ultimos anos de experiencia, el CG21 propone algunas orientaciones para una metodologia mas adecuada a su función de evangelización y ere. cimiento de la fe en los j6venes.

1 ACGE 192-272; 376-379 y referencias alli indicadas.

1.1 La realidad, los «nombres», el proyecto pastoral

Como toda obra encarnada en la vida y en la realidad, tambien el Oratorio cambia, se adapta y asume formas nuevas.

Una rapida mirada a la realidad pastoral de la Congregación pone de manifiesto que con los terminos "Oratorio» y "Centro Juvenil» se indican realidades diferentes, segun las divers as regiones: realidades que derivan de la misma intuición pedag6gica y del mismo espiritu, pero que se diferencian en la opción de destinatarios, objetivos inmediatos y metodologia.

COli todo, los dos terminos estan sin precisar aun en tt:xtvs constitucionales 2, dando lugar a ambigiledades con peligro de que, al hablar de una actividad pastoral tan variada y elastica, las cosas que se escriben 0 se dicen se presten a interpretaciones opuestas, ligadas mas a la experiencia personal que a criterios objetivos.

No todo 10 que se ha dicho del "Centro Juvenil» es aplicable a cualquier "Oratorio», en cuanto a destinatarios, relación grupo-masa, metodologia pedag6gica que deba emplearse, etc. La acción salesiana en este campo tiene gran variedad de nombres y la estructura «Oratorio», «Centro Juvenil», no puede actuarse de igual manera en todas las regiones.

En el intento de c1arificar y hacer posible un dialogo e intercambio de experiencias, aqui entendemos:

- por ORATORIO un ambiente destinado a los muchachos, abierto prevalentemente a la masa, y con objetivos y metodos apropiados;

- por CENTRO JUVENIL un ambiente des tinado a los j6venes, atento a su exigencias, donde prevalece la relación de grupo, se favorecen mas los contact os personales, y el compromi-

2 Canst. 28; Re~ 5. 7. 24.

so humano y cristiano adquiere un peso decisiva sobre otras actividades (deportivas, reo creativas, etc.);

- por ORATORIO-CENTRO JUVENIL un ambiente complejo que tiene como destinatarios a muchachos y jovenes, y don de la metodo. logia y las orientaciones se aplican en forma diferenciada, segun las edades de los destinatarios.

1.2 La situacion

El XX CGE ha indica do para el Oratorio y el Centro Juvenil esta finalidad: tiendan a la evangelizacion y catequesis de los muchachos y de los jovenes de una zona, sobre tbdo a traves de las activi. dades del tiempo libre organizadas con form as abier- I tas 2 bis. !

Este objetivo exige personal preparado y suficien- I 'te y, al mismo tiempo, la jerarquizacion de las I actividades, de modo que los fines no se vean comprometidos. No cabe duda que esta modalidad exige una constante adaptacion en la organizacion y I en la seleccion de contenidos. La revision de estos ,anos indica que alIi donde se ha descuidado, por parte de los salesianos, el estar con los jovenes, se ha perdido tambien el ir a tiempo con los cambios, exigencias e intereses de los jovenes, y no se ha logrado una presencia eficaz en la zona.

AlIi donde ha disminuido la capacidad de ayudar a los jovenes a comprometerse en ideales cristianos, ha prevalecido la tendencia, ya fuerte a causa de los estimulos reales y ambientales, a compromisos simplemente deportivos y recreativos 0 sociales, pero sin una clara orientacion cristiana. I

Las limitaciones no provienen solo de las dispo- I siciones de las personas. Hoy el acercamiento a los jovenes se ha hecho dificil por las numerosas po-

'bis Cfr ACGE 376.

sibilidades de tiempo libre que los arrastran a diversas instituciones y ambientes. Y, por parte nuestra, quiza no ha habido, en un momento de contraccion numerica, una decidida opcion pastoral para destinar el personal necesario a esta presencia tan especificamente salesiana. A esto hay que afiadir la crisis del asociacionismo catolico 3 y en muchas inspectorias la carencia de una planificacion eficiente 4.

A pesar de estas limitaciones, alli donde los Oratorios y Centros Juveniles han reforzado 0 recuperado su caracter «integral»; donde han hecho opciones operativas respecto a la «masa», los grupos y las personas, ofreciendo posibilidades precis as en orden a la formacion de los jovenes; donde han tenido la franqueza de presentar la explicita propuesta del Evangelio con un program a de educacion de la fe, con actividades de ora cion y de intensa vida sacramental, alli las caracteristicas pastorales salesianas han aparecido con especial e insolita claridad y el Evangelio se ha hecho presente en la zona.

1.3 iUn ambiente, un programa, un estilo!

Las caracteristicas fundamentales que definen estos ambientes pastorales, y los unen estrechamente a la intuicion original de Don Bosco, son: la relacion personal «de amistad» del salesiano con el muchacho, y la «presencia» fraterna del educador entre los muchachos; la creacion de un ambiente que facilita el encuentro; la posibilidad de diversas actividades de tiempo libre; el sentido misionero de las «puertas abiertas» a todos los muchachos que quieren entrar; la apertura a la «masa», pero con atencion a la persona y al grupo; la formacion progresiva de toda la comunidad juvenil mediante la pedagogia de la fiesta, la catequesis ocasional y

3 RRM 203. , RRM 201.

tambien sistematica, el compromiso de solidaridad, la vida de grupo..., a fin de llevar a la formación de una fuerte personalidad humana y cristiana.

Algunas de estas caracteristicas, como la apertura a la masa y las actividades variadas de tiempo libre, deportivas, turisticas, etc., exigen de los educadores especial atención para que no prevalezcan estas en perjuicio de los mismos j6venes que participen en ellas.

1.4 La presencia de las muchachas

La revisión ha puesto de manifiesto tambien en algunas regiones una notable presencia de muchachas en nuestros Oratorios y Centros Juveniles s. El hecho tiene rakes culturales y sociol6gicas que no hay que olvidar.

En algunos casos, tambien han surgido, a este respecto, opciones pedag6gicas no claras, falta de ,entendimiento con la pastoral de las Iglesias loca. les, escaso diaIogo con operadores pastorales 0 institutos religiosos con tradiciones educativas propias, que trabajan en la misma zona.

El concepto de Oratorio mixto esta fuera de la perspectiva de nuestros textos capitulares y documentos legislativos 6, bien por la edad de quienes 10 frecuentan, bien por la apertura a la masa, que no permite una presencia mixta indiscriminada, sino que exige normalmente diversificación y separación.

En cuanto al Centro luvenil, dicen los Reglamentos 1 y el CGE 8: «el contexto sociol6gico y la necesidad de una educación integral nos aconsejan, en determinados lugares y circunstancias, la aceptación de grupos y actividades mixtas, con todas las reservas y responsabilidades que de ello se de-

. Dati Statistici delle Opere della Gongr., Roma, 1977, p. 54, ademas RRM 171b; 172b; 197.

. Cfr ACGE 21d; Reg 7.

f Reg 7.

. Cfr ACGE 51. 355. 356. 378.

rivan» 9. Es esta una «respuesta a una exigencia pedag6gica que impone tomar en su totalidad al joven, inmerso en su mundo, a fin de intentar su promoción integral» 10.

Y, ademas, precisa el CGE: «Las actividades de los grupos mixtos verdaderamente educativos, deben tender a desarrollar los intereses formativos y sociales» 11. «Hay que tener en cuenta tanto la madurez y la preparación de los hermanos, como la colaboración de laicos especializados, y el disponer de locales id6neos para este tipo de actividad.. .» 12.

Estas directrices conservan todo su valor 13y en particular hay que tener presente que se requiere la confrontación 0 la relación con la comunidad, con la Iglesia local y con las normas inspectoriales 14.

1.5 Lineas de orientación

1.5.1 A la confirmada validez del Oratorio y del Centro Juvenil deben corresponder opciones proporcionales para asegurar a tal obra el personal necesario, preparado, unido a la comunidad que 10 sostiene con adecuados ambientes y medios, y asegura una relativa estabilidad para que el encargado pueda animar la corresponsabilidad de los j6venes y de los adultos en la acción pastoral y en la organización de los distintos cometidos. Todo esto hara superar el estado de perpetua «emergencia », que obliga a volver siempre a comenzar desde cero en el planteamiento de la acción catequistica y educativa.

Sobre to do se siente necesidad de «animadores» salesianos capaces de proponer a los j6venes com-

9 ACGE 355.

10 ACGE 355.

11 ACGE 355.

12 ACGE 355.

13 Cfr tambien la indica cion dada al CG21 en la carta del

Card. Villot, en pag. ......

1< ACGE 356.

promisos fuertes. Se corre el riesgo de que el Oratorio y el Centro Juvenil, nacidos con fines de promocion y de evangelizacion, no abran a los jovenes horizontes cristianos por falta de estimulos profundos de fe.

1.5.2 Hay que prever la programacion y la revision periodica, a nivel inspectorial, de la accion pastoral desarrollada en el Oratorio y en el Centro Juvenil, y especial mente con relacion al proyecto educativo, la catequesis sistematica y las orientaciones de la Iglesia local.

1.5.3 El Centro Juvenil, para ser propuesta y ambiente de promocion integral cristiana para los j6- venes, deb era proceder a opciones metodologicas precisas, como son:

- la organizacion en grupos, prefiriendo los de canicter formativo y apostolico y desarrollando en ellos una educacion explicita a la fe;

- la formaci on de la comunidad educativa, con la participacion activa y responsable de los jovenes, de los colaboradores seglares, especialmente los padres, y de los salesianos en la parte de animadores;

- la jerarquizacion, en las diversas actividades para responder alas exigencias de la espontaneidad, a los intereses de la creatividad y alas necesidades del «tiempo libre» de los jovenes; y para comprometerles en actividades apostolicas y sociales en el ambiente y en la zona, inspiradas en el ideal cristiano;

- un verdadero esfuerzo en sus opciones para abrirse con un espiritu misionero y de dialogo a todos los jovenes, sobre todo a los alejados.

1.5.4 Pero el motor de todo este trabajo es «el salesiano».

El Salesiano en el Oratorio y en el Centro Juvenil es el buen pastor, el evangelizador de los jovenes; no se pertenece a si mismo; es para ellos, esta con ellos, es el signa del amor de Dios en medio de ellos.

1.6 ORIENTACIONES OPERATIVAS

a) Cada comunidad mantenga su insercion en la zona y en la Iglesia local conservando, potenciando y promoviendo formas tambien nuevas de Oratorio y Centro Juvenil como expresión tipicamente salesiana de promoción humana y de evangelización.

Las parroquias salesianas considerenlos como su elemento caracterizante, plenamente insertos en la propia pastoral.

b) Cada Oratorio y Centro Juvenil estudie y prepare su propio proyecto educativo interesando a todos los corresponsables de su animación, y partiendo de un atento amllisis de la situación local; ello este en sintonia con el proyecto educativo de la comunidad inspectorial.

c) En los Centros Juveniles hay que atenerse a las normas establecidas por el CGE yaqui confirmadas (ver n. 125) para los grupos y actividades mixtos. Los responsables y las comunidades sigan dichas actividades, valoren sus resultados, y, donde sea necesario, el Consejo inspectorial de ulteriores indicaciones al respecto.

2. LA ESCUELA COMO AMBIENTE DE EVANGELIZACION

La evangelización en la escuela y mediante la escuela, ademas de la reflexi6n sobre los puntos concernientes al hecho escolar y catequistico, implica la profundizacion de problemas eclesiales y culturales como la relación entre evangelización y cultura, entre cultura y sociedad, entre sociedad y escuela. Para nosotros los salesianos, implica tam. bien una renovada atencion alas caracteristicas de nuestra presencia en el ambiente escolar.

El CG21 no pretende detenerse en un analisis y estudio de estos interrogantes, sino reflexionar so.

bre ellos para llegar a sugerencias y propuestas concretas. Una respuesta iluminada a estos problemas ayudara a proyectar mejor la praxis 1.

2.1 La situacion

En varias de nuestras escuelas se han hecho, durante el sexenio precedente,experiencias positivas, y se ha visto un esfuerzo importante por plantear la accion pastoral de modo que responda alas caracteristicas de la escuela y de los jovenes de hoy. Muchos salesianos se han comprometido en esta renovacion, y en bastantes comunidades educativas se ha verificado un movimiento positivo de participacion y de interes que ha visto a padres, maestros seglares y jovenes, comprometidos en una colaboración mas estrecha. La escuela salesiana se presenta como una respuesta educativa valida, buscada por muchas familias, y en no pocas partes aparece como un centro de promo cion social con capacidad de unir la entera comunidad del barrio para objetivos comunes.

Por otra parte, nuevas presiones gravan sobre la escuela: la creciente complejidad organizativa, la dependencia de un sistema a veces objetivamente cerrado a la penetracion evangelica, la disminucion de salesianos dispuestos a trabajar en ella, el empIeo de salesianos en gestiones de administracion y organizacion, el aumento del mimero de alumnos, la exigencia de escuelas mixtas, el mimero creciente de seglares con escaso conocimiento del Sistema Preventivo, la insuficiente relacion entre cultura y evangelizacion, la dificultad creada por el cambio de mentalidad y por el pluralismo, han colocado a los hermanos en estado de replanteamiento y, en no pocos casos, de perplejidad.

Pi ens an algunos que el ambiente escolar pres enta al Salesiano escasas posibilidades de evangeli-

1 Gfr EC 2, 12-15, 24-31.

zación, tanto porque en muchos contextos sociales, dominados por leyes civiles desfavorables, no se llega a los destinatarios prioritarios, los jovenes pobres, como porque la figura pastoral del salesiano, y en particular del sacerdote, queda oscurecida por fuertes condicionamientos de tipo disciplinar y escolar, y porque algunos de los jovenes que frecuentan nuestras escuelas se muestran poco disponibles al mensaje y al compromiso evangelico.

2.2. La Congregación reafirma la validez de sn presencia en la escuela

El CG21 reconoce que la raiz del problema se ha de bus car en los profundos y nipidos cambios que vive toda la sociedad contemporimea, 10 cual exige, en quien trabaja en la escuela, una «refundacion» de la misma, de modo que resulte factor de cambio en la misma sociedad. Asi mismo es consciente de que no se pueden dar indicaciones demasiado particulares, siendo las condiciones y las posibilidades pastorales de la escuela distintas en los divers os contextos culturales 2, y, por tanto, divers as tambien las posibilidades de evangelizacion.

Pero, reconocida la pluralidad de situaciones, en la linea de la tradicion salesiana confirmada nuevamente por el XX CGE y a la luz de la reciente dec1aracion de la Sagrada Congregacion para la Educacion Catolica, e1 CG21 considera la escuela como ambiente abierto y valido.

Conviene eliminar un prejuicio difundido en muchos ambientes, inc1uso de Iglesia local; la escuela catolica no tiene solo funcion de suplencia, no se debe abandonar cuando otras instituciones pretendan suplantarla 3. «La Iglesia reconoce en ella un medio privilegiado para la formacion integral del hombre», y «un centro don de se elabora y se trasmite una concepcion espedfica del mundo, del horn.

. lb. 2. . lb. 20.

bre y de la historia» 4; en el orden de la evangeIizacion tiene su eficacia especifica que la distingue de otras «vias», tiende a una asimilacion sistematica y critica de la cultura dentro de una vision cristiana de la realidad 5, se convierte en elemento de trasformacion de la sociedad y en fuerza de Ii. beracion total de la persona. «La educacion integral comprende imprescindiblemente la dimension reli. giosa, la cual contribuye eficazmente al desarrollo de otros aspectos de la personalidad en la medida en que se la integre en la educacion general» 6.

La escuela ofrece posibilidad de encuentro y de relacion personal con muchos jovenes; da la opor. tunidad de formar con ellos comunidades en que el compromiso cultural es iluminado y empapado por la fe; la accion pastoral aIcanza tambien a los padres y demas colaboradores encarnando el mensaje en un proyecto temporal de promocion de la persona. Por ultimo, permite afirmar con los hechos el derecho a proyectos alternativos de educacion, en sociedades en las cuales, la hegemonia cultural 0 el monopolio educativo, limitan los derechos de la familia respecto a la educacion de los hijos 7.

Por ello, el CG21 exhorta a aquellos hermanos que estan comprometidos en el servicio de los jovenes en las escuelas, intern ados y residencias, a perseverar en este trabajo.

Esta palabra qui ere llegar tambien a cuantos, por una mision recibida, colaboran en un proyecto de educacion y de evangelizacion en estructuras escolares no salesianas.

2.3 Especificidad de la presencia salesiana en la escuela

EI estilo pastoral de Don Bosco y su sistema edu- cativo han dado una caracteristica propia alas escuelas por el fundadas y a las que la Congregación

, lb. 8.

0 lb. 38-43.

. lb. 19.

1 lb. 8.

ha ofrecido hasta ahora a los jovenes. La fisonomía de la escuela salesiana se caracteriza por los des. tinatarios, por la relacion educativa inspirada en la familiaridad y en la confianza, por el clima 0 ambiente de serenidad que crea, por la apertura social que la hace centro de cohesion de un barrio, y, sobre todo, por los objetivos en los que el ideal cristiano de santidad se funde, en inseparable uni. dad, con el desarrollo humano y social del indi. viduo y de la comunidad. Estas caracterfsticas han hecho actuales y aceptadas las mas divers as formas de escuela en la historia salesiana: humanfsticas, profesionales, agrfcolas, nocturnas para adultos, etcetera.

En las nuevas situaciones sociales y escolares, este estilo debe continuar siendo el signa de la pre. sencia de Don Bosco entre los jovenes. La escuela salesiana quiere, por tanto, mantener hoy ciertas constantes que la caracterizan:

2.3.1 ESCUELA POPULAR, tanto por el ceto so. cial al que se dirige, como por el lugar en que se coloca, por los contactos que crea con el pueblo, por el tono y estilo que adopta, por las especiali. zaciones que toma, y especialmente porque sigue con amor a los mas olvidados.

2.3.2 ESCUELA LIBRE Y ABIERTA, porque la escuela salesiana ha nacido libre y tal quiere man. tenerse, aunque tenga que pedir ayuda a todos; por. que quiere ser afirmacion de los derechos de la familia y de la Iglesia, especialmente en las socie. dades donde estos son conculcados 0 limitados; por. que acoge a todos aquellos que estan dispuestos a emprender un camino de liberacion total; porque educa a valores universales de libertad y quiere ser escuela que arrastre para transformar el ambiente en que se halla.

2.3.3 ESCUELA QUE COLOCA AL JOVEN EN EL CENTRO DEL HECHO EDUCATIVO. Acoge al mu. chacho como es y en el punta en que se encuentra. Le ayuda a crecer, reconoce, mediante variadas y concretas propuestas educativas, su necesidad de

nutrirse, de jugar, de relacionarse, de hacerse responsable de las propias opciones. No se contenta, por tanto, con solo las horas de escuela, sino que alterna el estudio con actividades artisticas, recrea. tivas y culturales, religiosas, sociales...

2.3.4 ESCUELA QUE TIENDE A CREAR UNA COMUNIDAD JUVENIL, «una familia», segUn la expresion de Don Bosco, donde se favorecen y cuI. tivan las relaciones personales, la solidaridad y la amistad, se estimula la creatividad y se forma un ambiente de compromiso, de alegria y de confianza. De esta comunidad form an parte padres y educadores; en ella los jovenes encuentran espacio para GRUPOS organizados con finalidades forma. tivas y funcionales.

2.3.5 ESCUELA CARACTERIZADA POR LA PRESENCIA DE LOS MAESTROS EN MEDIO DE LOS ALUMNOS, y por la participacion de los educadores en los intereses juveniles. No solo ensefian, sino que «asisten», se divierten, trabajan, estudian y reo zan con los alumnos. Son personas disponibles para estar con los jovenes, capaces de cargar con sus problemas. «Maestros en la catedra y hermanos en el patio» (Don Bosco).

2.3.6 ESCUELA DE TRABAJO porque ensefia a vivir la caracteristica espiritualidad del trabajo, mantiene habitual y cordial relacion con ese mundo del trabajo; pero, sobre todo, porque en muchos sitios realiza cursos de alfabetizacion y clases nocturnas para obreros; prepara a los jovenes aprendices a entrar en el mundo del trabajo cualifican. dolos con la formaci on profesional.

2.3.7 ESCUELA EVANGELIZADA Y EVANGELIZADORA, donde el desarrollo personal es seguido I con respeto, la dimension religiosa ocupa su justa I lugar y el muchacho puede con alegria encontrar aDios, conocer y amar a Jesucristo, y recorrer el camino de la fe hasta la santidad.

2.3.8 ESCUELA QUE SE PROPONE UNA ATEN. CION VOCACIONAL PARTICULAR, haciendo crecer

a cada uno segun el proyecto de Dios, ayudando a madurar los germenes de vocaciones laicales, religiosas y sacerdotales que Dios siembra en tantos j6venes.

La escuela salesiana resulta un ambiente de evangelización en la medida en que logra actualizar estas caracteristicas.

2.4 Algunas lineas de acción

EI XX CGE8 ha sefialado criterios y opciones que . son aun validos y que este Capitulo reafirma y recomienda.

La rica experiencia de estos seis años en divers os contextos, y el estudio de la situación escolar presente, nos sugieren las siguientes lineas de trabajo en las cuales se invita a comprometerse a cada escuela y alas inspectorias:

- Formar la comunidad educativa con la participación de los salesianos como anima dores, los colaboradores laicos, los padres y los alumnos. Las modalidades, niveles y formas de participación dependen de las situaciones. Tocara a los salesianos guiar el proceso de modo que esa comunidad sea evangelizada y evangelizadora;

- concertar y crear una «formación permanente » y cristiana con los seglares que trabajan en cada escuela;

- elaborar y actuar con toda la comunidad educativa el proyecto educativo explicitamente inspirado en el Evangelio y en las ensefianzas de Don Bosco;

- personalizar las relaciones educativas conforme al Sistema Preventivo. Para ello es muy uti! el servicio de consulta pedag6gica, los contactos <dnformales» de los educadores, la didactic a individualizada, las actividades de grupo, etc.;

8 Cfr ACGE 381-385.

- Programar un plan de educacion explicita a la fe, rico de propuestas, ofrecido a los jovenes en clima de libertad y segun una sana pedagogia: catequesis, celebraciones liturgicas juveniles, iniciacion y vida sacramental, grupos de reflexion y de compromiso, retiros espirituales, apertura a iniciativas apostolicas;

- participar activamente como educadores, tanto salesianos como seglares, en el dialogo y confrontacion educativa en curso en toda sociedad por medio de proyectos alternativos de educacion, y colaborar con todos aquellos que luchan pacificamente por una escuela libre e «igual» ante las leyes;

- enrolar nuestras escuelas en la pastoral de la Iglesia local, asumiendo los criterios pastorales que ella propone, participando en los organismos que la animan, apoyando las organizaciones que sostienen la libertad de la escuela;

- dar neta preferencia en nuestra escuela a los jovenes necesitados y hacer cualquier esfuerzo para volver a colocarnos en los ambientes de particular pobreza.

2.5 Opciones para la actuación de las lineas de acción

Las lineas indicadas seran realidad solo si los salesianos, tanto a nivel local como inspectorial, planifican su accion con objetivos claros, constantemente revisados a fondo, y con permanente atencion al fin concreto de la educacion cristiana.

2.5.1 A nivel local es necesario comenzar por 10 que parece esencial: I

- El equipo de los salesianos siga ocupando en I la escuela y, donde sea po sible tambien en las de- I mas secciones, los puestos clave que les consientan ani mar cristianamente a la comunidad educativa.

- Los papeles espedficos de Director, Director tecnico y encargados pastorales sean mejor estudiados y definidos en cada Inspectoria, a fin de mantener una cierta homogeneidad que facilite los cambios.

- Cada escuela prepare un proyecto educativo que pueda servir como plataforma de consenso y de revision para educadores, padres y alumnos.

- Cada comunidad escolar programe anualmente actividades y encuentros que ayuden a superar el nivel burocnitico de las relaciones, y a crear «un ambiente comunitario impregnado del espiritu evangelico de libertad y de caridad».

2.5.2 A nivel inspectorial existen metas alas cuales hay que tender, si bien con programas a largo plaza.

- Preparar personas que trabajen en el area escolar. Se trata de una labor especializada con cometidos y posibilidades que exigen amplia formaci on cultural y conocimientos pastorales espedficos.

- Unir, a nivel inspectorial, a los colaboradores seglares de nuestras obras y a los padres de nuestros alumnos, para hacerlos mas corresponsables en la educacion. Haya en cada escuela un salesiano encargado de una mejor formaci on cristiana de los padres. El encargado de la escuela a nivel inspectorial asuma tambien la labor de promover las asociaciones de padres. Donde esta union se ha llevado a cabo, ha incrementa do el sentido de pertenencia, ha dado oportunidad de formacion profesional cristiana y ha esc1arecido entre los seglares la especificidad de la escuela salesiana.

- El servicio inspectorial para la escuela ayude alas distintas escuelas a formular el plan educativo, y estudie los programas pastorales para la formacion permanente de los colaboradores seglares.

- El CG21 recuerda a 10s Consejos Inspectoriales el articulo 12 de los Reglamentos y los exhort a a no conceder la apertura de nuestras escuelas a

las muchachas, si no es par graves razones. Las motivaciones de tal decision haganse llegar al Consejo Superior.

2.6 ORIENT ACIONES OPERATIVAS

134 a) Cada Inspectoria 0 Conferencia Inspectorial haga objeto de reflexion y de estudio el documento de la Santa Sede sabre la Escuela Catolica asi como los documentos de las Iglesias locales.

b) Con la ayuda y la reflexion de todas las comunidades, cada Inspectoria elabore un proyecto educativo sale siano para el sector escolar, en el cual puedan inspirarse las escuelas de la Inspectoria, y mantener y perfeccionar la propia identidad y la unidad entre nuestras escuelas.

c) El Dicasterio de la Pastoral Juvenil, mediante un programa de encuentros y de estudios, hag a conocer las mejores experiencias de la Congregacion en el campo escolar, para favorecer la iniciativa apostolica de los salesianos.

3. LA PARROQUIA: ASPECTOS PARTICULARES DE LA PRESENCIA SALESIANA EVANGELIZADORA

«Can el espiritu de caridad apost6lica de nuestro Fundador» 1, los salesianos evangelizan alas jovenes tambien con la accion en las parroquias, entendidas como ambientes y vias de evangelizacion, las cuales en el elenco de «nuestras actividades y obras» 2 ocupan un puesto preciso, bien trazado en el document a 5.° del CGE y sinteticamente recogido par el articulo 31 de las Constituciones.

1 Const. 31.

, Cfr cap. IV de las Constituciones.

Es indispensable la constante referencia a esta documentación del XX CGE, todavia actual.

Dos problemas principales se presentan en este sector: el del numero, y el de la salesianidad en las parroquias animadas por nuestros hermanos.

3.1. EI problema del niimero de las parroquias

El primer problema que se presenta en este earn. po es el crecimiento numerico de las parroquias 3. El Capitulo ha hecho una lectura del hecho mate. rial numerico, tanto como reflexi6n de examen, como para orientación operativa que en consecuen. cia habni que deducir.

Los salesianos son llamados a trabajar en ambientes diversos.

3 Reproducimos las estadisticas del "UFFICIO CENTRALE PARROCCHIE", de la Casa Generalicia:

A la muerte de Don Bosco (1888) las Parroquias eran 7; durante el rectorado de Don Rua (1888.1910) se anadieron otras 31; durante el de don Albera (1910.1922) tuvieron un aumento de 33; el periodo de don Rinaldi (1922-1931) registro un crecimiento de 54; en los anos 1932.1938, CGI5, e] aumento fue de 40; del 15 al 16 CG (1947) el crecimiento fue de 99; hasta el ano 1952, 17 CG, el aumento fue de 100; en el CG18 (1958) el aumento es de 75; del 18 al 19 CG (1965) hubo un aumento de 152; desde el CG 19 hasta e] CGE (1971) el crecimiento fue de 150; desde el CGE al CG21 (1977) el aumento fue de 141.

La sum a total alcanzada es de 882 parroquias.

A esta lista hay que anadir otras cifras, como, por ejemplo, el nlimero de las parroquias misioneras (65), un numero de parroquias "inciertas" (41); y ademas el numero de parrc. quias regentadas a titulo personal (87), 0 confiadas "ad tempus" (18).

Sera oportuno conocer que solo Polonia cuenta con 125 parroquias, y que otras 136 estan situadas en la Europa Central: son mas que evidentes las motivaciones vinculadas a la situacion socio-politica particular.

Una ultima observacion tomada de una ficha del "UFFI. CIO CENTRALE PARROCCHIE": "Conviene recordar que el concepto de Parroquia no es analogo en todas partes". Siguen algunos ejemplos referentes a Europa, India y territorios de mision.

Esto, quiza, justifica el numero total, que parece excesivo, de parroquias salesian as.

En las Misiones la parroquia representa un pun. to de llegada, porque, aunque la Congregacion esta presente con obras mas especializadas en favor de los jovenes (Oratorio, Escuela profesional...), es evidente que el fin de la accion misionera, expresa. do tambien en las Constituciones, es la «fundación de la Iglesia en un grupo humano».

Por otra parte, se da el caso de hallarse en paises totalmente desprovistos de clero, donde la descristianizacion es tan progresiva que no se explica el empleo de salesianos, sobre todo sacerdotes, para un grupo particular como sedan los jovenes, sin que se interesen de la vida cristiana de la gente entre la cual viven, asumiendo su cuidado pastoral y misionero: porque tambien esta es, en cierto sentido, zona y tierra de mision 3bis.

En algunas naciones, por particulares situaciones concretas, ajenas a nosotros, la (mica forma de accion pastoral posible es la parroquia. Hay que mirar con realismo tal situacion, porque a traves de la parroquia se quiere dar vida a otras actividades salesianas y hacer de ella un centro al servicio de la zona, comprometiendo a toda la comunidad salesiana en su funcion de animacion.

En ambientes pastoralmente bien organizados y activos solo la aceptacion de una parroquia puede favorecer el nacimiento de un oratorio-centro juvenil. Por ultimo, se mira con interes a la Parroquia, porque permite llegar a algunos jovenes en su am. biente natural, alIi don de viven, y seguirles a 10 largo de su desarrollo; ofrece mas facil posibilidad de interesar, para su educacion, a los padres y adultos que les rodean; favorece la insercion natural en la Iglesia local y en el territorio; permite un contacto pastoral mas directo que en otras actividades apostolicas.

El CGE, teniendo presente una situacion ya consolidada y ahondando el significado del compro-

. bis Cfr CD 35.

miso salesiano en la Parroquia, ha eliminado la I excepcionalidad del trabajo parroquial; pero, al mismo tiempo, ha subrayado la priori dad que se ha de respetar en toda iniciativa y en toda Inspectoria: «El primer lugar de nuestro empeño corresponde al apostolado directamente juvenil» 4.

En el pIano operativo no puede olvidarse esta clara orientacion indicada por el CGE.

Hoy el CG2l se interroga de nuevo. Se situa frente a tantos hermanos comprometidos en la actividad pastoral parroquialS, que sienten la necesidad de una clarificacion acerca de la autenticidad salesiana de su accion apostolica; se pone frente a las peticiones que las Iglesias locales y las circunstancias dirigen y diriginin, aun mas en un proximo futuro, a la Congregacion.

Antes de asumir nuevos compromisos en el sector parroquial, es preciso determinar los criterios de aceptacion a los cuales habran de atenerse las comunidades inspectoriales.

El CGE expresa tales criterios bajo la forma de «caracteristicas» salesianas que la parroquia debe en concreto asegurar.

3.2 El problema de la salesianidad en las Parroqnias

El CG21, en fase de evaluacion, y a peticion de algunos hermanos y Capitulos Inspectoriales, teniendo en cuenta la Relacion del Rector Mayor 6, quiere esclarecer que cosa sup one ACTUAR CON ESTILO SALESIANO, en la pastoral parroquial; se refiere, por tanto, al conjunto de actitudes y opciones que manifiestan una autentica presencia «salesiana», que

. ACGE 402.

5 Los hermanos que trabajan con dedicacion completa en la pastoral parroquial en 1977 son 2.199; con dedicacion parcial son unos 1.400. Es dificil en este particular definir exactamente que comporta la expresion "dedicacion parcial": (Cfr SARTI, Dati Stat., pp. 73-74).

6 RRM, nil. 171, 214-219.

realizan 10 «especifico» salesiano, la identidad salesiana.

El CGE habia indicado una linea de respuesta: vivimos el ministerio parroquial «como verdadero I apostolado salesiano, en la medida en que nos permite permanecer fieles a nuestra mision, y actualizar el carisma del Fundador al servicio de los I jovenes y de la clase popular» 7.

El CG21 reafirma algunos rasgos caracteristicos I de este espiritu:

3.2.1 La parroquia salesiana TIENE COMO RES- I PONSABLE Y ANIMADORA A LA COMUNIDAD RELIGIOSA. El proyecto apostolico se realiza en I comun. Toda la comunidad salesiana es signa y portadora de la mision: «La mision esta confiada, en primer lugar, a la comunidad» 8. I

«La primera caracteristica de una parroquia salesiana es estar dirigida por una comunidad reli- I giosa que quiere vivir, dentro de la Iglesia, su mision especifica. Es decir, nos distinguimos por 10 que somos»9. I

Esto supone una vida religiosa que con sus rit. mos de oracion 10,con la vida de comunion fraterna, con el compartir responsablemente las incumbencias apostolicas en el territorio, sea verdaderamente en la zona «signo y testimonio de los valores espirituales vinculados a los consejos evangelicos» 11y al espiritu de las Bienaventuranzas.

Del espiritu comunitario deriva una vision de servicio organico unitario y corresponsable de la evan-

7 ACGE 400.

8 Const. 34.

. ACGE 406.

,. En el primer Reglamento para las Parroquias, contenido en las decisiones del Tercero-Cuarto Capitulo General y presentado por Don Bosco en 1887, se lee, por ejemplo: "Ponga el Parroco sumo esmero en £ljar el tiempo mas oportuno para la meditacion diaria y la lectura espiritual, procurando tomar parte en ella regularmente con sus coadjutores. Si es posible, haganla en la iglesia, para edi£lcacion de los feligreses". (S. G. Bosco, Opere edite, vol. XXXVI, p. 259).

11 ACGE 407.

gelizacion, y el estilo salesiano de trabajo apostolico y de relaciones pastorales que privilegia el construirse de la parroquia como «comunidad» y «familia de Dios» 12; se deriva, asi mismo, la programacion, por parte de la comunidad parroquial, de las actividades y de la opcion de intervenciones que mejor pueden responder alas necesidades locales. Cada salesiano se siente comprometido en un testimonio que es a un tiempo personal y comunitario.

3.2.2 La parroquia saiesiana REALIZA LA OPCION PRIORITARIA POR LOS MUCHACHOS Y LOS JOVENES, especialmente los mas pobres. Teniendo presente una comunidad completa, compuesta de adultos y de jovenes interdependientes en su crecimiento humano y cristiano, se trata de privilegiar la mision salesiana, ante todo en relacion a los destinatarios, y, por consiguiente, en los servicios que hay que pres tar.

a) Can relación alas destinatarios, es actual tambh~n en la accion pastoral parroquial la indicacion de la orientacion operativa que el CGE asigna a la mision salesiana: «Prioridad absoluta a la pastoral juvenil quiere significar:

- por una parte, que la actividad y las obras a favor de la juventud ocuparan la mayor parte de nuestro tiempo, de nuestro esfuerzo y de nuestro personal;

- por otra, que las actividades y las obras a favor de los adultos, realizadas segun sus exigencias, conservaran despierta la preocupacion por los jovenes» 13.

Esto significa que el salesiano se interesa prioritariamente par Ios j6venes, sabre todo 10s mas pobres, y a traves de ellos llega a los padres.

Por otro lado, in teres a a los jovenes en las diversas actividades parroquiales, de forma que sean

12 Gfr AGGE 417-518.

\\3 AGGE 180.

estimulo para los adultos, a fin de que asuman con mayor interes su responsabilidad en orden a la comunidad parroquial, con preferencia hacia los jovenes mas pobres.

b) La parroquia salesiana construye la comuni. dad parroquial teniendo particularmente en cuenta a los jovenes. La pastoral de una Iglesia local tiene aspectos unitarios que hay que compartir, pero el carisma salesiano valoriza el mom en to ju. venil como momenta de renovacion, de crecimiento y de vitalidad de toda la comunidad parroquial

En la pastoral de conjunto de toda la diocesis, a la cual siempre hemos de hacer referencia y apoyar 14, ofrecemos nuestro servicio especifico y pro. ponemos nuestro humilde testimonio al inserir a los jovenes en la vida de la Iglesia local, creando para ellos mayor espacio de intervencion.

EI presente documento CG21 presenta en las pa. ginas precedentes una reflexion mas detallada sobre el Oratorio y Centro Juvenil, que profundiza ,un aspecto tan caracteristico de la accion salesiana en la Parroquia 15.

Aqui se vuelve a afirmar que el apostolado juvenil del Oratorio es, para nosotros, los salesianos, un «elemento necesario e insustituible» de nuestra presencia en una parroquia 16, y «el cuidado especial de la juventud y la catequesis» son «compromisos pastorales primarios» 17.

3.2.3 La parroquia salesiana evangeliza SEGUN EL ESTILO Y EL ESPIRITU DE NUESTRO PRO. YECTO EDUCATIVO Y PASTORAL.

Nuestra Congregacion fue en su origen «una sencilla leccion de Catecismo». La actividad evangeli. zadora y catequistica es la dimension fundamental de nuestra mision 18.Una pastoral de evangelizacion nos obliga a superar habitos y cansancios; nos

14 ACGE 416.

15 Cfr ACGE 432.

16 ACG XIX, p. 152.

17 Reg. Gen. 24.

18 Canst. 20.

mantiene en un estilo potencialmente abierto a todos, no se limita al cuidado de elites, sino que se dirige a la masa. En esta linea la parroquia salesiana:

a) Valoriza la catequesis sistematica comenzan. do por la bautismal, que inicia alas familias en la educacion cristiana de los hijos, ofreciendo la ocasion propicia de tomar contacto con los adultos, y llegando a la familiar y de ambiente. No solo compromete a los padres, sino que tambien corresponsabiliza a los colaboradores seglares. En la preparacion a los sacramentos procura crear un ambiente en el que hacer crecer en la fe, mirando, por tanto, a la maduracion de la entera comunidad mediante la escucha serena y atenta de la Palabra de Dios, las celebraciones y la ora cion comunitaria llenas de alegria y de sencilIez; interesando a todos en un itinerario catecumenal que tiene como etapas el ano littirgico, y, como referencia apostolica constante, la juventud parroquial, durante to do su cicIo de desarrollo.

b) La parroquia salesian a no separa la evangelización del compromiso par la PROMOCION HUMANA. Al estilo de Don Bosco, se acerca a todos los hermanos y a su servicio 19, en solidaridad y simpatia 20, vivien do la evangelizacion y la promocion humana en un tinico movimiento de caridad.

La u.nica mision, a la cual estamos llamados, mira a realizar «la compenetracion de la ciudad terrena y de la ciudad eterna», comprometiendonos como salesianos a «comunicar la vida divina y dar un sentido mas humano al hombre y a su historia» 21.

c) La parroquia salesiana descubre las vocaciones de cada persona, valorizando en concreto los dones de cada uno para bien de toda la Iglesia. La comunidad salesiana manifiesta asi que vive un rasgo significativo del estilo de Don Bosco: la con.

J. Cfr Const. 7.

20 Cfr Const. 16.

2J ACGE 60, que cita GS 40.

fianza para con todos por sus dotes, por las posibilidades de ayuda concreta, por los dones y carismas de que son portadores; y que acepta, sin reservas, la enseiianza conciliar sobre el papel de los seglares en la misión de la Iglesia, promoviendolos a los distintos ministerios.

"Su acción dentro de las comunidades de la Iglesia es tan necesaria, que sin ella el propio apostolade de los pastores no puede conseguir la mayoria de las veces plenamente su efecto» 22. Este clima es particularmente apto para el nacimiento de la Familia Salesiana y para el desarrollo de nuevos gropos de cooperadores. Escribia Don Bosco: "Una de las preocupaciones (del parroco) sera promover las asociaciones cat6licas, y especialmente la de los Cooperadores Salesianos» 23.

Finalmente, una atención tan clara a las personas favorece el descubrimiento de los recursos espirituales de cada vocación. Los muchachos y los j6venes podran mas facilmente madurar una opción ,apost6lica, religiosa y sacerdotal 24.

3.2.4 La parroquia salesiana ES POPULAR. Lo es por raz6n de:

- su ubicación, inserta preferencialmente en am. bientes populares y populosos de las grandes ciudades; .

- el estilo de su acción, que cuida enlazar con el pueblo y no quiere ser una comunidad en. castillada y cerrada, 0 una iglesia para pocos; cuida las liturgias y fiestas en que el pueblo se pueda sentir con naturalidad y sencillez; presta tambien atención y simpatia' alas manifestaciones de piedad popular y sabe orientarlas, con respeto, mediante una pedagogia de evangelización 25;

22 AA 10.

23 S. G. Bosco, Gp. Ed., XXVI, p. 263.

24 Cfr Canst. 12 y Parte III 2. Fecunclidad Vocacional.

.. Cfr EN 48.

- su apertura a la vida del barrio; evitando to do espiritu de partido, participa en los problemas de la gente humilde con la cual vive y comparte sus alegrias y dolores, sus desilusiones y esperanzas. .

Concluyendo

Invitamos a repasar cuanto escribieron los Capitulos Generales tercero y cuarto, presentados por Don Bosco en 1887: «Los enfermos, los jovenes y los niiios sean el objeto de las preocupaciones solicitas del parroco. El parroco mas amado es aquel a quien siempre se pueden acercar los niiios y los pobres» 26.

Y continua: «El parroco salesiano, si conserva el espiritu de la Congregacion..., no dejara de ser apostol en medio de ese pueblo que Dios ha con. fiado a sus cuidados, y, santificandose a si mismo, ganani muchas almas para el Cielo» 27.

3.3 ORIENTACIONES OPERATIVAS

a) Cada parroquia cuide y verifique la propia fisonomia salesiana segun las lineas especificas indicadas, dentro del contexto de la Iglesia local y en conexion con los organismos inspectoriales.

b) Cada Inspectoria, en el plan de reajuste, provea a la eventualidad de devolver a la Diocesis aquellas parroquias que, dado el cambio de' situacion, no ofrecen ya la posibilidad de un apostolado tipicamente salesiano: por no estar unidas a una comunidad salesiana; por no alcanzar de forma prioritaria a los jovenes; por no estar insertas en ambiente popular.

c) No se acepten nuevas parroquias si faItan las caracteristicas dichas.

26 S. G. Bosco, Op. Ed., XXVI, p. 263.

27 Ibid., p. 265.

d) Los hermanos destinados a la parroquia reciban una formacion especifica, que subraye y desarrolle tambien 10s valores del estilo salesiano en la vida y en la accion.

Ademas del esfuerzo personal de cada uno de ellos por la propia formacion permanente, ofrezcaseles la posibilidad de una periodica actualizacion teol6gica y pastoral.


4. LAS MISIONES

EI tema del CG21, las orientaciones acuciantes de la Iglesia en estos uItimos años, especialmente la exhortacion apostolica Evangelii Nuntiandi, el interes y el esfuerzo despertado en toda la Con gregacion con ocasion de las celebraciones del Centenario de las Misiones Salesianas, imponen una reflexion y un examen sobre el tema de las Misiones.

Esta reflexion esta necesariamente en relación con el CGE, que preparo un documento sobre «El , salesiano en la accion misionera» 1, introdujo en las Constituciones y en los Reglamentos algunos articulos importantes sobre nuestra actividad misionera 2, y establecio la creacion de un Dicasterio para las Misiones 3.

La presente reflexion tiene objetivos especificos, determinados y limitados por la perspectiva del tema general y del CG21, que es un Capitulo de verificacion. Se trata pues, de recoger los aspectos mas significativos del camino recorrido en este sexenio, y ahondar en algun punta particular, para poder asumir con voluntad operativa algunas orientaciones que guien nuestro compromiso misionero en los proximos años.

Por tanto, no pretende plantearse todos los aspectos de la presencia salesiana en las Misiones; no tiene la in ten cion de proponer, ni siquiera en pers-

1 ACGE 472-480.

, Canst. 15, 24, 142; Reg. 15-20.

3 Canst. 142.

pectiva salesiana, las principales lineas de una pastoral misionera.

Este Capitulo General, que por primera vez despues del Centenario de las Misiones, ve reunidos representantes de toda la Congregación, siente el deber y la necesidad de alabar y dar gracias aDios por las maravillas que ha obrado por medio de los Hijos de Don Bosco, sostenidos en to do momento por Maria Auxiliadora. Un sentimiento igualmente vivo y sincero de admiración y de gratitud quiere expresar a los miles de salesianos e Hijas de Maria Auxiliadora que, en estos cien anos, han escrito paginas luminosas en la historia de las dos Congregaciones, dejandonos un patrimonio de fortaleza, de audacia apost6lica, de creatividad pastoral, de trabajo incansable, de abnegación y de martirio que constituye una herencia preciosa y un estimulo para siempre nuevas empresas.


4.1 La situación

Aunque no es facil resumir en pocas lineas una situación tan variada y compleja, parece, sin embargo, util poner de relieve algunos aspectos particularmente significativos 4.

Cabe destacar, ante todo, algunas lineas que testimonian vitalidad y esiuerzo de renovación.

La celebración del Centenario ha puesto en movimiento diversas iniciativas a nivel mundial, inspectorial y local, que, a menudo, han interesado e implicado a toda la Familia Salesiana; encuentras, refIexiones, compromisos concretos, etc. En este contexto, y aunque 10 supera, merece destacarse la publicación de obras y estudios misioneros salesianos, en particular las publicaciones del «Centro Studi di Storia delle Missioni Salesiane» y la realización de documentales filmados sobre la vida y la acción misionera salesiana.

, Fuentes de evaluación: RRM, nn. 248-277; Sch. Pree. 279-280; Relazione StIlle attivitd del Dicastero per Ie Missioni 1972-1977, 42 pp.

Desde el punta de vista estructural, se ha procedi do en estos alios a la organizacion progresiva del Dicasterio de las Misiones.

Pero, sobre todo, es, a nivel de solidaridad y de empelio por el personal, don de se constatan las realizaciones mas consoladoras y prometedoras: solidaridad y vitalidad expresadas por las cifras particularmente significativas de hermanos que en estos ultimos cinco alios han partido para las misiones (cerca de 270), y de los que, habiendo ido como voluntarios por cine a alios despues de 1965, han decidido en su gran mayoria continuar en sus puestos. Solidaridad que adquiere un especial relieve en la ayuda de personal que algunas inspectorias misioneras han comenzado a dar a otras inspectorias. Es un hecho rico de significado ec1esial y de perspectivas para el futuro. Cabe recordar tambien aqui la experiencia de los «hermanamientos».

Estos esfuerzos se aliaden al celo apostolico y a la creatividad pastoral de las comunidades y her. manos de las zonas misioneras. Otro aspecto posi- , tivo y rico de esperanza para toda la Congregacion, es el import ante incremento de las vocaciones en ~lgunas zonas misioneras, p. ej., algunas partes de Asia don de el porcentaje del personal local es preponderante (77 por 100).

Significativa, si bien no muy numerosa, es la presencia en algunos continentes de jovenes seglares con explicito compromiso misionero.

Merecen tambien recordarse los esfuerzos realizados, tanto en el centro como a nivel local, para la formacion de los misioneros, para la cualificacion misionera de algunos hermanos y para la formacion de algunos equipos capaces de afrontar can seriedad la pastoral misionera actual.

Desde otro punta de vista, es de recordar la so. lidaridad manifestada concretamente en tantas otras formas, por ejemplo, con el apoyo economico, a traves de las Procuras, con la creacion de fondos especiales 0 de forma esporadica.

Todo esto resuIta particularmente significativo, si se considera que ha coincidido con un momenta

historico en e1 cual la Congregación ha vivido una crisis profunda y a veces dolorosa. La continuidad del entusiasmo misionero aparece, por tanto, como un signo de vitali dad y de esperanza, que repercute en toda la actividad de la Congregacion.

Siempre en forma sintetica, pero con igual objetividad, hay que reconocer tambien la presencia de aspectos negativos que frenan nuestra accion misionera. La animacion misionera en la Congregacion, en algunas partes, deja todavia que desear y esta lejos de suscitar un verdadero interes entre 10s j6venes de nuestras obras.

No existen en numero suficiente salesianos cualificados, cap aces de orientar la reflexion y la accion misionera sobre la base de estudios serios.

Debido a situaciones de aislamiento y de esfuerzos pastorales individuales 0 excesivos, para muchos misioneros no resulta posible la formacion permanente 0 son poco frecuentes los momentos fuertes de oracion y de reflexion.

En algunos casos la planificacion de la pastoral misionera, no ciertamente por falta de buena voluntad, revela una insuficiente preparacion cultural y una inadecuada atencion a la pastoral y a la metodologfa misionera.

Falta, 0 al inenos es insuficiente, un «movimiento salesiano para misioneros seglares»: en este sentido el empeño de la Congregacion ha sido poco destacado. Han contribuido a hacer mas diffcil la situacion, en no pocos pafses, complicaciones de caracter externo, que impiden 0 reducen en gran parte la libertad de accion y de iniciativa.

4.2 Cuadro de referencia

Los puntos destacados por la evaluación y por la reflexion hecha a nivel de Congregacion a partir del Centenario de las Misiones, ponen de relieve algunos aspectos ligados a la nueva sensibilidad misionera y que superan en parte el ambiente salesiano.

4.2.1 Misiones -situaciones de misiónestilo misionero

Es un dato real que hoy, en las tierras tradicionalmente cristianas, amplios estratos de la poblacion, especialmente juvenil, viven en un clima descristianizado, y tienen necesidad de un primer anuncio 0 de una segunda evangelizacion. Una perspec. tiva de este genero requiere inevitablemente un cambio «en la geografia misionera»: todos los paises del mundo pueden ser considerados, hoy, «tierra de mision». Por eso, cualquier acción evangelizadora adquiere un significado misionero.

Esta comprension mas amplia del concepto de mision y la extension de la perspectiva evangelizadora a toda la accion de la Iglesia no debe, sin embargo, disminuir el significado peculiar de esa pre. sencia misionera especifica, que para la Iglesia es una urgencia vocacional desde sus comienzos 5.

Una escasa apertura hacia nuevos pueblos puede resuItar una insensibilidad frente a la perspectiva futura de la historia; el replegarse del mundo cristiano sobre si mismo lleva eonsigo una menor feeundidad evangelizadora en su interior.

«En unos momentos en que no faltan quienes piensan e incluso dieen que (...) la epoea de las misiones es eosa del pasado», el Papa en Evangelii Nuntiandi reeuerda que «la Iglesia mantiene vivo su empuje misionero e incluso desea intensifiear- 10», porque «se siente responsable ante todos los pueblos, y no deseansara hasta que no haya puesto de su parte todo lo necesario para proclamar la Buena Nueva de Jesus Salvador» 6.

A la luz de estas afirmaciones nuestra reflexion se eoneentra sobre la aecion misionera en sentido especifico.

. EN 51, 53.

. EN 53, 51-52.

4.2.2 Misión salesiana y misiones El puesto que ocupa esta accion misionera en la vida salesiana ha sido expuesto con claridad por el CGE, y confirmado por el Rector Mayor con ocasion del Centenario 7. He aqui, en sintesis, las principales afirmaciones: la ace ion misionera en sentido especifico constituye un «elemento esencial, indispensable, caracterizante» de nuestra Congregacion 8.

«Las misiones no son una obra... que pueda elencarse con las demas obras (...). En la tradicion salesiana las misiones deben considerarse (...) como un lugar privilegiado en donde realizar la misión salesiana, y un espiritu para realizarla» 9.

4.2.3 Acción misionera y estilo salesiano

El servicio y el estilo salesiano parecen estar en una particular sintonia con las exigencias de la pastoral misionera.

La experiencia ha hecho ver algunas convergencias que merecerian un estudio mas detenido. Indi. camos algunas: la union intima entre el empeño de evangelizacion y el de promocion humana; la atencion pr~ferencial a los jovenes pobres y alas clases pop*lares; el espiritu de adaptacion y de creatividad; la sensibilidad catequistica y la piedad sencilla y concreta; una presencia particularmente encarnada y atenta a los valores humanos y reli. giosos de la cultura local; un acercamiento humano facil, con la marca del optimismo evangelico, que suscita la simpatia y ejerce un atractivo parti. cular hacia nuestra propuesta...

4.2.4 Aspectos mas relevantes en la acción misionera hoy

Para situar en un contexto mas actualizado la pastoral misionera, los salesianos deberan mirar con

--- 7 ACS, n. 267.

8 ACS, n. 267, p. 13.

9 ACS, n. 267, p. 20.

vision renovada a la «mision» y a sus contenidos. Esto requiere entre otras cosas:

- una integracion entre promocion human a y evangelizacion, entre cultura y accion pastoral;

- una mayor insistencia sobre la realidad propia de la Iglesia local, y, por tanto, un esfuerzo de apoyo, de integracion, de presencia corresponsable en ella;

- el esfuerzo por plantearse el hecho misionero con una perspectiva cientificamente valida, que integre sus distintos elementos;

- orientar la accion misionera hacia las zonas mas necesitadas, mas sensibles y mas decisivas para el porvenir del mundo;

- incluir a los seglares tanto a traves de la accion misionera directa como a nivel de respaldo, trasformando en las mismas zonas misioneras a los evangelizados en evangelizadores...


' 4.2.5 Animacion misionera

La renovacion del espiritu y de la accion misionera a nivel de toda la Iglesia, y, para nosotros, a nivel de Congregacion, exige que se afronte, como uno de los problemas fundamentales, el de la sensibilizacion y animacion de la comunidad inspectorial y local, con miras a una mas profunda conciencia misionera, de un servicio renovado en el contenido y en la metodologia, de un empeño evangelizador que, para tener credibilidad, debe dirigirse contemporaneamente hacia dentro y hacia fuera de la propia comunidad.

EI articulo 16 de los Reglamentos confia al Inspector y su Consejo la primera responsabilidad de esta tarea.

EI CG21, confirmando cuanto ha dicho el CGE, recuerda los multiples servicios que pueden prestar las Consultas, Procuras, Centros misioneros, establecidos a nivel inspectorial 0 interinspectorial:

mantener vivo el interes de los hermanos y de todos los miembros de la Familia Salesiana; suscitar vocaciones misioneras; conservar un contacto permanente con los hermanos de una inspectoria que han ido a misiones; colaborar con el Dicasterio de las Misiones; con las diocesis y los otros Institutos Religiosos; realizar proyectos y obtener ayudas de organismos estatales, eclesiales, privados, etc.


4.3 ORIENTACIONES OPERATIVAS

El CG21 confirma la validez de cuanto establecio el CGE, en particular de cuanto se refiere a la animacion de la accion misionera y a la formacion permanente de los misioneros 10; y establece algunas lineas operativas para la orientacion y renovacion de la accion misionera en los proximos años:

a) El relanzamiento misionero requiere objetivos concretos, exige adoptar una estrategia orientada hacia paises en los cuales la accion misionera resulta mas urgent~. Por eso, al comienzo del segundo centenario de la presencia salesiana, recordando el deseo profetico de Don Bosco 11, los salesianos, sin cerrarse a la posibilidad de iniciar y desarrollar su acción misionera en otras zonas prometedoras 0 necesitadas, se comprometen a aumentar de forma notable su presencia en Africa.

b) Empefiese cada Inspectoria en favorecer la participacion de los seglares, especialmente de la Familia Salesiana, en la acción misionera directa. A tal fin, arbitraran instrumentos operativos id6- neos, aprovechandose tambien de los servicios tec. nicos de otras organizaciones, y manteniendose en contacto con experiencias analogas de otros Insti. tutos Misioneros. El Dicasterio de las Misiones, en colaboracion con el de la Familia Salesiana y el de

,. Canst. 142; Reg. 15-20; ACGE 480; efr tambien Documenta sabre la "Formazione alla vita sa/esiana".

11 MB XVI, p. 254.

la Pastoral Juvenil, colaborara en la misma linea a nivel mundial.

c) La situacion actual de la pastoral misionera, la importancia y amplitud de nuestro compromiso exigen que el problema de las Misiones se afronte sobre la base de estudios cientificos serios. A tal fin, instituyase una Cátedra de Misiologia en la UPS; procurese que en toda Inspectoria misionera haya algun hermano cualificado en esto.

d) El misionero evangeliza, ante todo, con su testimonio. Para que este sea siempre mas claro, to do misionero procurara ser fiel a los compro. misos de la comunidad religiosa. Aprovechara gus. toso encuentros y periodos de puesta al dia para su crecimiento espiritual, para el intercambio fra. terno y para cotejo de experiencias pastorales. Comprometanse las comunidades inspectoriales y loca. les a ofrecer a 10s hermanos espacio y tiempo para esta reflexion y puesta al dia, sobre todo para momentos fuertes de oracion, que les ayuden a renovar el significado de la mision a la luz de la Pa. labra de Dios.


5. LA COMUNICACION SOCIAL: CAMINO PARA LA EVANGELIZACION

5.1 Importancia de la comunicacion social

148 Ya el CGE (nn. 443-445) expuso algunas reflexiones sobre la importancia de los MCS. Cabe afiadir que actualmente los MCS, a causa de la presion producida por el uso combinado de instrumentos tecnicos perfeccionados y formas sofisticadas del lenguaje de las imagenes, ha adquirido un papel decisivo en la dialectica cultural, en la vida social y en las costumbres. Deben considerarse no s6lo como «vehiculo», «conjunto de instrumentos», sino como una reali.

dad compleja y dimimica, que po see en si misma una incalculable capacidad de persuasion, con la cual enriquece, en bien y en mal, los mensajes que expresa.

Los MCS se convierten cada vez mas en una pn;;- sencia educativa de masa, plasmadora de mentalidad y creadora de cultura. A traves de ella se elaboran las convicciones colectivas en que se basan los nuevos modelos de vida y los nuevos criterios de juicio. Su eficacia incisiva y su presencia cada vez mas masiva hacen de los MCS una verdadera y autentica escuela alternativa para grandes estratos de la poblacion mundial, especialmente juveniles y populares.


5.2 Comnnicacion social y evangelizacion

«En nuestro siglo influenciado par los medias de comunicacion social, el primer anuncio, la catequesis a el ulterior ahondamiento de la fe no pueden prescindir de esos medios (...). La Iglesia se sentiria culpable ~te Dios si no empleara esos poderosos medios, que la inteligencia humana perfecciona cada vez mas. Can ellos la Iglesia pregona sabre los tejados el mensaje del que es depositaria. En ellos encuentra una version moderna y eficaz del ptilpito. Gracias a ellos puede hablar alas masas» 1.

5.3 EI pensamiento de Don Bosco

Don Bosco en su tiempo considero la prensa y la difusion de buenos libros, revistas, obras de teatro para la juventud, musica y canto, no solo como instrumento al servicio de especificas obras apostolicas y educativas (oratorios, colegios, escuelas, misiones), sino tambien como «empresas apostolicas originales» en si mismas ordenadas a la reali-

1 EN 45; cfr Communio et Progressio 13; Sin. 77,9.

zacion de la mision juvenil a el confiada por la Divina Providencia 2.

Desde entonces intuyo que los jovenes y las masas populares habrian de ser los principales consumidores y primeras victimas de la violencia de unas comunicaciones sociales manipuladas e instrumentalizadas. En este sentido afirmo que la buena prensa era uno de los fines principales de la Congregacion


5.4 La situación

La Relacion del Rector Mayor y la del Dicasterio de la Pastoral de Adultos, asi como los Esquemas Precapitulares del CG21, sobre la base de las experiencias recogidas, han determinado claramente algunos elementos de crecimiento y de compromiso renovado.

,5.4.1 La primera es la de una mas madura y eficiente utilización de los MCS como «conjunto de instrumentos» por parte del salesiano «comunica. dor».

Se ha verificado un innegable incremento de los MCS:

- para la informacion salesiana dentro y fuera de la Congregacion y de la Familia Salesiana (NI, ANS, BS, cortometrajes, fono y video cassettes, diapositivas...);

- para el ejercicio de la accion apostolico-educa. tiva en nuestras obras juveniles (oratorios, escuelas...), en las parroquias y en las misiones mediante el uso de los «Mass-media» (cine, radio- TV con circuito cerrado), y de los medios «menores» 0 {<Group-media» (audiovisuales, en general, expresion corporal, teatro, musica...).

. Cfr Epist. IV 318; Rewz. di Don Bosco alla Santa Sede, 1877.

, CGE 451.

5.4.2 La segunda dirección en la que se ha con. solidado el esfuerzo de la Congregacion ha sido la producción de material, instrumentos, programas de MCS «al servicio del Evangelio» para «extender casi sin limites el campo de audicion de la Palabra de Dios, haciendo llegar la Buena Nueva a millones de personas» 4. En esta linea cabe recordar algunas obras que aparecen como lugares y momentos ori. ginales y privilegiados en los que se realiza nuestra mision juvenil y popular:

- la actividad de los Centros editoriales para la produccion 0 difusion de libros, subsidios, revistas para los jovenes,

- las emisoras de radio y TV,

- los centros de investigacion y produccion de programa: audiovisuales (discos, cassettes, videocassettes, fotografias, peliculas, posters...), asi como radiofonicos y televisivos, que son considerado~ de por si obra pastoral salesiana 5.

Por ultimo, hay que recordar los esfuerzos realizados en estos ultimos anos para llegar a una co. ordinacion a nivel interinspectorial, 0 nacional 0 regional, de iniciativas editoriales para intensificar y ampliar la eficacia y para no despilfarrar personas y medios en «duplicados» inutiles.

Los divers os documentos y relaciones destacan los siguientes puntos debiles:

- en la formacion de los salesianos para los MCS: falta de planes, programas y hombres especializados para la formacion sistematica de los salesianos en los MCS;

- en la informacion salesiana: falta de una «orientacion autorizada, estable y segura», para los Boletines y la informacion salesiana 6; ca-

4 EN 45.

, Cfr Sch.Prec. 185. 187c.

. Cfr RRM 249 c.

rencia de «corresponsales con el Centro» para la informacion salesiana 7;

- en los MCS al servicio de la evangelizacion: iniciativas a nivel individual, no con ectad as ni sostenidas adecuadamente por las comunidades; insuficiencia de conexion entre centros de produccion y de distribucion; falta de estruc. turas de animacion y de coordinacion con el Centro, a nivel inspectorial y nacional; escasa relacion con los organismos eclesiales de los MCS.

Pero el punta mas debil y delicado es la preocupante escasez de personas y grupos de salesianos capaces de elaborar, a traves de los nuevos lenguajes de los MCS, los contenidos y los mensajes de una evangelizacion adaptada al hombre de nuestro tiempo. Faltan, 0 son absolutamente insuficien. tes, los grupos de reflexion, de estudio, de experimentacion y de elaboracion fundados sobre serias bases cientificas.

En la raiz de esta situacion existen, ciertamente, problemas de escasez de personal, peru tambien falta de vision. Se han preparado instrumentos y estructuras y se ha buscado la necesaria prepara. cion tecnica e instrumental, peru no se ha puesto igual atencion en la preparacion de Ias personas y en Ia busqueda de contenidos culturales.


5.5 Lineas de accion

Las estructuras centrales (Dicasterio, Secretariado) y Ias inspectoriales haganse cargo, cada una en su ambito y competencia, del problema de la formacion de los salesianos para Ios MCS.

A tal fin, son necesarios programas-base para los distintos grados de la formaci on, y, sobre todo, hay que encaminar hacia los estudios especializados. a

, RRM239 d.

los hermanos que hayan de encargarse de este sector formativo. Destinar algunos hermanos a la cualificacion y especializacion en MCS, no significa perder fuerzas apostolicas, sino antes bien hacerlas mas eficientes y multiplicarlas.

Otra linea de renovacion consiste en introducir el «lenguaje total de la Comunicacion» en la accion pastoral.

Los audiovisuales, la expresion dramatica, la creatividad (pintura, dibujo, grMicos...), la musica y el canto no se han de considerar como actividades complement arias y subsidiarias, para usar solo ocasionalmente. Constituyen un verdadero lenguaje, que no hay que descuidar ni infravalorar en el dialogo educativo con los jovenes de las nuevas generaciones, para los cua1es estas formas de comunicacion parecen particularmente congeniales.

La experiencia demuestra que el uso de los nuevos lenguajes se reve1a eficaz y fecundo no solo en el pIano de la didactica esco1ar y de la expresion artistica, sino tarfi"5ten en la anima cion catequistica, en la educacion a la oracion y en la liturgia.

Sera util una accion sistematica que mire un convenio e intercambio entre Inspectorias y Regiones a fin de evitar «duplicados» de gastos y esfuerzos inutiles. Hay que incrementar, en las formas mas eficaces y segun las posibilidades concretas de las Conferencias inspectoria1es, de los Grupos y de las Comunidades inspectoria1es, 1a creacion y consolidacion de «actividades especificas» en los divers os paises, en armonia con los planes del episcopado, y relacionadas organicamente entre si para un servicio de comunicacion social destinado y abierto a 10s jovenes (radio-TV privadas, editoriales, cooperativas teatrales juveniles, centros de produccion de programas cine-video, etc.).

Para sensibilizar los diversos ambientes a 1a novedad del lenguaje y al cambio de mentalidad, programense y realicense en las escuelas, en los centros juveniles y en las parroquias cursos sistematicos de formacion para ver criticamente los programas culturales e informativos de los «mass-media», y

utilicense los Medios de Comunicacion Social como medios ordinarios de comunicacion educativa. En particular, desarr6llese el uso creativo de 10 audiovisual y de la escenificacion en las actividades didacticas y catequisticas.

Dese especial relieve, en el desarrollo de los MCS, a la relacion cultura-evangelizacion.

Para acelerar e intentificar nuestra aportacion a unos mas adecuados MCS, establezcanse cursos de formacion profesional para jovenes orientados alas actividades profesionales de las Comunicaciones Sociales.


5.6 ORIENTACIONES OPERATIVAS

a) En dependencia del Dicasterio para la Familia Salesiana, el Secretariado de los MCS cuide la coordinacion, incremento y animacion de los MCS en la Congregacion; disponga de los adecuados servicios para garantizar el cuidado de los sectores y la mejor realizacion de los servicios a el confiados; el Secretariado organice, a los oportunos niveles, encuentros regulares de programacion, colaboracion y verificacion para las divers as actividades de los salesianos en el campo de los MCS.

b) Para promover la investigacion cientifica, el estudio y la verificacion de los problemas de comun interes salesiano en materia de MCS, el Dicasterio cree una Consulta Central de expertos, Salesianos y no Salesianos.

c) En union con el Dicasterio, nombrense, a nivel inspectorial (0 de Conferencia) encargados para la coordinacion, animacion y consulta en el sector de los MCS, al servicio de la formacion para los mismos, de nuestra mision evangelizadora y de la informacion salesiana.

d) Para facilitar a los hermanos el acceso alas fuentes historicas y de la espiritualidad salesiana y a los documentos originales, fomentese el estudio

de la lengua italiana, como lengua de unidad y de comunicacion dentro de la Familia Salesiana.


6. UNA NUEVA PRESENCIA SALESIANA PARA LA EVANGELIZACION

Al termino de la reflexion sobre el tema general, EVANGELIZACION, TESTIMONIO Y ANUNCIO, DOS EXIGENCIAS DE LA VIDA SALESIANA EN. TRE LOS JOVENES, el CG21 es consciente de ha. ber tocado muchos puntos problematicos de nues. tras comunidades.

En to do el presente documento, que ha querido ser una revision realista y serena de la vida y de la accion de los salesianos, particularmente en el ultimo sexenio, se vuelve, como perspectiva del futuro y como medida del pasado, a hacer referencia a la RENOV ACI01'L- Y no podia ser de otra forma, desde el momenta que el XX CGE, con su canicter de «especial» querido por el Concilio, puso a la Congregacion en estado de «renovacion» 1.

Queremos concluir reflexionando una vez mas sobre este argumento, que pone de relieve el aspecto dinamico de la renovacion en la fidelidad.

Se habla, por tanto, de NUEVA PRESENCIA SALESIANA, indican do con esta expresion varias iniciativas, a nivel interior y personal y a nivel de estructuras y de organizacion, con repercusiones en el espiritu y en las modalidades de accion.


6.1 «Nueva presencia salesiana»

EI CGE, al hacer el analisis de nuestra pastoral entre los jovenes, afirma: «La mision salesiana no ha sabido encontrar, en muchos sitios, la presencia

1 ACS 283, p. 16.

nueva que exigia un mundo en vias de transformación » 2.

No se trata de una afirmación aislada. Refiriendonos a un tema tan central en nuestro CG21, EL PROYECTO EDUCATIVO SALE SIANO, recordemos otra expresión del CGE: «En la situacion de los j6venes de hoy, el "sistema preventivo" exige que se busque una presencia nueva. Nuestra eficacia educativa depende de la finalidad renovada al Sistema Preventivo de Don Bosco» 3.

Es importante, y en algunos aspectos esencial, acoger la apremiante invitacion de la Congregacion.

«En la seguridad de que frecuentemente una renovacion eficaz comienza por las iniciativas de hombres y grupos particularmente disponibles, el Capitulo General anima a realizar oportunas experiencias de formas nuevas de testimonio y servicio en medio de los mas pobres, seglin el espiritu misionero de Don Bosco, dispuesto a intervenir donde mas urgentes son las necesidades» 4.

Volvien do a leer la orientacion del CGE, se encuentran algunas indicaciones significativas:

6.1.1 Un relanzamiento del espiritu de iniciativa.

No es un descubrimiento de nuestros dias. Los Salesianos de la primera generación aprendieron, en la escuela de Don Bosco, a ser emprendedores y valientes.

La historia de la expansión salesiana en el mundo es una clara demostración de la eficacia de la ensefianza de nuestro Fundador.

Afirma don Albera: «Hay que saber unir el espiritu de iniciativa personal con la debida sumision al superior; precisamente de este espiritu saca nuestra Sociedad esa genial modernidad que nos da la posibilidad de hacer el bien exigido por las necesidades de tiempos y lugares» 5.

. AGeE 393.

, AGeE 188.

. AGeE 619.

. AGS,2 (1921),4.

Don Rinaldi, mas tarde, con palabra mas incisiva, escribia:

«Esta elasticidad de adaptacion a todas las formas de bien que van continuamente surgiendo en la humanidad, es el espiritu propio de nuestras Constituciones: y el dia en que se introdujese una desviacion contraria a este espiritu, seria el fin de nuestra Pia Sociedad. La aprobacion de 1874 ha consagrado este principia, y nuestra Pia Sociedad comenzo a ser de todos los tiempos, a medida que se iba extendiendo a todos los lugares. Pero este creciente desarrollo creo la necesidad de modificar las Constituciones» 6. -

En perfecta sintonia se halla la interpretacion que Don A. Caviglia ha dado de la historia salesiana: «A esto se debe... el hecho de que las personas por el destinadas a iniciar nuevas fundaciones, sin abandonar el espiritu de institucion, pudieron dar a cada una la impronta particular que las condiciones del lugar exigian, apareciendo ellos mismos, 10 que no es poco merito, como autenticos fundadores de obras fuertes y diversamente eficaces.

Quien conoce la vida y sabe historia, comprende cuan gran dosis de genialidad y de sabiduria se contiene en concebir y actuar un principio como este» 7.


6.1.2 Una atención a la INTUlCION y SENSIBILIDAD de algunos hermanos

«Una renovacion eficaz comienza a menudo por las iniciativas de hombres y grupos particularmen. te disponibles», dice el CGE.

Se trata, pensamos, de una disponibilidad para con el Espiritu de Dios que habla y urge; de una sensibilidad al grito de muchachos y jovenes que llaman y esperan 8.

.ACS, 3 (1923), 21.

7 A. CAVIGLIA,Don Bosco, Profilo Storieo, SEI, Turin, 1934, 2.°, pp. 169-170.

.Cfr discurso de Pablo VI al CG21 477.

6.1.3 Un cuidado par trabajar SEGUN EL ES- PIRITU MISIONERO de Don Bosco asegurando la <<identidad congregacional» de nuestro proyecto religioso «en su espiritu y en su forma» 9. No basta que una iniciativa se presente como nueva, como apostolicamente valida y entusiasmante, para que pueda decirse salesiana.

Existen unos criterios que hay que aplicar.

Ante todo, la forma de vida y el estilo apostolico debenin ser comunitarios. «E1 vivir y trabajar todos unidos es para nosotros, salesianos, una exigencia fundamental y un camino seguro para realizar nuestra vocacion» 10.

Camino que, muchas veces, resulta fatigoso es el de hacer que toda la comunidad inspectorial entre en el proceso de renovacion; pero es la garantia de exito seglin el plan de Dios, y de la empresa , apostolica y de la vocacion salesiana.

I Un segundo criterio, intimamente ligado al aspecto comunitario de la mision, es el del «mandata recibido».

La caridad pastoral exige la comunion jerar- quica.

No tiene solo valor juridico la «carta de obediencia »: «los Superiores y comunidades (son) como interpretes cotidianos de la voluntad de Dios» 11,

. Intervencion del RM en la Sala Capitular, 30.1.1978.

10 Const. 50.

11 Const. 91. EI decreto conciliar PO, que puede citarse aqui oportunamente, afirma: "Esta obediencia que conduce a la mas madura libertad de los hijos de Dios, exige por su naturaleza que, al escogitar prudentemente los prebiteros, en el cumplimiento de su ministerio, movidos de la caridad, nuevos metodos para el mayor bien de la Iglesia, propongan confiadamente sus prop6sitos y expongan insistentemente las ne. l cesidades de la grey que les ha sido confiada, prontos siempre a someterse al juicio de los que ejercen la autoridad principal en el gobiemo de la Iglesia de Dios" (PO 15).

6.2 Realizaciones de «una nueva presencia salesiana»

6.2.1 Hay una NUEVA PRESENCIA SALESIANA que compromete directamente el coraz6n de los hermanos, y linicamente su santidad llegara a expresar en cada caso, respondiendo con generosidad a la gracia del Espiritu, volviendo a vivir el carisma de la vocación salesiana. jRenovandose interiormente, los hermanos hacen nueva la Congregación! A este prop6sito el CG21 exhorta a todos los hermanos a recordar la afirmación del CGE: «Para actuar el discernimiento y la renovación necesarias no bastan los historiadores, ni los te6logos, ni los politicos, ni los organizadores: hacen falta hombres profundamente espirituales, hombres de fe, que vibren por las cosas de Dios y esten dispuestos a una obediencia decidida como la de nuestro Fundador. La genuina fidelidad a Don Bosco no consiste en copiarlo en 10 exterior, sino en imitar la fidelidad de Don Bosco alas mociones del Espiritu Santo» 12.

6.2.2 Hay una NUEVA PRESENCIA SALESIANA ligada al trabajo y a la actividad que los hermanos y las comunidades locales e inspectoriales realizan en las obras surgidas durante toda la historia pasada, y que nosotros llamamos OBRAS Y ACTIVIDADES TRADICIONALES.

El presente documento ha intentado, reflexionan. do sobre los ambientes y vias de la evangelización, formular indicaciones practicas para dar nueva vitalidad a aquellas iniciativas que el tiempo, las nuevas condiciones sociales, culturales y ec1esiales, y el cansancio de los hermanos amenazan vaciar de significado y hacer ineficaces. Exhorta a una renovación real, si bien, a veces, dificil. La Relación del Rector Mayor se expresa asi: «A menudo... el concepto de nueva presencia ha sido empobrecido al ser vis to «en un solo sentido», 0 sea, segun un

12 ACGE 18.

tinico «modelo tipo». No parece haberse proyectado, por ejemplo, segun el espiritu del CGE, la renovacion de la presencia salesiana en las obras tradi. cionales, como podria ser la creacion de una escuela verdaderamente «piloto», 0 una nueva perspectiva pastoral para una presencia divers a de la escuela 0 del centro juvenil en el barrio, etc.» 13.

La renovacion, por otra parte, no se postula solo a nivel metodologico, pastoral, operativo. Debe llegar al nivel comunitario.

«Las comunidades, pequeiias 0 grandes, no podnin ayudar a sus miembros mas que permane. ciendo constantemente animadas por el espiritu evangelico, alimentadas por la ora cion y generosamente marcadas por la mortificacion del hombre viejo, por la necesaria disciplina para la formacion del hombre nuevo y por la fecundidad del sacrificio de la Cruz» 14.

6.2.3 Hay una NUEVA PRESENCIA SALESIANA, fruto de la creatividad pastoral que sabe cubrir espacios de intervencion, a favor particularmente de los jovenes, hasta hoy poco considerados. A titulo de ejemplo se indican algunos de estos espacios de intervencion:

a) la necesidad espiritual de muchos jovenes de las gran des ciudades, indiferentes 0 alejados de la Iglesia y de la fe;

b) el interes, a nivel de promocion humana y cristiana, por la juventud y el pueblo de los ambientes marginados, no solo en los llamados paises en vias de desarrollo, sino tambien en los industrializados 15;

c) la animacion de movimientos juveniles, mientras se asiste a la busqueda y al deseo por

13 RRM 175.

" ET 41.

15 Cfr Conclusiones del Congreso "Salesianos y promo cion humana y cristiana en ambientes de marginacion", Roma, Caia Generalicia, 19-24.2.1977.

parte de 10s j6venes de una conexi6n que supere los limites de la propia zona.

Las Constituciones expresan bien estas situaciones y exigencias: «Debemos actuar con la cons tante creatividad pastoral heredada de Don Bosco, renovando las existentes, adaptandolas a la evolución de las necesidades y crean do otras nuevas que respondan mejor a los cambios y exigencias de los tiempos» 16.

Los servicios que nacen seran prestados:

- en algunos casos, por hermanos individualmente 0 en grupos, a tiempo pleno 0 limitado partiendo de una comunidad dedicada fundamentalmente a otra actividad;

en otros casos, por comunidades creadas a prop6sito, generalmente con un numero reducido de hermanos; siempre con el objetivo de una «educación y gradual evangelización de otros muchos j6venes, sobre todo, entre los mas pobres, con los que s6lo se puede entrar en contacto dentro de su ambiente natural y en su estilo de vida espontaneo» 17.

El servicio salesiano al cual se nos dedica, sera ofrecido 0 directamente alas instituciones de la Iglesia local 0 a aquellas iniciativas que son promovidas por nuestras instituciones para responder a las necesidades locales 18.

Realmente, no se nos oculta la problemMica que plantea tal «creatividad pastoral».

En general, se polariza en torno a algunos puntos esenciales; entre ellos, estos mas significativos:

la dificil relación entre esa nueva presencia salesiana y el ambiente que, con las contradicciones y tensiones de todo tipo, acentlla la dificultad de definir el sentido de nuestra pre-

16 Canst. 27.

11 Canst. 30.

18 Cfr ACGE 81, 82.

sencia y hace inestable el equilibrio entre exigencias religiosas y servicio apostolico;

- la dificil relacion entre esa nueva presencia salesiana y la comunidad inspectorial se debe atribuir tambien a la falta de comunicaciones oportunas y de entendimiento acerca de algunas opciones particulares de trabajo, y a la aparente huida de tales hermanos de los compromisos de la inspectoria anteriormente asumidos.


6.2.4 Hay una NUEVA PRESENCIA SALES IANA que, despues del CGE, llamamos en la Congregacion PEQUEJSl:AS COMUNIDADES.

En la diversidad de las formas, adaptadas a los lugares y alas urgencias, el CGE 19seftalaba como caracteristicas fundament ales las siguientes:

- busqueda de una vida salesiana mas inserta entre los destinatarios, por la proximidad de estilo de vida y de morada;

- servicios menos estructurados, mas <igiles y con mas facilidad para responder alas especificas exigencias de la zona;

- naturaleza experimental de tales iniciativas, nacidas por una parte, «del des eo de una intensa comunion entre las personas, (pero tambien) de la vocacion de insertarse en ambientes especiales de vida y de trabajo» 2°.


6.3 Revision del CG21 de una de las realizaciones de nueva presencia: las pequefias comunidades

Dentro de lo que hemos llamado nueva presencia salesiana, las pequeftas comunidades son las que mayor preocupacion han despertado en algunas partes de la Congregacion en el pas ado sexe-

,. Cfr ACGE 510, 515.

20 ACGE .'510.

nio. Por ello detenemos mas la atención sobre elIas, para recoger tanto los aspectos positivos como los elementos negativos 21.

6.3.1 Positivamente, las pequefias comunidades han despertado en algunas inspectorias una atención mas viva y concreta hacia los j6venes marginados, una busqueda de estrategias de intervención adecuadas alas necesidades reales de algunas zonas pastoralmente alejadas e impenetrables.

A veces han ofrecido nuevos campos de acción apost6lica a grupos juveniles de nuestras obras, contribuyendo a comprometerlos cristianamente. A algunos hermanos les han ofrecido la posibilidad de descubrir el sentido de la participación personal, de la corresponsabilidad, de la pobreza 22.

Han servido para despertar, en ambientes extraños y a veces hostiles al influjo de la Iglesia, los interrogantes de la fe y del senti do de la vida, incluyendo a j6venes y adultos en un crecimiento cristiano progresivo hasta compromisos de testimonio y de servicio en el ambiente de su vida.

6.3.2 Entre los aspectos negativos anotamos los que mas han influido en el fallo de algunas experiencias. Algunos defectos y errores se manifiestan mas facilmente en las «pequefias comunidades», aunque no faltan en las otras:

- defectos de convivencia subrayados por la inmediatez de la vida com6n; 0 referencia a ideologias no aceptables desde el punta de vista religioso y eclesial23;

- dificultades de reintegración a las comunidades ordinarias;

" Se han utilizado: a) la "Relazione Generale sullo stato della Gongregazione", especialmente IDS nn. 135-136, 175; b) SARTI, Dati Statistici sulle Opere del/u Gongr., pp. 138-139; c) el material de los CI 77, recogido por el as! llamado "Grnpo de mayo", vol. 2.° y 4.°

22 Cfr Grnpo de mayo, Esquema V.

" RRM 135.

- problemas y deficiencias en el ejercicio de la autoridad, debidas tambh~n a la falta de una clara orientacion general;

- trabajo no siempre bien organizado y a veces disperso;

- irregularidad en los ritmos de oracion comun, debida a menudo a la variedad de los cometidos apostolicos 24;

- actitud de contestacion de la autoridad y de las normas que esta emana;

- busqueda de formas de comunidad compuesta no solo de religiosos, al margen de las normas constitucionales.


161 6.3.3 El cuadro de referencia que el CG2l vuelve a presentar remite alas indicaciones del CGE:

- sincera comunion con la inspectoria y con su centro, tanto al comienzo de la obra como una vez puesta en marcha;

- proyecto apostolico concreto en sus objetivos y elaborado comunitariamente de acuerdo con el Inspector y su Consejo, segu.n las indicacio. nes de la Iglesia local;

- eleccion de personal idoneo y numericamente suficiente, con exclusion de los hermanos j6- venes en fase de formacion inicial;

- determinacion, por parte de los organismos inspectoriales, de las modalidades del ejercicio de la autoridad 25;

- ritmos de oracion y de encuentro, segUn las Constituc:rmes y los Reglamentos, realizando «la union entre las exigencias de la vida comun y del apostolado, momentos distintos pero inseparables de la caridad apostolica» 26;

.. RRM 135.

25 Cfr ACGE 515.

" ACGE 508.

- no se realiza una «nueva presencia» para experimentar nuevas formas de comunidad religiosa, sino para ofrecer un servicio que no se podria pres tar de otra forma 27;

- los hermanos mantenganse dispuestos a volver a pasar a las comunidades salesianas habituales 28;

- el Inspector con su Consejo tenga frecuentes y fraternos encuentros como signo de comunion y de apoyo, y haga periodicamente, como ayuda, una evaluacion del compromiso y del trabajo de los hermanos.

En resumen La ultima palabra sigue siendo: renovarse y renovar con miras a la evangelizacion.

"Percibiendo mas ampliamente las inclinaciones de los espiritus y las exigencias de los hombres de hoy, debeis procurar que de vuestras fuentes salte el agua con renovado vigor y frescura. Tal comprOIpiso es apto para encender el alma en proporcion de las dificultades» 29.

27 La frase hay que leerla en el contexto del documento "Una nueva presencia salesiana para la Evangelizacion" y el grupo tecnico la entiende a la luz de cuanto alIi se dice:

" en las dos ultimas lineas del n. 148: "Entre los aspectos negativos... busqueda de formas de comunidad compuesta no solo de religiosos, al margen de las norm as constitucionales".

" en el n. 143 c bis, de la 6.a linea en adelante: "Existen unos criterios que hay que verificar. Ante todo, La forma de vida y eL estilo apostolico debenin ser comunitarios. "El vivir y trabajar todos unidos es para nosotros, salesianos, una exigencia fundamental y un camino segura para realizar nuestra vocacion" (Const. 50).

" en el n. 143 c bis, de la linea 14 en adelante: "Un segundo criterio, intimamente ligado al aspecto comunitario de la mision, es el 'mandato recibido'''.

2S Cfr ACGE 515.

20 ET 51.

Conclusion


DON BOSCO, UN MODELO Y UNA PRESENCIA

Toda obra de evangelización se construye a traves de un encuentro, «mediante el cual se llega a la conciencia personal (...) y se dej a en ella el influjo de una palabra verdaderamente extraordinaria » 1.

Don Bosco fue elegido por Dios para ir al encuentro de los jovenes mas necesitados. Dios Ie dio una humanidad particularmente apta a este fin, y con los dones de la gracia 10 hizo a1m mas capaz de anunciarles y transmitirles su vida.

Pablo VI 10 describe como una «admirable sin. tesis de aptitudes y dotes humanas y de dones sobrenaturales, genio universalmente reconocido de la pedagogia moderna y de la catequesis, pero, mas aun, genio de la santidad» 2.

Nosotros, salesianos, somos llamados a participar en su proyecto apostolico. Por eso tenemos el don de conocerlo y nos sentimos movidos a amarlo como a nuestro Padre y Fundador. No es para nos. otros un simple recuerdo del pasado, sino una pre. sencia carism<itica, viva, operante y lanzada al fu. turo.

En el nos comprendemos mejor a nosotros mismos, y encontramos el verdadero sentido de pertenencia a la Congregacion, la cual «no es solo fruto de una idea humana, sino de la iniciativa de Dios» 3.

El da senti do unitario tambien a todos y cada uno de 10s elementos de nuestra vida salesiana: desde la vida interior a la cohesion fraterna, a la corresponsabilidad y alas programaciones apostolicas.

1 EN 46.

2 Discurso del S. Padre alas Capitulares, cit. ,

Canst. 1.

De estas rakes profundas creemos que ha nacido tambien este documento y su mensaje.

La Iglesia, Don Bosco y los jovenes nos llaman a ser evangelizadores con estilo salesiano:

- ser salesianos para ser evangelizadores;

- ser evangelizadores para ser salesianos;

- encontrar a los jovenes en la realidad de su persona y de su «condicion», hoy;

- realizar la evangelizacion y hacer que llegue a ser una respuesta concreta en la vida de los jovenes, mediante el Proyecto educativo y pastoral salesiano, con sus contenidos, su estilo y su espiritu, sus caminos en los distintos ambientes en que trabajamos.

Estos compromisos interpretan el momenta historico que atravesamos y sus signos.

Los sentimos como esenciales a nuestra vida y a nuestra vocacion que se renueva. Son importantes y decisivos, y, en la perspectiva de la evangelizacion, representan una profundizacion, y, en cierto sentido, una novedad con relacion al CGE.

Dios nos llama a estos compromisos en la persona de Don Bosco, y nosotros respondemos con alegria salesiana. «Si, con la alegria, porque (...) la alegria es una necesidad incoercible del muchacho y del joven, pero tambien es un reflejo de la gracia de Dios y de la serenidad interior» 5.


, Ibidem.

, Discurso del S. Padre a los Capitulares, cit.